Una trabajadora denuncia que su conciliación laboral debía resolverse de forma urgente y ya van cuatro meses sin sentencia y ocho sin cobrar

Una trabajadora denuncia que su demanda de conciliación laboral debía resolverse de forma urgente, pero ya han transcurrido cuatro meses desde el juicio y todavía no se ha dictado sentencia. Más aún, lleva ocho meses sin cobrar porque ante la negativa de su empresa a concederle el teletrabajo, el pasado mes de octubre tuvo que pedir una excedencia para poder cuidar a su hija, por lo que no cobra desde entonces.

Es el caso de una empleada de Airbus, el mayor fabricante del mundo de aviones civiles y militares, con diferentes sedes en España y en todo el mundo.

El verano pasado, cuando estaba de baja por maternidad, pidió a su empresa teletrabajar tras su reincorporación, para poder conciliar su vida laboral y familiar. Su pequeña tiene actualmente 14 meses.

(Imagen: RTVE)

La empresa se lo denegó, por lo que tuvo que pedir una excedencia, que le fue aceptada a la primera por la mercantil, y también presentó una demanda por conciliación laboral y familiar por hijo menor de 12 años para teletrabajar. El pleito recayó en el Juzgado de lo Social número 43 de Madrid y el juicio se celebró el pasado 29 de febrero. 

Según informa, recibió «varias ofertas de la empresa, pero todas destinadas a que fuera presencial varios días».

«Confiábamos en tener sentencia en marzo y solucionar su problema, pero ya han transcurrido cuatro meses y la situación de esta mujer es dramática», señala a Economist & Jurist su abogado, Roberto Mangas Moreno, director del Despacho Jurídico Mangas.

Roberto Mangas Moreno, abogado laboralista. (Imagen: Archivo)

Este letrado recuerda que el artículo 139. 1 b) de la Ley reguladora de la jurisdicción social, que regula los procedimientos por derechos de conciliación de la vida personal, familiar y laboral, obliga a que sea inmediata la sentencia. Según dicho precepto, el procedimiento será urgente y se le dará tramitación preferente, el juicio ha de señalarse dentro de los cinco días siguientes al de la admisión de la demanda y la sentencia se dictará en el plazo de tres días.

“Todos los abogados sabemos las dificultades materiales que tienen los Juzgados de Madrid y cómo trabajan en precario, sacando trabajo a marchas forzadas, pero no es normal, a pesar de la complejidad del pleito, que uno de los procedimientos más urgentes que tiene el derecho de los trabajadores, como es el de petición de concreción horaria por conciliación laboral y familiar por cuidado de hijo menor de 12 años, por todo lo que supone, esté estancado en la mesa de su señoría más de cuatro meses», critica Roberto Mangas. 

Apunta que en este tiempo, esta misma magistrada ha celebrado otro juicio de un caso que él también ha llevado de reclamación de cantidad y, sin embargo, «este sí lo resolvió rápido».