Consejos para combatir el ciberacoso
La intimidación y la violencia que se comete a través de Internet no son menos graves que la física
(Foto: E&J)
Consejos para combatir el ciberacoso
La intimidación y la violencia que se comete a través de Internet no son menos graves que la física
(Foto: E&J)
El acoso por medio de Internet es más común de lo que parece. Sentir que estas protegido por una pantalla o escribiendo desde una cuenta falsa o anónima impulsa que este tipo de acciones se realicen con más frecuencia y por más individuos.
La llegada de Internet y la aparición de las redes sociales han abierto nuevas posibilidades de comunicación entre las personas. Pero el uso que se haga de estas herramientas podrá tener resultados beneficiosos o, por el contrario, perjudiciales para las personas.
La intimidación y la violencia que se comete a través de Internet no son menos graves que la física. Los efectos que provoca en las víctimas son principalmente psicológicos, dañando la autoestima y la capacidad de relacionarse con el resto de personas. Pero, hay veces que las consecuencias también traspasan a lo físico.
¿Cómo combatirlo?
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Ignorar
No cometas el error de responder a los mensajes que están cargados de odio o ira, eso solo le dará más motivación al agresor de seguir molestándote. Ten en cuenta que lo que busca es provocar una reacción en ti.
Eso no significa que tengas que hacerte el ciego ante lo ocurrido. Toma captura de pantalla o foto de lo que ha escrito para tenerlo como prueba si decides denunciar. A continuación, si es posible elimina el mensaje y bloquea a la persona para que no vuelva a molestarte.
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No compartir datos personales
Si algo caracteriza a Internet es que la información que se sube a la red no se elimina, siempre permanecerá el registro de que existió. Es importante que pienses dos veces qué quieres compartir en tus redes sociales antes de hacerlo.
No des información personal como tu número de teléfono, tu dirección de residencia o la empresa en la que trabajas. Puede parecer exagerado pero nunca sabes cómo alguien puede usar esos datos contra ti.
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Ajustar las redes a tus condiciones
Por suerte, las redes sociales han ido mejorando con el paso de los años y ahora mismo todas tienen la opción de modificar ciertos criterios de uso al gusto de cada usuario.
Los ajustes de privacidad te permite decidir y seleccionar quienes quieres que puedan ver tu perfil, enviarte mensajes, comentar en tus publicaciones, eliminar mensajes que no consideres adecuados o te resulten molestos, e incluso borrar y ocultar publicaciones que ya no desees que sigan estando compartidas en tu muro digital.
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Pedir ayuda
Si la situación empeora y el agresor continúa actuando, la mejor solución es pedir ayuda. Puedes contar el problema que estás viviendo a familiares y amigos, o incluso acudir directamente a la policía para denunciar. Los cuerpos de seguridad disponen de unidades especializadas en la investigación tecnológica para combatir contra este tipo de actividades en la red.
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No callarse
No hacer nada puede llevar a la víctima a pensar que no les importa a los demás lo que está ocurriendo, o peor aún, parecer que quitas gravedad al asunto y que siga dándose.
Si ves que alguien está sufriendo ciberacoso ofrécele apoyo. Esa persona se sentirá asustada, indefensa, incluso puede que no quiera denunciar lo que le está sucediendo, ya sea por miedo o por vergüenza. Habla con él para hacerle ver que quieres ayudarle e intenta que cambie de opinión.
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Educar
La mayoría de veces el ciberacoso se da en menores de edad, realizado por otros menores de edad o adolescentes. Desarrollar protocolos de actuación, es fundamental, pero también educar en convivencia a las personas. Las medidas de prevención y la información al respecto deberían ser promovidas por las figuras maternas y paternas, así como por las instituciones sociales.
Enseñar desde pequeños que el uso de Internet conlleva unos riesgos y unas responsabilidades ayudará a que en el futuro no se den situaciones de violencia, intimidación, chantaje o acoso en las redes sociales.