La Guardia Civil investiga las conversaciones publicadas por ‘Economist & Jurist’
Una vez se verifiquen las grabaciones, la Guardia Civil podría abrir un expediente disciplinario al sargento que protagoniza las conversaciones
Dirección General de la Guardia Civil. (Foto: AUGC)
La Guardia Civil investiga las conversaciones publicadas por ‘Economist & Jurist’
Una vez se verifiquen las grabaciones, la Guardia Civil podría abrir un expediente disciplinario al sargento que protagoniza las conversaciones
Dirección General de la Guardia Civil. (Foto: AUGC)
La Guardia Civil ha abierto una investigación para determinar si las conversaciones de las que se extraen los audios que Economist & Jurist está publicando en los últimos dos días han ocurrido realmente, en qué contexto se han producido y llegado el caso, qué consecuencias se podrían derivar de las mismas.
Por ahora, explican desde el cuerpo, el primer paso es verificar la autenticidad de esas grabaciones. Una vez concluyan estas indagaciones, se adoptará una decisión, que puede suponer la apertura de un expediente disciplinario. “Se trata de un proceso rodeado de todas las garantías, que puede acabar con una propuesta de sanción o no”, añaden.
Lo que a la Guardia Civil le compete es la vía disciplinaria, en la que se contempla como falta revelar información de una investigación a una persona ajena a la misma. Se trata de un deber de reserva profesional. “No se puede habar con terceras personas de nada que tenga que ver con el trabajo”.
Por lo demás, el instituto armado, asegura a este medio de comunicación que ningún juzgado se ha puesto en contacto con ellos para requerir ninguna diligencia relacionada con una investigación de orden penal, atendiendo a los delitos que, de ser cierto el contenido de los audios, se habrían podido cometer. En este supuesto, podríamos hablar de delitos como el de falsedad documental o la omisión del deber de perseguir delitos.
Economist & Jurist está publicando una serie de informaciones a partir de unas conversaciones, que se encuentran en conocimiento del Juzgado Central de Instrucción número 5, que evidenciarían ciertas actuaciones irregulares por parte de miembros de la Guardia Civil. Se trata, concretamente, de agentes de la unidad orgánica de la policía judicial de la Guardia Civil de la Comandancia de Madrid (Tres Cantos) que, según el testimonio de un sargento primero, se habrían inventado seguimientos y habrían utilizado balizas de forma ilegal. Además, según reconoce él mismo en una conversación con una persona ajena al equipo de investigación, habrían realizado un interrogatorio a un detenido en un vehículo policial. Lo que el agente dice sobre la conversación que allí mantuvieron los agentes que efectuaron en la detención y lo que el investigado declaró posteriormente en sede judicial ante el juez Pedraz coincide. Este miembro del cuerpo, Sergio Bravo, también ha afirmado que era consciente de que se producían actuaciones irregulares y de que se «trinca mucha pasta», en el contexto del caso cuarteles.
Los abogados de esta causa han mostrado ante el juez su rechazo por la forma de proceder de este equipo de investigación y consideran que los informes fruto de «seguimientos falsos, inventados» sean eliminadas de la causa.