España tiene su propio Stonehenge
Ibiza esconde entre discotecas y playas una obra de arte que se ve desde el espacio
Stonehenge de Ibiza (Foto: Marco Pachiega)
España tiene su propio Stonehenge
Ibiza esconde entre discotecas y playas una obra de arte que se ve desde el espacio
Stonehenge de Ibiza (Foto: Marco Pachiega)
Stonehenge es uno de los monumentos del Neolítico más famosos del mundo que destaca por el uso que poseía ya que se utilizaba como observatorio astronómico para predecir las estaciones. España también cuenta con su propia versión, aunque esta es una obra de arte que llama la atención de los turistas por su premisa.
La ubicación de esta peculiar estructura se encuentra en la Cala Llentia, una playa de difícil acceso y de tamaño reducido que está a menos de 10 kilómetros de la famosa Sant Josep de Sa Talaia. Los lugareños y guías turísticos han decidido apodar a la obra de arte realizada por el australiano Andrew Rogers el Stonehenge de Ibiza.
Ritmos de la vida es la traducción de la colección artística internacional de Rogers de la que, además, la construcción forma parte. Time and Space – The Speed of Light es el nombre con el que el autor ha decidido bautizar la obra. Son 13 columnas compuestas de basalto sólido que siguen una secuencia estudiada para mostrar la conexión que la humanidad tiene con el tiempo y el espacio.
Objetivo artístico
Es reseñable que la columna más alta (10 metros) tiene la parte superior recubierta de oro para señalar, en su debido momento, el solsticio de invierno.
El proyecto del que forma parte ha durado 16 años y está presente en 16 países. La diversidad de escenarios que recogen las obras va desde desiertos y fiordos hasta valles y lagos. El Stonehenge ibicenco es la pieza terrestre número 51 y destaca por haber dado trabajo a los isleños ya que, durante la construcción de las diversas obras, se han creado hasta 7.500 empleos y, casi todas, de los lugares en los que se querían emplazar las obras.
El australiano ha confesado que todas ellas están ideadas para que puedan ser percibidas desde el espacio y ha desvelado que el objetivo primordial de su colección es que las personas especulen sobre la historia y el patrimonio.
Además de que cada pieza ha sido confeccionada para que se complemente con el entorno que rodean, también poseen un fuerte componente intelectual ya que permiten un espacio para la reflexión. La obra de Ibiza se remonta a civilizaciones pasadas que dan lugar a la creación de mitos y de cómo, a pesar de no tener los medios necesarios, lograban el conocimiento astronómico.