Connect with us
Jurisprudencia

La Justicia reconoce en situación de incapacidad permanente absoluta a un trabajador que padece bulimia

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ratifica que se encuentra imposibilitado para desarrollar cualquier actividad laboral

(Imagen: E&J)

María González Villasevil

Redacción editorial E&J




Tiempo de lectura: 3 min



Jurisprudencia

La Justicia reconoce en situación de incapacidad permanente absoluta a un trabajador que padece bulimia

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña ratifica que se encuentra imposibilitado para desarrollar cualquier actividad laboral

(Imagen: E&J)



El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Cataluña ha ratificado el derecho de un trabajador a ser reconocido en situación de incapacidad permanente absoluta porque la enfermedad que padece, bulimia nerviosa, le impide desarrollar cualquier actividad laboral.

La sentencia dictada por la Sala de lo Social, disponible en botón ‘descargar resolución’, confirma el fallo ya dictado en primera instancia por el Juzgado de lo Social número 2 de Girona que reconoció al trabajador inhabilitado por completo para toda profesión u oficio.



Pues, las reducciones funcionales que padece han disminuido muy severamente su capacidad laboral, “anulándola en la realidad, a causa de sus amplias limitaciones”, lo que le imposibilita para desarrollar una actividad laboral normalizada, “aunque sea sedentaria o liviana”.

(Imagen: E&J)



Se encuentra imposibilitado para todo tipo de trabajo

El trabajador, que en la actualidad tiene 60 años, venía prestando servicios como administrativo, sin embargo, desde los años presenta un trastorno alimenticio, bulimia nerviosa persistente de larga evolución, que le produce padecer vómitos unas dos veces al día, espontáneos y sin necesidad de haber comido en exceso.



Asimismo, el hombre padece un trastorno depresivo mayor recurrente de larga duración, ansiedad generalizada y alteración del estado anímico con ataques de pánico, así como una patología osteoarticular, es decir, un trastorno que afecta al sistema musculoesquelético y/o articular.

A ello hay que sumar que el actor también que presenta problemas amnésicos; dificultad de acceso al almacén léxico-semántico, tanto para nombres propio como comunes; fatiga cuando requiere concentración mental; dificultad en la compresión lectora; y dificultad en la simultaneidad de tareas. Por lo que, sin duda, padece un evidente deterioro cognitivo, y una merma importante en la capacidad de orientar una conducta con un fin determinado de forma independiente.

Por todo ello, el trabajador solicitó que se le reconociera la incapacidad permanente absoluta, sin embargo, el Instituto Nacional de la Seguridad Social desestimó la solicitud de incapacidad.

(Imagen: E&J)

La Justicia reconoce al trabajador en situación de IP absoluta

No obstante, el Juzgado de lo Social número 2 de Girona, al contrario que el INSS, dio la razón al administrativo y declaró al mismo en situación de incapacidad permanente en grado de absoluta para todo tipo de trabajo, derivada de enfermedad común. En consecuencia, le reconoció una pensión de 1.911 euros mensuales.

La sentencia del Juzgado fue recurrida por el INSS pero el recurso ha sido desestimado por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, cuya Sala de lo Social ha ratificado que el trabajador se encuentra en una situación de IP absoluta que le imposibilita por completo para cualquier profesión u oficio.

Los magistrados del TSJ catalán afirman que en estas circunstancias físicas y psicológicas en las que se encuentra el hombre, “sus reducciones funcionales disminuyen muy severamente su capacidad laboral, anulándola en la realidad, a causa de sus amplias limitaciones, lo que convierte en meramente teórica la posibilidad de desarrollar una actividad laboral normalizada, aunque sea sedentaria o liviana, con unos mínimos de rendimiento, eficacia y rentabilidad”.

Última hora jurídica



Recibe nuestra newsletter de forma gratuita