CCOO y UGT se movilizan este jueves frente a las sedes patronales para desbloquear la negociación de la reducción de jornada

Tras una de las reuniones más largas de estos nueve meses de negociaciones entre el Gobierno, las patronales CEOE y CEPYME, y los sindicatos UGT y CCOO, celebrada este martes, la posibilidad de que se consiga la reducción de jornada laboral este año empieza a complicase.

La negativa de los empresarios a aceptar la reducción ha elevado las posibilidades de que dicha reducción se haga en dos tramos: de 40 a 38,5 horas en el 2025; y reducir hasta 37,5 en el 2026. Esta hipótesis empieza a cobrar fuerza aunque el propio secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, desmentía esa hipótesis en su cuenta de X (antes Twitter).

Tras un encuentro de casi cuatro horas, Pérez Rey ha explicado que el Gobierno ha delimitado en la reunión de hoy «con mayor precisión» los elementos que forman parte de esta negociación: rebajar la jornada a 37,5 horas semanales; regular el derecho a la desconexión digital; el registro horario telemático; y un plan de acompañamiento para pymes.

Dicho plan, que contempla bonificaciones al empleo fijo que generen las pequeñas y medianas empresas como consecuencia de la reducción de jornada, ha sido concretado «de manera más precisa» por parte del Ministerio, pero Pérez Rey no ha querido entrar en el detalle «por respeto» a la negociación: «Las organizaciones patronales, que son las más reticentes a aceptar la reducción de jornada, han aceptado valorar la propuesta que les hemos trasladado. No voy a ser muy preciso con ella por respeto a la confidencialidad de la negociación», ha insistido Pérez Rey.

Desde el Gobierno se es consciente de lo importante que sería alcanzar este acuerdo a tres bandas sobre la reducción de jornada en la Mesa del Diálogo Social. Es previsible que en su tramitación parlamentaria tendría más posibilidades de salir adelante, aunque hoy por hoy el Parlamento, que está fragmentado en mil pedazos, no es el escenario ideal para convalidar cualquier norma.

La negociación para tratar de reducir la jornada laboral por ley a 37,5 horas ha ido experimentando distintos altibajos y el Ministerio liderado por Yolanda Díaz ha ido modulando sus velocidades.

Si en primavera amagó con un ultimátum y cerrar rápido la negociación, ahora busca oxígeno como puede y dará paso a los sindicatos para que inicien sus propias protestas con las que aumentar la presión sobre la patronal. Ésta apenas se mueve, si bien distintas fuentes conocedoras de las conversaciones sí destacan su «talante más constructivo”.

Desde el Ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz, aquí con los agentes sociales, ya se advierte que la reducción de jornada arrancará en el año 2025. (Imagen: Ministerio de Trabajo)

Los sindicatos se movilizan ya

Fernando Lujan, vicesecretario general de UGT, explica Economist & Jurist que no se ha avanzado demasiado en esta reunión maratoniana. Y que el jueves 26 tendrán lugar las primeras movilizaciones de UGT y CCOO en toda España. Días atrás tuvieron lugar asambleas informativas conjuntas entre los dos sindicatos para explicar el porqué de este paso. En Madrid coincidieron Unai Sordo, secretario general de CCOO, y Pepe Álvarez, secretario general de UGT.

Lujan recordó que llevamos nueve meses negociando la reducción de la jornada: “Es la apuesta clara por el diálogo social y por la negociación colectiva. Nueve meses que llevamos para que las organizaciones patronales acepten la opinión mayoritaria de la ciudadanía española. Como no hemos conseguido avances nos vamos a movilizar. Apelamos a los ciudadanos a que se sumen a las concentraciones”.

Para este dirigente sindical los grupos políticos que están en el Parlamento español van a tener que manifestarse y decantarse con el apoyo a esta medida que muchos ciudadanos quieren: “Somos conscientes que el registro de la jornada debe ser eficaz. No puede ser que haya miles de horas semanales que no se registran, ni se cotizan ni se abonan a las personas trabajadoras”.

Esa cuestión fue la que hizo que UGT plantease una reclamación colectiva ante el Comité de Derechos Sociales; una reclamación colectiva para que ese registro de jornada sea eficaz y recoja las horas extras trabajadas: “Se siguen generando más de 6 millones de horas extras semanales, de las cuales 2,6 millones no se abonan ni se disfrutan, lo que supone un ‘hurto’ por parte de las empresas de 3.000 millones de euros en horas no cotizadas. Queremos conseguir la reducción de jornada antes de que finalice este año”.

Por su parte la secretaria de Acción Sindical y Empleo de CCOO, Mari Cruz Vicente, es consciente que con la situación de nuestras Cortes, que la tramitación parlamentaria del proyecto hará que la reducción de jornada a 37,5 horas semanales se aplique ya para el año 2026, mientras que el tramo previo, el recorte desde las 40 horas actuales a las 38,5 horas, llegará para el año 2025, lo que supondría retrasar un año los planes del Gobierno.

«Por mucha prisa que nos demos en el proceso de negociación, falta un trámite parlamentario que, si conseguimos que sus señorías se pongan del lado de la ciudadanía y voten a favor de la reducción, será un trámite corto, pero también podemos situarnos en una posición distinta y el procedimiento puede ser un poquito más largo», ha reconocido.

Las organizaciones sindicales señalan que ha llegado el momento de que España aborde esta cuestión de la reducción de la jornada laboral; pero la cuestión es si España puede abordar esta cuestión, «yo estoy convencida de que sí», señala la secretaria de Acción Sindical y Empleo de Comisiones Obreras, «nuestro país tiene la misma jornada legal de trabajo desde 1983. La economía y la empresa española han cambiado diametralmente durante estos años. La cuestión es cómo se reparte todo esto: a través de los salarios y a través de la reducción de jornada».

Los propios sindicatos denuncian que hay miles de horas extras sin cotizar, más de 3.000 millones sin cotizar. (Imagen: E&J)

CEOE sigue sin aceptar

Por su parte, el secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, ha afirmado tras concluir la reunión de Diálogo Social sobre reducción de jornada, que ha percibido «un cambio de tono» en las organizaciones empresariales, con una actitud «más constructiva», y sigue confiando en alcanzar un acuerdo a tres bandas en el que estén CCOO, UGT, CEOE y Cepyme.

No obstante, pese al mayor optimismo del Ministerio de Trabajo, fuentes de la CEOE han indicado a Economist & Jurist que en la reunión de este martes se han vuelto a oponer a la reducción legal de la jornada. Asimismo, estas mismas fuentes, han asegurado que en la Mesa de negociación no se ha concretado por escrito «ningún planteamiento de los avanzados en la última reunión».

Mientras tanto el secretario de Estado ha destacado que la reducción de jornada es «esencial para mejorar la vida de los trabajadores» y es, además, un debate que «trasciende todas las ideologías». «Por eso doy la bienvenida al Partido Popular (PP) a este debate», ha señalado Pérez Rey.

La próxima reunión de la Mesa de reducción de jornada tendrá lugar el próximo 11 de octubre, según han desvelado los representantes de las organizaciones sindicales, que han subrayado que aunque no se ha puesto una fecha tope para poner fin a las negociaciones, no pueden durar sine die. «En la próxima reunión tiene que haber avances considerables para que podamos pensar que hay posibilidades de avanzar», ha declarado la representanta de CCOO.

Las patronales empresariales se muestran contrarias a que esta medida de la reducción de jornada la imponga el Gobierno, que podría hacerlo. Con todo, insisten en que es un asunto que debe abordarse en la negociación colectiva, sector por sector, en un contexto en el que la propia tendencia de los convenios se va aproximando cada vez más a jornadas más reducidas.

Con este tiempo que se abre a esta nueva reunión de octubre parece claro que el Ministerio de Trabajo de Yolanda Díaz ultime la propuesta esbozada en las dos últimas reuniones de la Mesa del Diálogo Social de ofrecer una serie de bonificaciones a las pymes que tengan que contratar nuevos trabajadores por esta acción de la reducción de jornada.

También parece claro que la reducción de jornada arrancará en el 2025. Sobre esta medida de apoyo a las pymes, de momento pocos detalles han trascendido en estas reuniones sobre dicha medida, que podría ayudar a que las pymes realizaran la reducción de jornada de forma menos lesiva para sus intereses.