Los IX Premios Hay Derecho recaen en Societat Civil Catalana y en la abogada Celia Carbonell, ejemplos de lucha e integridad

Por cuarto año consecutivo el llamado Espacio Abante, auditorium de Abante Asesores, en la capital de España, se quedó pequeño para albergar la novena edición los premios promovidos Fundación Hay Derecho, entregados este jueves noche en Madrid. Estos galardones se han convertido un reconocimiento que visibiliza a aquellas personas y entidades que destacan por su defensa del Estado de derecho y que luchan contra la corrupción.

En esta ocasión, los IX Premios Hay Derecho han recaído ex aequo, como ya paso en su día con el abogado Diego Gómez, luchador contra la cita previa administrativa y Consuelo Ordoñez, presidenta de Covite, asociación de víctimas de ETA, en la entidad cívico cultural Societat Civil Catalana (SCC) por su defensa de los valores democráticos en plena Cataluña secesionista, y en la abogada Celia Carbonell, defensora de un marroquí que estuvo quince años en prisión por un crimen que no cometió.

Además, y por primera vez, la Fundación ha entregado un premio especial a la trayectoria en la defensa del Estado de derecho, que ha recaído en Joan Llinares, exdirector de la Agencia Valenciana Antifraude y profesional de reconocida solvencia en su lucha contra la corrupción en las administraciones. Un ejemplo a seguir. El premio a Llinares fue entregado por Segismundo Álvarez, presidente de la Fundación, quien resaltó la calidad de este profesional como servidor público a lo largo de toda su carrera profesional.

En el transcurso de la gala, tras la intervención de Elisa de la Nuez, secretaria general de Hay Derecho, que presentó las diez candidaturas nominadas, fue Safira Cantos, su directora quién presentó a los seis finalistas, con otros tantos vídeos donde los candidatos explicaban su gesta y porqué estaban ahí.

Así, los asistentes a este evento pudieron conocer más de cerca a Ignacio Stampa, fiscal del caso Tándem, el mayor caso de corrupción en nuestro país y su lucha para evitar que Dolores Delgado y Álvaro García Ortiz, los dos últimos fiscales generales le sacarán de la carrera fiscal. Stampa contó a E&J su historia en una televisiva entrevista que no tiene desperdicio. Su libro El Complot, que ha presentado en una treintena de ciudades españolas, refleja los duros momentos que vivió. En los últimos dos años ha ganado seis sentencias en la vía contenciosa al fiscal general del Estado donde reclamaba tener acceso a toda la información sobre su causa.

Por su parte, el catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Granada Agustín Ruiz  Robledo ha liderado junto  los catedráticos Manuel Aragón y Enrique Gibernat una obra La amnistía en España, Constitución y Estado de Derecho, que logra un resultado espectacular: más de sesenta autores de reconocido prestigio aportan 78 textos críticos con la amnistía surgida del pacto PSOE-Junts. El lector podrá juzgar por sí mismo la calidad de los argumentos que en ellos se desarrollan. Gracias a la lectura de la obra se aprecian las carencias constitucionales de la propia ley de amnistía.

Foto de familia con los premiados, finalistas otros candidatos, junta directiva y patronos de Fundación Hay Derecho. (Imagen: Luisja Sánchez/E&J)

El abogado Francisco Ignacio López Lera ha sido otro de los finalistas. En su día sirvió como agente de la Policía Local de Irún, donde fundó la unidad de escoltas. En 2010, comenzó su carrera como abogado, compatibilizándola con su trabajo en la Policía Local hasta 2015. Francisco Ignacio López se ha mostrado incansable en su lucha contra la exigencia del euskera para acceder a la función pública en el País Vasco. Ha logrado sentencias favorables contra la Diputación Foral de Guipúzcoa y el Ayuntamiento de San Sebastián, abriendo camino para la igualdad de oportunidades en el acceso a empleos públicos sin discriminación lingüística.

Por su parte, Joaquín Meseguer y Francisco Delgado luchan por la transparencia de las instituciones públicas. Joaquín Meseguer es secretario ejecutivo de RAGA España y coordinador del grupo de trabajo de transparencia y acceso a la información en la FEMP. Fue director general de Transparencia y Buen Gobierno de la Junta de Castilla y León. Es politólogo, experto en transparencia y derecho de acceso, y un reconocido investigador y consultor. Es el impulsor del Congreso Internacional de Transparencia y Secretario de la Revista Española de la Transparencia. Su obra La Transparencia y nosotros que la quisimos tanto, conmemora el décimo aniversario de la Ley de Transparencia en España con entrevistas a diferentes expertos.

Este evento ha congregado a muchos juristas vinculados de alguna manera a Hay Derecho. como son el  magistrado de lo contencioso y juez decano de Melilla, Fernando Portillo; el fiscal del Supremo Salvador Viada, la abogada y vicepresidenta del Circulo de Empresarios, Isabel Dutilh, el abogado Santiago Martínez Lage, padre del derecho de la UE en nuestro país,  Ignacio Fernández, Jaime Carvajal, abogado y empresario, el abogado Alberto García, decano del Colegio de Procuradores o Ana Isabel Gutiérrez, psicóloga forense, entre los numerosos invitados que acudieron a esta gala culminada con una coctel en la azotea del edificio.

Premios muy merecidos

Sobre los premiados hay que señalar que el Premio a la Trayectoria Profesional fue a parar a Joan Llinares. El hasta fecha reciente director de la Agencia Valenciana Antifrau, Joan Llinares ha sido reconocido con el premio especial a la trayectoria «por su excepcional dedicación a la lucha contra la corrupción a lo largo de su dilatada trayectoria profesional», destaca el jurado. Llinares ha actuado para desenmascarar tramas de corrupción independientemente del color político de las instituciones afectadas. Es, por tanto, un ejemplo de cómo los controles deben ponerse en marcha gobierne quien gobierne y afecten a quién afecten.

Sacó a la luz un entramado de corrupción en el seno del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM) en su etapa de gerente de dicho museo, y fue muy destacado y valioso su trabajo desenmarañando la trama de corrupción urdida en el Palau de la Música Catalana, donde su firme desempeño permitió sacar a la luz diez años de corrupción en la entidad musical. Su legado más reciente han sido siete años al frente de la Agencia Valenciana Antifraude, pionera en España en la protección a informantes de corrupción. Su combativa lucha contra la corrupción al margen de signos políticos le ha valido enfrentar dificultades.

Aspecto del auditórium Abante, de nuevo a reventar para seguir estos premios Hay Derecho. (Imagen: Fundación Hay Derecho)

En sus palabras de agradecimiento, el propio Llinares recordó que a lo largo de su longeva actividad profesional se ha encontrado con la corrupción en distintas formas y la falta de mecanismos y controles que frenasen esas prácticas. “En este trabajo tienes que tomar, en soledad, decisiones importantes, pese a que cuentes, como es mi caso, con un equipo de profesionales importantes». Llinares pasó de desmontar la corrupción del Palau de Barcelona, a liderar la Agencia Valenciana Antifraude. “Nos debemos al artículo 103 de la Constitución, que señala que servimos intereses generales dentro del marco democrático actual», indica.

El presidente de Hay Derecho, Segismundo Álvarez, ha destacado en la gala que Llinares es «un referente en toda España». Se trata de «una persona que va a marcar una tendencia en nuestro país», ha asegurado. Al recoger el premio, Llinares ha denunciado que «hay muchas personas que necesitan de su apoyo y solidaridad, son muchísimas en España. Están sufriendo la ausencia de amparo desde las instituciones del Estado por estar defendiendo el Estado de derecho. Hay que actuar para que ningún denunciante de corrupción sufra represalias».

Societat Civil Catalana, 10 años de defensa de la convivencia

El profesor de Filosofía y colaborador habitual de medios de comunicación David Mejía ha desvelado el fallo del Jurado –que había sido salvaguardado en estricto secreto hasta la gala– y ha hecho entrega del premio a los galardonados. La entidad  Sociedad Civil Catalana, SCC, premiada en esta edición, destaca por su defensa de los principios constitucionales de igualdad y unidad en Cataluña. El Jurado del premio valora «su acción continuada de defensa del marco constitucional en Cataluña en respuesta a la deriva independentista y al procés».

Societat Civil Catalana es una organización transversal que promueve la convivencia y el diálogo en Cataluña, defendiendo los principios constitucionales de igualdad y unidad, y combatiendo el independentismo en los momentos más tensos de los últimos años. Fundada en 2014, SCC trabaja para fomentar la integración y el respeto por la pluralidad y los valores constitucionales y frenar los ataques contra el estado de Derecho.

Entre otras muchas cosas, SCC ha liderado una campaña contra la Ley de Amnistía, argumentando que rompe los principios de igualdad ante la ley y atropella la democracia. Actúan como acusación particular en procesos contra líderes del procés por malversación y terrorismo, y han solicitado al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que examine la ley de amnistía. Para Eloy Moreno, abogado de la asociación “un país avanza si tiene ciudadanos íntegros y generosos».

Tres juristas unidos contra la corrupción: el fiscal Ignacio Stampa, Segismundo Álvarez, presidente de Hay Derecho y Joan Llinares, exdirector de la AG Valenciana Antifraude. (Imagen: Luisja Sánchez/E&J)

«Nos hemos enfrentado a muchos obstáculos. El nacionalismo copa todas las administraciones con una total deslealtad al marco constitucional», ha destacado Elda Mata, su presidenta. «Necesitamos, en un país democrático, una sociedad civil organizada, fuerte, que fiscalice realmente que los políticos actúen en beneficio de la sociedad, del ciudadano, y no del propio partido», ha recalcado.

Por su lucha por restablecer el Estado de derecho, devolver la neutralidad a las instituciones catalanas y promover el bilingüismo real, SCC ha logrado alzarse con el IX Premio Hay Derecho.

Celia Carbonell y el error judicial

Por su parte, la abogada Celia Carbonell, quien asumió hace años la defensa de Ahmed Tommouhi, un ciudadano marroquí injustamente condenado por violación que pasó 15 años en la cárcel, ha sido la otra galardonada en el IX Premio Hay Derecho. El hurado del premio pone de relieve que la premiada «ha accionado el propio sistema judicial para hacer frente a un grave error judicial».

Desde su despacho en Elda (Alicante), Celia Carbonell ha luchado incansablemente por los derechos de los ciudadanos. Con tesón logró una sentencia pionera que anuló una cláusula de afianzamiento en préstamos hipotecarios, protegiendo el patrimonio de muchos padres. Actualmente, lidera un procedimiento judicial contra una filial de Agbar, derivado de la llamada operación Pokémon.

A la hora de recoger el premio reconoce que ha tenido una sensación agridulce «El éxito de conseguir esta sentencia es una sensación maravillosa y decepcionante al mismo tiempo. No me creo que hayamos tardado 31 años en conseguir esto», ha explicado Carbonell. «Ser finalista en el Premio Hay Derecho es esa puerta para poder hacer ver al resto de los ciudadanos que hay que cambiar muchas cosas, que el sistema no funciona», ha concluido.

Gracias a su tesón, el Tribunal Supremo revisó el caso y absolvió a su defendido de todos los delitos. El Jurado del premio pone de relieve que la premiada «ha accionado el propio sistema judicial para hacer frente a un grave error judicial». Hay quedarse cuenta que el concepto de error judicial no está en el código Penal», ha explicado Celia Carbonell. «Ser finalista en el Premio Hay Derecho es esa puerta para poder hacer ver al resto de los ciudadanos que hay que cambiar muchas cosas, que el sistema no funciona», manifiesta.

Y es que esta abogada penalista pone el dedo en la llaga. «Es fundamental darle una revisión a fondo de nuestro sistema judicial. Necesitamos mas jueces, fiscales, funcionarios, mas medios para que a ningún inocente le pueda volver a pasar esto”, comentó entre aplausos.

Joan Llinares habló del problema de la corrupción cuando recibió el premio Hay Derecho: fallan los controles y aflora la corrupción en las corporaciones publicas sobre todo”. (Imagen: Hay Derecho)