Paloma Sánchez-Garnica gana el Premio Planeta 2024 con una historia de amor ambientada en la Guerra Fría

La escritora y abogada, Paloma Sánchez-Garnica, recogió ayer el Premio Planeta 2024, dotado con un millón de euros, por su nueva obra, Victoria, pasando por encima a Fuego en la garganta de Beatriz Serrano, que ha quedado finalista y ha sido premiada con 200.000 euros.

La escritora presentó la novela con el título Buenas noches y buena suerte, haciendo referencia al periodista Edward R. Murrow, y bajo el pseudónimo Anna Ajmàtova.

La novela que sucede Últimos días en Berlín – con la que quedó finalista en 2021 – será puesta a la venta el 6 de noviembre de este año. Y, precisamente de su última obra surgió la idea de escribir Victoria, cuando se dio cuenta de que “la semilla del odio no solo se encontraba en la Alemania nazi y el corazón de Europa, también existían graves grietas en lo que se consideraba la cuna de la libertad y de los derechos: el profundo sur de los Estados Unidos con sus leyes de segregación racial o Nueva York y el macartismo; esa caza de brujas que desató una delirante persecución anticomunista que causó el sufrimiento a cientos de miles de inocente”

Paloma Sánchez-Garnica es licenciada en Derecho y Geografía e Historia y a pesar de haber trabajado como abogada un tiempo, decidió dedicarse a la literatura. Tras títulos como La brisa de Oriente (2009) y La sonata del silencio (2014) – todos muy populares – no ha sido hasta este año que por fin se ha hecho con el premio de mejor dotación económica del mundo – incluso por encima del Nobel de Literatura. “Soy el claro ejemplo de que persistir merece la pena”, declaró anoche Sánchez-Garnica al recoger el premio.

(Imagen: EFE)

Victoria da nombre a la protagonista de la historia en un thriller histórico al puro estilo de sus obras anteriores. La novela nos transporta al Berlín de la posguerra, en los inicios de la Guerra Fría. La protagonista, Victoria, consigue un salvoconducto para viajar a Estados Unidos, pero una vez allí es obligada a trabajar como espía para los rusos mientras vive una intensa historia de amor. Al regresar a Europa, se convierte en una exitosa locutora de radio en un Berlín marcado por la construcción del muro que divide la ciudad.

Paloma Sánchez-Garnica destacó en la entrega del premio que, aunque no es una novela sobre periodistas, sí refleja la importancia de esta profesión que es uno de los derechos fundamentales de una sociedad civilizada, uno de los valores esenciales de la sociedad  “el derecho a la información veraz y contrastada”. Citando el lema del periodista Ed R. Murrow, subrayó la importancia de evitar que «un país de ovejas engendre un gobierno de lobos».

La novela también explora temas como el odio y la persecución, ambientada en una época de tensiones no solo en Europa, sino también en Estados Unidos, donde el racismo y el macartismo afectaban a miles de personas inocentes. A pesar de este contexto histórico, la autora dejó claro que Victoria es, ante todo, una historia de amor y de la fuerza de los lazos emocionales, que dignifican a los seres humanos y perduran incluso en tiempos difíciles, abarcando los sentimientos más universales de la humanidad.