Jesús Lahera, catedrático de derecho del trabajo: “La reducción de la jornada laboral debe respetar los convenios colectivos vigentes”

«Los retos en el 2025 para empresas y expertos en relaciones laborales van a ser notables, pero el hito más importante va a ser la reducción de jornada laboral, elemento clave en todas las relaciones laborales», explicó Jesús Lahera, catedrático de derecho del trabajo y Seguridad Social de la Universidad Complutense de Madrid y of counsel de Abdón Pedrajas Littler, en el transcurso de la jornada que organizó este pasado viernes la Asociación Nacional de Laboralistas (Asnala) en la Escuela de Práctica Jurídica. Un evento que tuvo lugar con la colaboración de la Asociación española de directores de recursos humanos (AEDRH).

Tras las presentaciones de Ana Gómez, presidenta de Asnala y socia de Ceca Magán Abogados, y José Avilés, miembro de la Junta Directiva de la AEDRH y HR director Rhenus CL WS Spain, que ahondaron en la necesidad de una formación continua del experto en relaciones laborales, intervino Jesús Lahera, moderado por Begoña Díaz, directora de cumplimiento normativo de la Agencia EFE.

Con posterioridad tuvieron lugar otras dos mesas de debates. En la primera, Alicia Moro, miembro de la Junta Directiva de Asnala y socia de Sagardoy Abogados, abordó la reforma legal que obliga la audiencia previa a los despidos disciplinarios. Fue moderada por José Alcántara, asociado miembro de la Comisión Jurídico Laboral de AEDRH, así como director de recursos humanos (RR. HH.) para España en Konica Minolta.

En una tercera mesa se analizó la cuestión de la indemnización del despido improcedente en el contexto de la Ley de Industria. Moro moderó este nuevo debate en el que participaron Marcos Huergo, presidente de LHH España SVP CTM&LD, y Juan Suanzes, socio director en CRHEO y fundador de ADiReLab, Asociación de directivos de recursos laborales (RR. LL.).

Jesús Lahera, en declaraciones a Economist & Jurist, comentó tras su intervención que «hay que hacer bien la reducción de jornada laboral. Si al final se lleva a cabo por Ley, sin entrar en el debate de si es positiva o negativa, el espacio idóneo es la negociación colectiva. Tendría que respetar los convenios vigentes y no alterar el tiempo de trabajo. Marcaría la negociación del futuro convenio y habría que hacerlo dando un protagonismo a la negociación colectiva en la distribución de la jornada».

Ana Gómez y José Avilés, anfitriones de esta jornada en la Escuela de Práctica Jurídica de la UCM. (Imagen: Asnala)

Al final de lo que se trata es de “distribuir ese tiempo de trabajo de forma pausada; que no fuera un efecto inmediato, sino que se llevara a la negociación cumplido el convenio vigente. A este respecto creo que es interesante que se ayudase a las pymes, tal y como el Ministerio comentó en un primer momento en esa negociación y que luego se han retirado. Si termina siendo una Ley, tendrá que haber un plan de acompañamiento económico a las pymes, porque el coste que supone es importante. Habrá empresas que lo puedan asumir, con nuevos turnos, pero otras que no, porque al final es un incremento de coste”.

Para Lahera, “el debate que se ha hecho es a la inversa. Son los incrementos de productividad los que rebajan el tiempo de trabajo. Veo complicado que la imposición de esta reducción de jornada vaya a generar más productividad. La reducción de jornada no se hace igual en una gran empresa que en una pyme, eso es algo que hay que tener en cuenta y es una idea esencial en este asunto; por eso debe participar la negociación colectiva. Para que volviera CEOE a la negociación habría que reorientar la negociación y tener en cuenta sus peticiones, de implementar la reducción tras finalizar los convenios colectivos”.

Según los últimos datos, es factible que la Comisión Delegada de Economía vea el Anteproyecto presentado por el Gobierno y los sindicatos el próximo 27 de enero, requisito previo para que luego fuera al Consejo de Ministros. “Es fundamental la inspección de trabajo para que pueda supervisar esa obligación y la de la futura subida del salario mínimo interprofesional (SMI). Es importante escuchar al ministro de Economía, Carlos Cuerpo, que lo quiere hacer de otra forma más pausada y con ayudas a las pymes. Es previsible que esa reforma se apruebe este año, pero se pondrá en marcha en el 2026”, comenta Lahera.

Desde su punto de vista, “la clave de esa aprobación de la reforma de reducción de jornada a las 37,5 horas es si se respetan los convenios vigentes. Hay convenios que acaban en el 2027 o 2028, por lo que tendrán que esperar a implementar la citada reforma hasta que concluyan y, a partir de ahí, negociar para la nueva jornada. No podemos olvidar que esta reducción de jornada es el elemento clave en la actualidad de las relaciones laborales, de ahí que haya que hacerlo bien para evitar cualquier tipo de conflicto. Primero, habrá que ver si hay acuerdo en el Gobierno para luego ratificarlo en el Parlamento, que tampoco será sencillo. Las próximas semanas serán clave”.

Para Lahera, “esta reforma debe respetar los convenios vigentes y no alterar los tiempos de trabajo”. (Imagen: Asnala)

Muchos retos a abordar para la empresa

En su exposición, el profesor Lahera, autor de diecisiete monografías —las dos últimas sobre temas clave como la reforma de la negociación colectiva y su ultima obra sobre la transformación de los tiempos de trabajo, editadas por Tirant Lo Blanc— se refirió a los aspectos clave de las relaciones laborales, tanto desde el punto de vista normativo como jurisprudencial, que cada vez es más importante, pues para él la negociación colectiva que es fundamental.

Desde el punto de vista normativo, diferenció tres planos: lo ya aprobado, lo que está en tramitación parlamentaria y lo que está en expectativa de dicha tramitación. «De lo ya aprobado, aunque están pendiente de convalidación parlamentaria esos dos decretos leyes, el 9 y 11 de 2024, hay medidas de aplicación en el 2025 importantes. La primera tiene que ver con una subida de cotizaciones significativa al aplicarse en su plenitud las medidas del DL 2/2023. Hay una cotización de solidaridad que entra en vigor en enero del 2025 y que será gestionada por los departamentos de RR. HH. en renta alta. Este año es el 0,92% de cotización entre la base máxima y el 10% superior, el 1% si la diferencia es del 10% de base máxima hasta el 50% y el 1,17% para tramos superiores al 50%», explica.

En este sentido, este experto recuerda que «se sigue aplicando el mecanismo de equidad intergeneracional que afecta a todos los trabajadores y a sus nóminas con el 0,67% y el 0,13% del trabajador. Al final, estas tres medidas dejan claro que hay una subida importante de las cotizaciones para la sostenibilidad de las pensiones públicas. Po su parte, el RD 11/2024 establece medidas importantes en jubilación. Este RD va a ser convalidado porque ya lo ha dicho el PP. Se trata de buscar fórmulas de compaginar la pensión de jubilación y el trabajo, siempre de forma voluntaria, por cuenta ajena o cuenta propia».

También revela que se han aprobado nuevos permisos retribuidos en el DLey 8/2024 y 6/2024: “Es el permiso retribuido climático, a raíz de la DANA, que se convierte en general como permiso de cuatro días porque se impide acceder al centro de trabajo. Este permiso retribuido se combina por el ERTE de fuerza mayor. Hay un nuevo permiso retribuido por la preparación a la donación de órganos que se refiere a la Ley 6/2024 en cuanto a la donación de órganos que reconoce una nueva situación de incapacidad temporal relacionada con esta donación”.

Panorámica de la jornada que congregó a expertos en relaciones laborales y directores de recursos humanos convocados por Asnala y AEDRH. (Imagen: Asnala)

A su juicio, “hay novedades significativas en la disposición final de la Ley 1/2025 que contiene muchas medidas procesales y, a nivel laboral, dos medidas importantes. Se reforma el artículo 50 del Estatuto de los Trabajadores, que permite a los trabajadores resolver el contrato con una indemnización de despido improcedente por incumplimiento del empresario y se ha declarado la falta de pago. Se establece como causa de extinción cuando no se pagan tres mensualidades concretas en el periodo de un año, criterio que manejaba el Supremo y que ahora se fija en la Ley”.

Al mismo tiempo, Lahera señala que “se ha recuperado el despido nulo ante la solicitud por adaptación de conciliación familiar, a través del artículo 34.8 del Estatuto de los Trabajadores, cuestión que por error se retiró de una norma y ahora se vuelve a incorporar. La fecha de entrada en vigor que se ha incluido es de abril del 2024. Ahora se vuelve al despido nulo automático por estar vulnerando derechos fundamentales”.

Asuntos en tramitación parlamentaria

Sobre los asuntos en tramitación parlamentaria, este jurista comenta que “está en el Congreso el Proyecto de Ley de incapacidad permanente, que reforma el artículo 49 adecuando la regulación a la sentencia del TEDH donde se fijan los ajustes razonables previos a la extinción del contrato de las personas con discapacidad en sus distintos grados. Ahí se establece que el trabajador pueda pedir esos ajustes razonables, que deberá gestionar la empresa a través de su departamento de RR. HH. para una recolocación laboral”.

Al mismo tiempo, reconoce que hay una Directiva Europa 2019/1952 sobre condiciones laborales que está bloqueada políticamente y que reforma algunos artículos del Estatuto de los Trabajadores: «Es una directiva europea que en algún momento se aprobará en nuestro país para evitar la multa económica. También hace falta destacar tres proyectos de ley: la Ley de Familia, que tiene cierta incidencia laboral pues incrementa los permisos de paternidad y maternidad de 16 a 20 semanas, así como la Ley de Familias Monoparentales y la Ley sobre la retribución del permiso parental».

Jesús Lahera cree necesario que las pymes tengan un programa de acompañamiento a modo de ayuda para acometer esta reforma de la reducción de jornada. (Imagen: Asnala)

Sobre los otros dos proyectos de ley, Lahera recuerda que fueron aprobados por el Consejo de Ministros de 10 de diciembre del 2024 y que ya están en tramitación parlamentaria. Son el Proyecto de Ley de Industria y el de Movilidad Sostenible. Son proyectos con cierta dimensión laboral. El primero analiza el cierre de la actividad laboral con mecanismos concretos. Por su parte, la movilidad sostenible lo que plantea es que las empresas definan sus planes de movilidad sostenible para mejorar las expectativas del entorno climático”.

Expectativas parlamentarias

Sobre las futuras iniciativas, recuerda que “parten de anteproyectos de ley que se inician en un Ministerio y que deben ser consensuados en el Gobierno hasta que se aprueben en Consejo de Ministros como proyectos de ley para que los grupos parlamentarios incorporen sus sugerencias. Hay dos importantes: uno sobre la reducción de jornada laboral y otro sobre el llamado Estatuto del Becario o personas en prácticas. Esta medida lleva bloqueada tres años por el propio Gobierno. Habrá que ver si se presenta en el 2025. Ya se ha regularizado el tema de las cotizaciones, pero queda pendiente la regulación de sus compensaciones, gastos y algunos derechos”.

En cuanto a la reducción de jornada laboral, Lahera incide en que el Anteproyecto de Ley viene de un acuerdo exclusivo del Gobierno con los sindicatos. «No es un acuerdo social porque falta la firma de las empresas, no tiene ese carácter tripartito, cosa que sí pasó en la última reforma laboral pactada que está dando buen resultado a nivel de empleo y mercado de trabajo. El anteproyecto toca las cuestiones como la reducción de la jornada de 40h a 37,5h, el registro horario que se obliga a que sea digital en las empresas, y una mayor regulación de la desconexión digital. Tres cuestiones clave en las relaciones laborales”, expresa.

Desde su punto de vista, «las aportaciones que haga el Ministerio de Economía en este Proyecto de Ley van a ser fundamentales. Debe haber, por tanto, un acuerdo entre Trabajo y Economía. Es muy importante cómo hacerlo, que se respete la negociación colectiva y los convenios colectivos vigentes y se vaya incorporando de forma gradual desde fórmulas de flexibilidad. Es muy importante que en el Gobierno se logre el acuerdo para luego presentarlo a los grupos parlamentarios, que deberán aportar sus enmiendas. Habrá que ver si se aprueba al final».