Connect with us
Entrevistas

Delia Rodríguez y Ana Belén Martínez, de la Asociación WLW, abordan los riesgos a los que se exponen los menores en el entorno digital

Estas expertas en Infancia señalan a los padres como el principal agente socializador que debe velar por la protección y educación de los niños a la hora de usar las redes sociales

(Diseño: Óscar peña/ E&J)

María González Villasevil

Redacción editorial E&J




Tiempo de lectura: 8 min

Publicado




Entrevistas

Delia Rodríguez y Ana Belén Martínez, de la Asociación WLW, abordan los riesgos a los que se exponen los menores en el entorno digital

Estas expertas en Infancia señalan a los padres como el principal agente socializador que debe velar por la protección y educación de los niños a la hora de usar las redes sociales

(Diseño: Óscar peña/ E&J)



El acceso de los menores a la tecnología cada vez desde una edad más temprana es una cuestión de gran preocupación, ya que conlleva unos riesgos. Delia Rodríguez, CEO de Vestalia Abogados y responsable de la Sección de Infancia y Juventud de WLW, y Ana Belén Martínez, directora general del Consejo General de la Procura Española, secretaria general de WLW y cofundadora de esta institución, han abordado en una entrevista en el plató de Economist & Jurist la relación entre la infancia y la tecnología.



En la entrevista, moderada por el director de E&J Group, Pablo Capel Dorado, las expertas han opinado sobre cómo se está adelantando dicho acceso digital y qué conlleva el mismo para los menores.



En este sentido, Ana Belén Martínez afirma que “es una realidad que los menores acceden al entorno con una edad más temprana”, por ello la entrevistada considera “imprescindible y necesario articular un sistema de protección de la infancia en este entorno digital”.



“Cuando los menores comienzan a utilizar los dispositivos electrónicos están en plena fase de neurodesarrollo y en plena construcción de su personalidad y de forma de comportarse. Al acceder al entorno digital se abre una ventana que es de extrema sensibilidad y de la que dependerá en el futuro su empatía, su salud y la forma que tienen de comportarse. Tenemos que lograr entre la sociedad, las familias, los educadores, y los propios menores, que éstos sean conscientes de los riesgos que conlleva el entorno digital en la infancia”.

Asimismo, Martínez ha recalcado la importancia de defender los datos de los menores, ya que, teniendo en cuenta su temprana edad a la hora de integrarse en el entorno digital, los jóvenes desconocen cómo proteger su intimidad. “Creo que es fundamental que estemos todos coordinados para ayudarles”.

De izquierda a derecha: Ana Belén Martínez, directora general del Consejo General de la de la Procura Española, secretaria general y cofundadora de WLW; Pablo Capel Dorado, director de ‘E&J Group’; y Delia Rodríguez, CEO de Vestalia Abogados y responsable de la Sección de Infancia y Juventud de WLW. (Imagen: Óscar Peña/E&J)

Misma opinión comparte Delia Rodríguez sobre el temprano acceso al entorno digital por parte de los menores. La CEO de Vestalia Abogados ha recalcado que “nos enfrentamos a una realidad social que es imparable. Es importante que distintos agentes estemos alineados en esta batalla de la defensa de los derechos digitales y no digitales de los menores”.

Rodríguez ha destacado dos problemas actuales a la hora de permitir que los menores acceden al entorno digital. El primero, la presión social de los padres, quienes ceden ante sus hijos para facilitarles un teléfono móvil porque el resto de sus amigos ya lo tienen y temen que al no facilitarles ellos a su hijo el dispositivo les estén aislando socialmente o convirtiéndole en una posible víctima de buylling precisamente por ser el único que tenga un dispositivo móvil.

El segundo problema que ha resaltado Rodríguez son las empresas, que buscan “capitalizar su actividad y que no tienen hasta ahora, bien por imagen corporativa, bien porque la ley les obligue, una responsabilidad que les haga pensar que tienen que instaurar en todos los dispositivos que facturen o fabriquen un control parental”.

Rodríguez apunta también como un problema del temprano acceso de los menores al entorno digital la falta de educación y de prevención sobre el uso responsable de las nuevas tecnologías. “Es un problema en sí mismo que los menores accedan cada vez antes a los dispositivos, tanto desde la óptica física y neurológica, como desde la óptica jurídica”.

La IA, un gran reto legislativo

La inteligencia artificial (IA) es otro riesgo de las nuevas tecnologías a la que se enfrentan los menores de edad, ya que las aplicaciones de IA son de fácil acceso para los jóvenes y, por desgracia, hacen un uso indebido e incorrecto de ellas. Así lo confirma Delia Rodríguez, quien recuerda que con esas aplicaciones se están alterando fotografías en las que se utiliza el rostro de menores de edad en cuerpos de adultos, e incluso en escenas de contenido sexual.

El problema se intensifica aún más debido a la carencia de una regulación legislativa sobre el acceso de los menores a la IA. “Ahora mismo no hay medidas concretas o no todo lo concretas que deberían ser. Creo que la IA es un campo en el que todavía, legislativamente hablando, tenemos que seguir avanzando porque están surgiendo y emergiendo problemáticas que empiezan a escaparse de las manos”.

“La inteligencia artificial va mucho más por delante que toda la regulación, pero no solamente en materia de infancia, sino en todo”, señala Ana Belén Martínez, quien recuerda que el año pasado se aprobó el Reglamento de Inteligencia Artificial de la Unión Europea el cual “sirve de base, pero la inteligencia artificial es imparable. Nos va a tocar ver cómo gestionar sin tener una regulación específica para diferentes materias”, confiesa la entrevistada.

(Imagen: E&J)

Sin presupuestos, las medidas no podrán cumplirse

En la entrevista también se ha abordado el Anteproyecto de Ley Orgánica para la protección de las personas menores de edad en los entornos digitales, aprobado por el Gobierno el pasado mes de junio y que contó con un amplio comité de expertos de distintas disciplinas.

Delia Rodríguez ha subrayado al respecto que el desarrollo de esta norma, que pretende regular el acceso a la tecnología por parte de los más jóvenes, se plantea ante “los daños físicos, psicológicos y afectivos” que ha traído la llegada de Internet a la vida de los niños y adolescentes. “Es de obligación social proteger y garantizar su correcto desarrollo evolutivo. Esto es una cuestión fundamental sobre derechos fundamentales y constitucionales”, recalca la experta.

“Este anteproyecto es muy ambicioso, incluye una serie de puntos muy interesantes, como por ejemplo aumentar la edad de acceso a las redes sociales de los menores de 14 a 16.; también la obligación de los fabricantes de poner en sus dispositivos ese control parental”, señala Rodríguez, quien también ha dejado claro que dicho Anteproyecto, a su vez, surge muchos interrogantes porque es muy innovador: “Todavía hay que darle forma y verlo en la práctica para poder decir si estamos ante un proyecto que de verdad va a tener su eficacia en la protección de los niños en la red”.

Además, para que la ley pueda cumplirse, las expertas han destacado la importancia de dotar las medidas del anteproyecto de presupuestos, tanto a nivel educativo (en los centros), como a nivel sanitario y jurídico.

Ana Belén Martínez, por su parte, comparte la opinión de su compañera y resalta la labor que está haciendo la Policía Nacional en este ámbito, ya que los agentes dan charlas formativas en los colegios a los menores y les cuentan casos reales. “Yo creo que a los niños les impacta más cuando una figura de autoridad se lo cuenta que cuando lo oyen en la televisión”, afirma la directora general del Consejo General de la de la Procura Española.

Los riesgos del entorno digital

Ana Belén Martínez y Delia Rodríguez han dado voz a las consecuencias psicológicas que sufren o pueden padecer los menores, dentro del ámbito de la salud mental, por el uso indiscriminado de las nuevas tecnologías. La CEO de Vestalia Abogados ha hablado de un caso real que vivió en el despacho cuando unos padres acudieron en busca de ayuda para pactar un contrato con su hijo sobre el tiempo que éste podía usar el teléfono móvil.

Asimismo, Rodríguez ha insistido en que el uso de la tecnología en los jóvenes puede provocar un problema de adicción y, consigo, ataques de ira, agresividad e incluso violencia física cuando los padres restringen el uso del dispositivo al joven.

Además de las consecuencias psicológicas, la experta ha señalado que el uso indiscriminado de la tecnología también acarrea problemas de salud física, como por ejemplo, el aumento de la obesidad infantil: “Niños que están todo el día pegados a una pantalla en vez de estar jugando y haciendo ejercicio y comiendo saludable”. Otras problemática destacadas por la entrevistada son los problemas de visión y los problemas neurológicos.

Respecto al ciberacoso, Ana Belén Martínez cree que una medida conveniente para prevenir este problema es la prohibición de llevar el teléfono móvil a los colegios: “Hay muchas colegios que no lo permiten, pero la realidad es que los niños llevan los móviles en la mochila”.

En cuanto a cómo las familias podrían evitar ciertos riesgos a los que se exponen los menores en el entono digital, la secretaria general y cofundadora de WLW señala que los padres deben ser conocedores de primera mano de las redes sociales, así como su funcionamiento y lo que sus hijos publican en ellas o qué contenidos consumen cuando las utilizan. “Creo que la primera medida es que los padres sean conocedores de primera mano de cuáles son los riesgos a los que se enfrentan sus hijos. Desde el momento en que tus hijos utilizan las redes sociales, los padres deberían de interesarte en ellas”.

Martínez también ha resaltado otro problema que las redes sociales provocan en los menores, como es la evasión familiar: “Hay niños que prácticamente no se relacionan con su entorno; que les tienen que repetir las cosas 40 veces porque están fuera del entorno familiar aunque están físicamente en el salón de su casa”.

Una guía para orientar a las familiar en el entorno digital

Delia Rodríguez y Ana Belén Martínez han hablado del libro La protección de la infancia en entornos digitales, presentado el pasado mes de octubre en la Fundación Telefónica. Esta obra pionera es un trabajo en el que han participado 36 profesionales, entre psicólogos, jueces, fiscales y profesionales relacionadas con la infancia, así como instituciones, y que sirve de guía para orientar a las familias sobre cómo desenvolverse en el entorno digital.

El libro aborda diversos temas de actualidad de la mano de jueces, fiscales, abogados, médicos, psicólogos, expertos. Además, este libro no solo trata información que sirve para juristas, sino que también está destinado a padres, madres y otro tipo de profesionales educadores. “Es para cualquier persona que quiera estar un poco al día de estas cuestiones tan importantes”, señala Rodríguez.

Por otro lado, el prólogo de la obra es de Mar España, directora de la Agencia Española de Protección de Datos. “El prólogo es de Mar España, que desde WLW se pidió que pudiera hacernos este prólogo. Es un regalo contar con Mar España haciendo la presentación de este libro porque es una persona que todos sabemos que ha trabajado muchísimo en cuestión de protección de datos, pero en cuestión de infancia la AEPD lleva haciendo, con ella, liderando un trabajo encomiable”, resalta la coordinadora del libro.

Además, la obra guarda un punto solidario, ya que el dinero obtenido de la venta de las primeras ediciones será para la organización UNICEF. Por lo tanto, aquellas personas que adquieran esta obra estarán colaborando directamente con UNICEF.

Ana Belén Martínez, en calidad de cofundadora y secretaria general de WLW ha destacado que La protección de la infancia en entornos digitales es “un libro que deberían de leerse todos los padres porque te dan muchas pautas y visiones de expertos desde todos los ámbitos, para ayudarte a enfrentar este problema que hay con las familias y con los hijos”.

Martínez señala que ya son 26 comisiones de trabajo en las que están trabajando desde WLW, y actualmente son cerca de 1.000 socias de mujeres directivas dentro de España. Asimismo, la Asociación se encuentra en plena expansión e internacional, con presencia en 15 países.

“Todos estos proyectos que están funcionando en España lo vamos a replicar también en otros países. Este libro no se va a quedar aquí, no se va a quedar solamente en nuestras fronteras. Estos capítulos nos encantaría que pudiesen también hacerse eco en otros países, en otras mujeres y otras directivas”.

La IA, un gran reto legislativo

La inteligencia artificial (IA) es otro riesgo de las nuevas tecnologías a la que se enfrentan los menores de edad, ya que las aplicaciones de IA son de fácil acceso para los jóvenes y, por desgracia, hacen un uso indebido e incorrecto de ellas. Así lo confirma Delia Rodríguez, quien recuerda que con esas aplicaciones se están alterando fotografías en las que se utiliza el rostro de menores de edad en cuerpos de adultos, e incluso en escenas de contenido sexual.

El problema se intensifica aún debido a la carencia de una regulación legislativa sobre el acceso de los menores a la IA. “Ahora mismo no hay medidas concretas o no todo lo concretas que deberían ser. Creo que la IA es un campo en el que todavía, legislativamente hablando, tenemos que seguir avanzando porque están surgiendo y emergiendo problemáticas que empiezan a escaparse de las manos”.

“La inteligencia artificial va mucho más por delante que toda la regulación, pero no solamente en materia de infancia, sino en todo”, señala Ana Belén Martínez, quien recuerda que el año pasado se aprobó el Reglamento de Inteligencia Artificial de la Unión Europea el cual “sirve de base, pero la inteligencia artificial es imparable. Nos va a tocar ver cómo gestionar sin tener una regulación específica para diferentes materias”, confiesa la entrevistada.