Diez italianos en Madrid para disfrutar de una cita romántica en San Valentín
La mejor pasta, pizza y postres italianos de toda la capital para vivir el Día de los enamorados con pasión y buena comida

(Imagen: Disney +)
Diez italianos en Madrid para disfrutar de una cita romántica en San Valentín
La mejor pasta, pizza y postres italianos de toda la capital para vivir el Día de los enamorados con pasión y buena comida



(Imagen: Disney +)
Los restaurantes italianos son una de las opciones más románticas para cenar en un día tan especial como es San Valentín. Transportarte a Italia con un buen plato de pasta compartido, es uno de los planes más románticos que puedes hacer en esta fecha tan especial, si quieres impresionar a tu pareja. Por eso, desde Economist & Jurist, os recomendamos estos diez restaurantes italianos para disfrutar de una cita a lo Dama y el Vagabundo.


(Imagen: Beata Pasta)

Beata Pasta (Calle de Gran Vía 22)
Este es el restaurante ideal para los amantes de la pasat fresca y es que, además de hacerla allí mismo, puedes ver cómo es el proceso de elaboración desde la calle, ya que la cocina está al descubierto. Con tres locales en la capital, Beata Pasta es el italiano más canalla de todo Madrid. Su última apertura en la calle Gran Vía lo ha coronado como uno de los italianos más ricos y mejor decorados. Allí podrás disfrutar de platos deliciosos, postres muy innovadores y un buen Spritz en un local ambientado en el espacio. Además podrás cocinar la propia pasta.
Baldoria (Calle de Ortega y Gasset, 100)
Situado en pleno barrio de Salamanca, este restaurante fusiona la auténtica cocina italiana con espectáculos en vivo cada noche. Se autodenominan el verdadero restaurante italiano de Madrid, ya que su materia prima llega directamente desde el Mediterráneo hasta tu plato.
En su carta encontrarás una cuidada selección de pastas y pizzas elaboradas con ingredientes innovadores y nombres curiosos. Como su Doña Giuseppina, que lleva jamón serrano.


(Imagen: Manifesto 13)
Manifesto 13 (Calle de Hartzenbusch, 12)
Con tan solo unos meses de apertura este restaurante de cocina italiana llevada por una familia peruana se ha convertido en el favorito de muchos, gracias a su obrador propio y sus ricas recetas.
En la planta baja se produce diariamente pasta fresca, utilizando la sémola rimacinata. Como entrantes, la carta ofrece una variada fusión entre la cocina tradicional y acentos modernos, con propuestas como la tosta de anchoa y mantequilla, el pan con ragú y queso pecorino, o las setas silvestres acompañadas de coliflor caramelizada.
Una combinación que, a primera vista, puede parecer inesperada, pero que se revela en cada bocado con la armonía de piña caramelizada, queso parmesano, mantequilla y salvia frita.


(Imagen: Circolo Popolare)
Circolo Popolare (Plaza Pablo Ruíz Picasso, 1)
Como una de las últimas incorporaciones del grupo Big Mama, Circolo Popolare se ha ganado ya el reconocimiento como uno de los restaurantes italianos más aclamados en la capital. Su decoración maximalista, repleta de colores vivos y estampados eclécticos, es inconfundible, pero lo que realmente atrapa es su menú. Para celebrar San Valentín han hecho un menú especial para parejas disponible en todos sus restaurantes
que incluye un plato de antipasti, un plato principal y un postre por 40€. Te recomendamos probar su tiramisú, especialmente su versión reinventada con un toque de pistacho.


(Imagen: Fellina Madrid)
Fellina (Calle de Caracas, 21)
Un local especializado en pasta fresca que se puede disfrutar en su bonita terraza interior o en la zona de restaurante. Aquí podrás disfrutar de sus platos estrella, entre ellos sus cacio e pepe servidios en rueda de pecorino, su pizza Diavola e scamorza affumicata o sus spaghetti al tartufo.


(Imagen: Grupo Pulcinella)
Malafemma (Calle del Doctor Esquerdo, 13)
Situado muy cerca de la plaza Manuel Becerra, este restaurante ofrece una de las mejores cartas italianas de la capital. Fusiona los mejores platos de toda la región itálica con platos de lo más tradicional hasta las fusiones con otro tipo de cocina mediterránea. Todo ello en un espacio ideal compuesto por varias zonas que incluyen una zona interior muy coqueta decorada con pequeñas bombillas en el techo.


(Imagen: Grupo Pulcinella)
Peppe Fusco (Calle de Fuencarral, 146)
Sus pastas frescas y recetas clásicas destacan en lsu carta puramente napolitana, pero sobre todo el ambientazo del restaurante es lo que marca la diferencia. Es el sitio ideal para disfrutar de un buen plato de carbonara casero con ingredientes sobresalientes. Música en directo, cócteles riquísimos y el ambiente tan punk de la calle Fuencarral.


(Imagen: Grupo Isabella’s)
Allegra (Calle de Velázquez, 11)
Pertenece al grupo Isabella y no cabe duda de ello, como cada uno de sus otros locales, la decoración es su signo de identidad. Imita al clásico Café de la ópera, es tan bonito que invita a ser fotografiado. Su cocina también es digna de admiración con platos como sus macarrones de pasta fresca al cacio e pepe su bikini de porchetta y su postre estrella, el clásico tiramisú que te hará volver mil veces más.


(Imagen: Macarfi)
Tratoria D´Alfredo (Calle de El Españoleto, 4)
Esta trattoria, además de contar con una carta de delicias típicas de Sicilia, tiene doble encanto. Se trata de un local pequeño que lleva el propio dueño, Alfredo, quien, junto a su equipo, elabora la carta a diario con productos de temporada. Es como una casa de comidas española, nada más sentar a una mesa, Alfredo canta los platos del día que suelen ser recetas tradicionales con productos de primera calidad y mucho amor en cada uno de ellos.


(Imagen: Restaurante Numa Pompilio)
Numa Pompilio (Calle de Velázquez, 18)
Que esté al final de la lista, no significa precisamente que sea esta su posición en el ranking, y es que Numa Pompilio es de los mejores italianos mencionados en esta lista. En primer lugar, la calidad de sus productos es espectacular y sus creaciones basadas en recetas tradicionales destaca esta propuesta como uno de los mejores italianos de España. A sus placenteros bocados le acompaña la ambientación del local: un espacio muy amplio decorado al detalle con muebles de anticuario un jardín repleto de vegetación y luces ambiente que lo convierte un lugar de ensueño.
