«Tenemos una Justicia obsoleta», sentencia José Antonio Montero, vocal del CGPJ
Destaca que para ser un buen jurista se necesitan muchas cualidades, mucha preparación y mucho trabajo
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«Tenemos una Justicia obsoleta», sentencia José Antonio Montero, vocal del CGPJ
Destaca que para ser un buen jurista se necesitan muchas cualidades, mucha preparación y mucho trabajo
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José Antonio Montero Fernández, vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), comparte en esta entrevista su perspectiva sobre la evolución del sector legal en estos años, así como su visión sobre la importancia de los I Premios Economist & Jurist Group a la Excelencia de la Práctica Jurídica, que se celebrarán el próximo 20 de marzo en Madrid, como miembro del jurado encargado de evaluar las propuestas.
Economist & Jurist (E&J): Enumere tres valores que considera fundamentales para desarrollar cualquier tipo de actividad jurídica.
José Antonio Montero (J. A. M.): Señalar tres valores fundamentales en el desarrollo de cualquier tipo de actividad jurídica, ante las muchas perspectivas que presenta la actividad jurídica, resulta bien complicado, en tanto que depende del sector sobre el que hablemos quizás los valores no sean los mismos, aunque todos complementarios.
Como jurista, para mí, el valor fundamental es el de la Justicia. El jurista debe estar imbuido de este valor, que a su vez es el principio básico en la actividad jurídica, perseguir y poder dar a cada uno lo suyo, compendio de legalidad, equidad, responsabilidad e imparcialidad. La Justicia debe ser el objetivo a perseguir en el actuar de todo jurista.
Junto a este, también destacaría la honestidad, para con uno mismo y para los demás. No cabe el ejercicio de una actividad en el que siempre está presente el otro, si todo tu actuar no está presidido por la honestidad.
El servicio, la actividad jurídica, es servicio al bien común sean cuales sean los intereses que defiendas. Siempre detrás de ellos está el bien común, procurar con tu actividad hacer posible una sociedad más justa y libre.
E&J: ¿Cómo ha visto la evolución del sector legal en estos años? ¿Qué es lo que más le llama la atención?
J. A. M.: Puedo hablar desde la óptica que me ofrece mi profesión de magistrado y en la órbita de los tribunales.
La evolución de la actividad jurisdiccional en estos años ha sido negativa, no es posible en unas breves palabras describir, siquiera, los problemas que acucian a la Administración de Justicia, pero su paulatino deterior es patente e incuestionable.
Los factores, ya lo he apuntado, son muchos y variados, lo que está dando lugar a que tengamos una Justicia obsoleta, incapaz de dar una respuesta temporánea y eficaz a los graves problemas de todo tipo que afronta una sociedad moderna.
E&J: ¿Qué significa para usted formar parte del jurado de los I Premios Economist & Jurist Group?
J. A. M.: Formar parte del jurado de los I Premios Economist & Jurist Group me produce una doble satisfacción.
Como profesional del Derecho, formar parte, con otros prestigiosos profesionales, del jurado significa una especie de reconocimiento que te da compartir responsabilidades con dichas personalidades.
Como experto en Derecho Tributario me parece apasionante aportar mis conocimientos y ayuda en el resultado y selección de los premiados.
E&J: ¿Cómo describiría la relevancia de estos premios en el contexto actual del sector jurídico-legal?
J. A. M.: Cada día tiene más peso el Derecho en la Economía o viceversa, la Economía en el Derecho. Lo cierto es que son dos realidades que van de la mano y cuya importancia resulta hoy en día incuestionable. Premios como el que ofrece Economits & Jurist Group, ayudan, y mucho, en poner en valor esta realidad y poner en valor este sector, acentuando el lugar que ocupa el sector dentro de una comunidad compleja en continuo desarrollo
E&J: Economist & Jurist premia la excelencia con estos galardones. En su opinión, ¿debería la excelencia ser el valor más destacado en el ejercicio de la profesión jurídica?
J. A. M.: Para ser un buen jurista se necesitan muchas cualidades, mucha preparación y mucho trabajo, pero solo algunos alcanzan la excelencia. La excelencia es la culminación de una larga y fructuosa carrera, y este premio representa el testimonio y el reconocimiento de dicha excelencia.
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