¿Necesita el abogado tener un blog?

 Empecemos por explicar que es un blog, un concepto que hasta hace poco se oía solamente en entornos estrictamente vinculados al mundo Internet pero que cada vez está más presente en todos los ámbitos.
En castellano se usa también para referirse a ellos el término cuaderno de bitácora o bitácora (literalmente, libro en que se apuntan los detalles, maniobras e incidencias de la navegación marítima).
Un weblog es un espacio personal en la Red donde, a modo de diario, se van recogiendo mensajes, artículos o reflexiones del autor. Estos textos pueden tener un carácter meramente informativo pero su objetivo es básicamente ofrecer una visión personal.
Los blogs o weblogs se caracterizan también porque sus mensajes pueden ser respondidos por los visitantes del blog, lo que ofrece un gran dinamismo a estos espacios que se convierten en algo así como una ágora virtual. El autor puede permitir que los usuarios las publiquen libremente o controlar la publicación de las respuestas a sus comentarios.
El inicio de los blogs en Internet ha estado presidido por espacios de personajes individuales que expresaban opiniones o recogían informaciones sobre cualquier tema aunque muchas empresas han optado por crear un blog corporativo como plataforma comercial y de promoción de algún producto específico.
En el ámbito jurídico cabe plantearse la idoneidad de este formato para darse a conocer. En Estados Unidos existen numerosos weblogs de temática jurídica, realizados por abogados de forma individual y otros que tienen detrás el apoyo de un bufete y que sirven de plataforma de difusión del conocimiento sobre una temática concreta o de reflexión sobre la profesión.
Ahora bien, antes de lanzarse a la aventura de un blog personal conviene plantearse los recursos de los que dispondremos para mantenerlo, es decir, el tiempo. Además, se hace necesario definir previamente el perfil de contenidos que queremos publicar y la estrategia que nos lleva a abrir un weblog. ¿Qué queremos obtener: popularidad, modernidad, informar, publicar artículos doctrinales…?
Puede optarse por un blog estrictamente subjetivo en el que volcar opiniones personales sobre temas tanto profesionales como de actualidad general. También puede optarse por un blog temático en el que se ofrezcan recursos, noticias, información e ideas sobre un tema en concreto. También pueden ofrecerse un blog desde un colectivo profesional.

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