El Presidente del Tribunal Supremo reclama mejoras en la Administración Judicial

El  presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Dívar, ha señalado que es necesario mejorar cuestiones «tan importantes» en la Administración de Justicia como la adecuación de la Ley de Planta, la Oficina Judicial o la generación del expediente digital.

Dívar, durante la inauguración de la primera Semana Jurídica Malacitana en Málaga, ha afirmado que aunque durante los últimos años se ha producido «una mejora» en la administración judicial, muchos de los procedimientos son aún «anticuados».

Otro problema que ha citado el presidente del Tribunal Supremo es la imagen negativa y «confusa» de la Justicia y de los jueces, de los que no se cansa de decir que son «justos, competentes y trabajadores».

«Les es muy difícil conciliar la vida familiar con la laboral», ha afirmado Dívar, que ha recordado que «hay juzgados que ingresan 8.000 asuntos al año y el año tiene 365 días».

Al hilo de este asunto, el presidente del Supremo ha matizado que la Ley de Medidas de Agilización Procesal ha supuesto modificaciones en la Ley de Enjuiciamiento Criminal «necesarias» para dar operatividad a las reformas en el Código Penal, y que es un tema que «no deja de ser controvertido».

Al hablar de la administración de Justicia, Dívar ha recordado mediante un frase célebre que «una cosa no es justa porque está en la ley, debe estar en la ley porque es justa».

«El futuro de nuestra Justicia y de toda Justicia tiene que ser humano, porque la Justicia, el Derecho, no es algo que se hace en tubos de ensayo, sino que va dirigido a las personas, a las relaciones entre seres humanos, cuando hay una controversia penal, civil, administrativa, social o militar», ha dicho.

Con respecto al futuro de la administración judicial, Dívar ha explicado que ésta debe ser transparente y rápida y correctamente transmitida por los medios, ya que, según él, «la calidad de la Justicia es hacerla pronto, porque cuando se hace tardía es una verdadera injusticia».

Dívar ha distinguido, en su alocución, entre la libertad de expresión, de información y la opinión personal del juez, la primera como «un derecho concedido a todos»; la segunda con el deber de estar basada en la constatación de la noticia y en la verdad pero que, a su juicio, «no es así». EFE