El hundimiento del pesquero ‘Villa de Pitanxo’ deja diez marineros muertos

La tragedia se ha vuelto a cebar con la gente de la mar, y esta vez lo ha hecho con saña. El Villa de Pitanxo, pesquero gallego del Grupo Nores, de Marín (Pontevedra) naufragó en la madrugada del martes en aguas de Terranova (Canadá).

La tripulación del barco estaba compuesta por 24 marineros, 16 de ellos españoles, cinco peruanos y tres ghaneses. Hasta el momento, solo han sido rescatados con vida tres miembros de la tripulación. Han sido recuperados diez cadáveres, mientras que once tripulantes permanecen desaparecidos. Entre los supervivientes se encuentra el patrón del buque, Juan Costa Padín, un marinero experimentado que conoce bien la zona, ya que lleva varios años faenando en esta zona. Otro de los supervivientes es Eduardo, sobrino de Costa Padín. La tercera persona encontrada con vida es un marinero de Ghana.

Fuentes oficiales citadas por medios de comunicación gallegos relatan que la primera alerta de que había problemas en aguas de Terranova saltó sobre las cinco de la mañana hora española, cuando se perdió la señal de seguimiento del Villa de Pitanxo. Solo media hora después, el pesquero emitió una señal de socorro. Inmediatamente se puso en marcha un dispositivo de rescate en el que participaron otros pesqueros gallegos que se encontraban faenando en la zona. Según el relato oficial, alrededor de las seis de la mañana saltó la baliza que indicaba que el barco se había hundido.

Los barcos que faenan en Terranova tienen que hacer frente a condiciones muy duras. (Foto: NG)

Tres supervivientes

Uno de los pesqueros que se unió a la búsqueda fue el Playa Menduíña Dos que, a las 10:37 horas avistó cuatro lanchas salvavidas y restos del naufragio. En una de estas lanchas se encontraban los tres supervivientes.

El Novo Virgem da Barca, arrastrero portugués, localizó más tarde los restos de otro marinero, mientras que otros tres fueron encontrados más tarde.

A última hora del martes, los equipos de rescate habían conseguido recuperar diez cuerpos, mientras que otros once tripulantes permanecían desaparecidos. Las labores de búsqueda continúan, pero la situación del mar está dificultando el trabajo.

Las malas condiciones meteorológicas, con rachas de viento de hasta 72 kilómetros por hora, según informa Efe, no podrán fácil la tarea de encontrar a los once marineros que continúan desaparecidos. El pronóstico meteorológico para este miércoles señala temperaturas de -7º centígrados, aunque la sensación térmica es de -17º centígrados, nevadas y olas de varios metros de altura.

Se ha puesto en marcha un amplio dispositivo de búsqueda. (Foto: Armada canadiense)

Operativo de búsqueda

En el lugar del siniestro está el guardacostas canadiense Cygnus, que ha asumido la coordinación del operativo. Este está participando en la búsqueda con el remolcador canadiense Maerks Nexus En el operativo también participan un avión, dos helicópteros y el pesquero gallego Playa Menduiña Dos, además del buque portugués Novo Virgem da Barca. Según Salvamento Marítimo, en la madrugada de este miércoles se iba a incorporar la fragata canadiense.

El Villa de Pitanxo, de 50 metros y construido en 2004, había salido el pasado 26 de enero del puerto de Vigo con rumbo al caladero comúnmente conocido como NAFO, siglas en inglés de Organización de Pesquerías del Atlántico Noroeste.

Según explica El Faro de Vigo, el área regulada por la NAFO es una zona de pesca casi tan mítica para la flota como la de Gran Sol. Sus aguas, en otra época ricas en especies de gran valor como el bacalao (antes de que colapsase), fueron escenario de la peregrinación de los barcos españoles, tanto del País Vasco como de Galicia. Con la merma de las embarcaciones bacaladeras, el censo de oficial de este caladero fue también disminuyendo paulatinamente hasta quedar reducido a 20 unidades.

Condiciones muy duras

Estas aguas son muy duras, sobre todo en esta época del año en la que se registran temperaturas en el agua que oscilan entre los 2º y los 4º, con vientos de más de 30 km/h, rachas que podrían alcanzar los 70 km/h y olas que superan los cinco metros de altura, según lo registrado en la zona del hundimiento, situada a 460 kilómetros desde la ciudad de St. John’s, capital y mayor ciudad de la provincia canadiense de Terranova y Labrador.

El Congreso de los Diputados ha guardado un minuto de silencio. (Foto: Google)

El naufragio, el más trágico registrado en las últimas décadas en la flota pesquera española, ha causado consternación en toda Galicia, donde la Xunta ha declarado luto oficial en todo el territorio, mientras «llora a sus hijos», no solo los fallecidos sino también por los desaparecidos y sus familias, a las que asegura su «intensa solidaridad» y «todo tipo de ayuda». Así lo ha expresado el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, en una declaración institucional.

El Congreso de los Diputados  ha guardado este miércoles un minuto de silencio, con los diputados puestos en pie, en memoria de los marineros fallecidos por el naufragio del pesquero Villa de Pitanxo frente a las costas de la isla de Terranova (Canadá).

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha mostrado sus condolencias en la red social Twitter, mientras que el Rey Felipe VI ha hablado con el presidente gallego y con la alcaldesa de Marín para trasmitir toda su solidaridad. El Ministerio de Exteriores está en contacto con la embajada de España en Canadá y con el cónsul español para organizar el «procedimiento necesario» para la repatriación de todos los marineros.