Felipe González: “Hay que crear una cultura de la mediación que contagie a los políticos”

El Centro Español de Mediación (CEM) ha celebrado este martes, 17 de diciembre, su segunda edición de los Premios al Impulso a la Mediación Empresarial. Un evento que, además de congregar a juristas de reconocido prestigio y a miembros destacados de la Cámara de Comercio de España, como el presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet, y el presidente del Centro Español de Mediación, Rafael Catalá, ha contado con la presencia de Felipe González, expresidente del Gobierno y uno de los tres galardonados.

Estos premios —como la propia entidad ha comunicado— se crearon “con el objetivo de reconocer y promocionar las mejores prácticas relacionadas con la mediación civil y mercantil en España”. De esta manera, además de a González, quien ha recibido el ‘Premio de Honor de reconocimiento a una trayectoria profesional dedicada a la mediación en su conjunto’ por «su firme compromiso con la cultura de paz y con el fomento de valores como el diálogo, la negociación y el consenso»; también se ha entregado un galardón a la Fundación para la Investigación sobre el Derecho y la Empresa (FIDE), por promover las mejores prácticas relacionadas con la mediación civil y mercantil en España; y a la profesora Ana Fernández Pérez, de la Universidad de Alcalá, por ser autora de la mejor publicación divulgativa de la mediación civil y mercantil del país.

Durante el evento, cuya celebración ha sido aplaudida por todos los asistentes, el expresidente ha lanzado duras críticas a la élite política, acusándola de carecer de habilidades para dialogar, mediar y negociar. En este sentido, su ponencia se ha caracterizado por una visión analítica e irónica de la actualidad política y judicial, en la que ha destacado su firme apuesta por la mediación, asegurando que esta «aliviará enormemente la carga a la que están sometidos los tribunales». Una carga que, para él, únicamente podrá solventarse creando una cultura de la mediación «que, ya puestos, ojalá se contagie a los políticos».

El expresidente Felipe González, durante su ponencia. (Imagen: E&J)

Preguntada por este medio de comunicación, Cristina Jiménez Savurido, presidenta y fundadora de FIDE, se ha mostrado profundamente agradecida por recibir otro de los galardones otorgados por el Centro Español de Mediación, el cual considera «una oportunidad para potenciar la mediación en España como la mejor forma de resolver los conflictos, porque las partes se pueden implicar personalmente, porque pueden controlar totalmente el proceso y porque no está en manos solamente de los abogados, de los jueces, o de los árbitros».

Desde su punto de vista, «si nosotros creemos en la mediación, creemos que podemos tener una oportunidad antes de llegar a los tribunales, de sentarnos, de dialogar y de intentar solucionar el problema con un menor coste y en un menor tiempo, lo conseguiremos. No podemos echar la culpa a los demás. Nunca en nuestra vida. Los demás pueden hacer lo que quieran, pero nosotros, cuando nos toque nuestro procedimiento, cuando nos toque nuestro caso, vamos a decir ‘Yo sí voy a aprovechar esta oportunidad'».

A pocos meses de que se publique en el Boletín Oficial del Estado (BOE) la Ley de Eficiencia Procesal, esta profesional se muestra satisfecha con que se vaya a obligar a las personas o entidades que se encuentren envueltas en una controversia a tratar de llegar a un acuerdo mediante la negociación antes de acudir a los tribunales. En concreto, ha señalado que esta nueva medida «es ese pequeño empujón que necesitamos a veces los seres humanos, que necesitan a veces las instituciones, para que después empiece a calar esta idea de la mediación en la cultura. Y aunque generalmente lo obligatorio no me gusta, en este momento creo que en un país en el que vivimos, envuelto en la cultura del conflicto, necesitamos urgentemente ese pequeño empujón».

Respecto al argumento general proporcionado por los mediadores y los MASC sobre el hecho de que la mediación puede conceder un alivio judicial para los jueces y los magistrados, Jiménez ha expresado que esto es únicamente «un efecto colateral, que ni siquiera es el mejor fin de la mediación». Así, proporcionando un enfoque diferente al habitual, ha compartido con Economist & Jurist que, aunque no le quita importancia a esta consecuencia, «realmente creo que quienes somos los principales beneficiados de que la mediación exista somos los ciudadanos y somos los empresarios, más que los jueces y magistrados».

(Imagen: Centro Español de Mediación)

Por su parte, María Bacas, abogada y mediadora empresarial en Mind the Law, ha compartido que, en su opinión, «no debemos ver la mediación como una escapatoria a la labor del juez. Debemos ver la mediación como uno de los mecanismos de acceso a la Justicia. De hecho, en los códigos deontológicos de los colegios de abogados figura que el abogado tiene la obligación de ofrecer la mejor forma de solucionar el conflicto a su cliente, y muchas veces esa mejor forma no es precisamente acudir a la vía legal, sino que es precisamente la mediación. Sea como un paso previo o no».

La última de los galardonados, la profesora Ana Fernández Pérez, de la Universidad de Alcalá, quien se ha llevado el premio a la mejor publicación por su obra Avances para una justicia sostenible – ponencias y comunicaciones de la jornada sobre métodos alternativos de resolución de controversias y cultura de la paz, en la que analiza y reflexiona sobre el cumplimiento del ODS16 a través de los MASC, las condiciones y pautas para su fomento y las acciones necesarias para su implantación, ha apuntado que «es necesario una cultura de la paz, y esto mismo es lo que promueve proyectos como este».

Asimismo, ha destacado que uno de los objetivos de su proyecto es «explicarles a los alumnos de los institutos de secundaria qué es la mediación y en qué consiste la cultura de enseñar que tú mismo puedes resolver tus conflictos. Algo que no ha calado por culpa de los políticos, que lo que no apuestan por la enseñanza de la cultura de la paz, que además es uno de los objetivos del desarrollo sostenible. También estamos intentando acercarnos a los Ayuntamientos, pero no hay voluntad política para ello».

El jurado de la II Edición del Premio al Impulso de la Mediación Empresarial ha estado conformado por el presidente del CEM, Rafael Catalá Polo; el vicepresidente del CEM y secretario general de la Cámara de Comercio de España, Adolfo Díaz-Ambrona Medrano; la vocal del CEM, María Jesús Fernández Cortés; el presidente de honor de Garrigues, Antonio Garrigues Walker; el exmagistrado de la Audiencia Provincial de Barcelona, Pascual Ortuño Muñoz; el secretario general y del Consejo de Administración de Iberdrola, Santiago Martínez Garrido,  y la jefa de Sección de Mediación del CGPJ, Yolanda San-Pastor Sevilla. Además, Fernando Cabello de los Cobos, secretario general del CEM, ha sido el secretario del jurado.