José Ramón Chaves: “El derecho administrativo disuade al ciudadano de recurrir porque la administración juega con ventaja”

Desde el 2007, el magistrado José Ramón Chaves lidera un blog que se ha convertido en una de las referencias del derecho administrativo. Lo alimenta tres veces a la semana sobre sentencias o aspectos de dicha jurisdicción, lo que ha creado en su entorno una comunidad de juristas de primer nivel, lo que le hizo recibir el premio «Puñetas periféricas», otorgado por la Asociación de Comunicadores Jurídicos (ACIJUR) en enero del 2020.

José Ramón Chaves, magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Asturias, especialista en lo contencioso-administrativo, cultiva además del derecho otra de sus pasiones, como es su presencia en Internet. El blog tiene unas 30.000 visitas diarias en un momento en el que el derecho administrativo es una de las referencias para cualquier abogado y hay que estar al día de los cambios que plantea el legislador o los fallos de los tribunales.

“La Justicia no hay que mirarla por el retrovisor, hay que mirarla hacia el futuro. Sin embargo, pese a que pudiera ser un juez adelantado a mi tiempo, no alcanzamos a la tecnología que siempre va un paso por delante del derecho. Soy un magistrado que me siento cómodo con la tecnología”, comenta.

El blog de este magistrado se ha convertido en una alternativa al Boletín Oficial del Estado (BOE) para muchos juristas con el ánimo de encontrar a veces las aclaraciones a algunas normas muy complejas que publica el legislador. “Alternamos la novedad legislativa o jurisprudencial con alguna noticia de la publicación de algún libro o alguna pieza hecha con humor. Al final, somos el punto de encuentro de muchos juristas”, explica.

Chaves nació en Oviedo en 1962; sin embargo, sus orígenes son salmantinos. Magistrado del Tribunal Superior de Justicia de Asturias, especialista de lo contencioso-administrativo, conoce de cerca el sistema universitario. Fue jefe de los servicios jurídicos de la Universidad de Salamanca y director general de Universidades en Asturias. Su pasión por lo administrativo viene de las matrículas que sacó en la carrera, lo que le ha hecho dedicarse a esta actividad y seguir a referentes como Alejandro Nieto, “un jurista que nos hizo pensar mucho”.

Alrededor de ese blog se han creado los premios ‘Blogs Jurídicos’ hace cinco años con un jurado que decide estos premios anualmente. “Es responder a una demanda constatable que, junto a blogs efímeros, hay más de un millar estable de calidad. La última edición la entregamos el pasado 22 de enero en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca».

Los galardonados tuvieron oportunidad de hacer sencillas y emotivas intervenciones. Por ahí desfilaron los representantes del blog ‘HayDerecho’, Elisa de la Nuez y Safira Cantos (Premio Blog Colosal); ‘Nosoloaytos’, Víctor Almonacid (1º Premio Blog de Oro); el fantástico equipo de ‘FiscalBlog’ (2º Premio Blog de Oro); y los autores de los artículos premiados (Susana Gisbert -1º- y Marcos Almeida Cerreda -2º), así como los promotores de los blogs que merecieron las Siete Menciones de Honor.

El magistrado, José Ramón Chaves, en su despacho del TSJ de Asturias, donde es magistrado. (Imagen: Blog ‘Es de Justicia’)

Esas siete menciones corresponden a ‘A golpe de tweet’ (Pilar Moreno García); ‘Blog del Derecho Público y de la Competencia’ (Rodrigo Castillo); ‘EsDeJusticia’ (Diego Gómez); ‘Justito el Notario’ (Miguel Prieto Escudero); ‘Litinet’ (Diana Gordo Cano); ‘Ricardo Cuesta Blog Fiscal y Tributario’ (Taxlandia).

Chaves, que se muestra preocupado por el Chat GPT y esos contenidos que utiliza de terceros, se muestra convencido de que “estas herramientas de IA no van a sustituir al juez del caso en concreto. Este juez tiene dos funciones que es difícil que las lleve un algoritmo; en primer lugar, moverse en el plano de identificación de la norma y aplicación de las reglas de jerarquía de las mismas. Y a la hora de interpretar, el algoritmo no puede escoger si va por la interpretación literal, finalista, contextual o la histórica”.

Junto a ello,  explica que “la clave que excluye la robótica de los juzgados y salas es que para valorar a un testigo o un perito, ahí entra en juego la sana crítica, las experiencias o conocimiento de un juez que es difícil que sea sustituido por un programa algorítmico. Si se le pregunta al justiciable si prefiere que le juzgue un juez o un robot, seguro que prefieren que no sea ese robot. Los abogados igual, quieren jueces con sus aciertos y fallos”.

El derecho administrativo en alza

En este contexto, el derecho administrativo tiene un peso específico importante porque se han incrementado las relaciones del ciudadano con la administración a todos los niveles. Para José Ramón Chaves, es preocupante que el déficit de magistrados en la Sala Tercera sea ahora estructural porque los partidos políticos no logran un acuerdo sobre la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). «Eso lo que va a generar es un efecto paralizante de la doctrina casacional y altamente preocupante en cuanto a la fijación de criterios”, señala.

A juicio de este magistrado, autor de 26 libros, de los cuales cuatro son humanistas y 22 de derecho público, “deben ponerse de acuerdo, lo que sí es triste que hayan tenido que acudir a un mediador internacional como es el comisario europeo de Justicia, Didier Reynders. Requiere una solución urgente y ya dejarnos de parcheo para que la Sala Tercera vuelva a funcionar como antaño”.

Su último libro, que salió el pasado mes de diciembre, Derecho Administrativo problemático, aborda doscientas cuestiones que están mal cerradas o son mejorables en derecho administrativo. “El abuso de los Decretos Leyes, avalado por el Tribunal Constitucional, está zarandeando mucho el derecho administrativo; a nivel procesal, el tema de la ejecución de sentencias nos lleva a un escenario complicado. Cuando hay una sentencia importante, se acomete su legalización y se meten muchos palos en la rueda”.

«Y en el plano sustantivo, está mal cerrada la impugnación de los planes de urbanismo. Tradicionalmente, se decía que si faltaba un trámite se consideraba esencial y se eliminaba, afortunadamente, ese plan. Ahora se abre una espita con la jurisprudencia del Supremo, donde se indica que la parte gangrenada no afecta al todo del plan, pero es una vía tímida aún para reducir los efectos de la invalidez», añade.

Chaves recibió el premio ‘Puñetas de ACIJUR’ en el 2020, año en que también lo lograron Miquel Roca y Juan José González, presidente del Constitucional. (Imagen: ACIJUR)

El problema de la justicia administrativa

En esta relación del administrado con las distintas administraciones públicas sigue estando vigente el dato de que solo un pleito de cuatro lo gana el propio ciudadano. “La Justicia administrativa está padeciendo de un derecho administrativo que está muy sobrecargado, con una deficiente calidad técnica. Hay infinidad de fuentes que hay que entender: la comunitaria, la estatal, la autonomía y local”, puntualiza.

Chaves también habla de la deficiencia técnica de la normativa empleando Real Decreto-leyes de forma excesiva. “Se utiliza terminología ambigua que no deja bien atadas las soluciones legales. Todo lo que está oscuro en la ley tiene que ser solucionado por los jueces. Una ley buena bien definida deja poco espacio para el litigio y la interpretación, pero si tiene lagunas nos pasan la responsabilidad a los jueces. A los jueces nos gusta acertar que no siempre lo logramos. Este escenario de incertidumbre no es bueno para nadie”.

Respecto a la reforma del Real Decreto 6/2023 en el ámbito administrativo, este juez subraya que “son pequeños parches que no resuelven lo sustancial. No aporta demasiado. Son reformas técnicas y puntuales. El problema de fondo es que es un derecho administrativo que está diseñado por la ley inspirado en la tutela de la administración. Es un derecho disuasorio para el ciudadano porque le lleva tiempo, costos y está jugando con piezas negras en un terreno cuajado de prerrogativas a favor de la propia administración”.

A nivel específico recuerda que “en el derecho tributario ahí ya la administración con espíritu recaudatorio lo que no puede ser es que exista doctrina casacional de vanguardia y que venga el legislador corrigiéndola. Al final es muy desigual la lucha del contribuyente con la administración tributaria”.

En ese RDLey 6/2023 se habla del desarrollo de los juicios telemáticos como preferente en la Justicia. “Tengo una cierta desconfianza. El valor de la cara y la composición gestual son únicos a la hora de valorar un testigo o ver las actuaciones de los letrados, le dan un valor de frescura, inmediatez que no lo tienes desde una pantalla. Es muy importante que nos comuniquemos. Se puede hacer un juicio telemático pero no sustituye plenamente al juicio presencial”.

Para Chaves, en esa relación administración con administrado “hay algo muy preocupante y es la llamada electrocracia. El procedimiento electrónico marca todo y el algoritmo tiene su protagonismo. A veces la tecnología se convierte en el enemigo de las garantías y derechos. Yo me resisto a eso, el procedimiento administrativo debe ser algo abierto y la gente puede aproximarse y poder hablar con el funcionario directamente. El vía crucis de la cita previa es lamentable”.

El magistrado Chaves, ponente en el último Congreso de la Abogacía celebrado en Tarragona, donde habló de las relaciones de los jueces con los abogados siguiendo su libro Elogio de los abogados escrito por un juez del 2023. (Imagen: Abogacía)

Las carencias de la electrocracia

Por desgracia, recuerda que “la electrocracia está al servicio de la celeridad, no de la exactitud ni tampoco del ciudadano. Con la pandemia se dio un paso tecnológico, pero no podemos renunciar a las garantías como hay en el procedimiento administrativo. La Constitución española nos habla de dignidad de la persona humana y de remover los obstáculos para la igualdad efectiva. Si hay una brecha digital, la administración tiene que acompasar el paso para aquellos que no conocen bien esta tecnología”.

Chaves defiende “la humanización del derecho administrativo y la administración porque se escapa el objetivo clave de la administración que es el interés general entendido como la suma de los ciudadanos”.

En cuanto a la tan esperada Ley de Contratos del Sector Público, Chaves cree que “se ha convertido en una norma para elites empresariales, hay muchos requisitos y garantías que se establecen para licitar y eso hace que muchos empresarios no puedan afrontar y contratar con la administración. El pequeño licitador se ve expulsado del mercado público. Ahora la administración tarda en adjudicar dichos contratos y sigue tardando en pagar, como ya es conocido por todo el mundo”.

Nuestro interlocutor ve con buenos ojos la idea del ministro José Luis Escrivá, responsable de Transformación Digital y Función Pública, de abordar el reto de la digitalización de la administración. “No es nada sencillo, requiere inversiones cuantiosas y que los profesionales estén formados. Esto coincide con el proceso de consolidación que se hace en las administraciones de miles de interinos en toda España que estaban en una situación abusiva. Tenemos una plantilla sin esa formación tecnológica para esa futura administración digital”.

Para Chaves, aun tardaremos en ver esta administración digital. El RD 6/2023 ya habla de enviar el expediente en formato electrónico debidamente, pero esta iniciativa no ha cuajado en la mayor parte de las administraciones locales del país. Lo mandan cuando pueden y si no, esperan a otra norma que les espolee. Son leyes bonitas en el papel, pero el mandato jurídico se detiene a las puertas de la imposibilidad económica, técnica que tienen algunas de ellas”.