Perdonada una deuda de 38.000 euros a una mujer arruinada porque su exmarido no pagaba la manutención de sus hijos
La afectada se vio obligada a solicitar tarjetas de crédito y préstamos a las entidades bancarias
(Imagen: E&J)
Perdonada una deuda de 38.000 euros a una mujer arruinada porque su exmarido no pagaba la manutención de sus hijos
La afectada se vio obligada a solicitar tarjetas de crédito y préstamos a las entidades bancarias
(Imagen: E&J)
El Juzgado Mercantil número 1 de Tarragona ha perdonado una deuda de alrededor de 38.000 euros a una mujer que se vio inmersa en una situación de insolvencia porque su exmarido no le abonaba la manutención de sus dos hijos establecida durante el divorcio. Como consecuencia, la afectada se vio obligada a solicitar tarjetas de crédito y préstamos que, posteriormente, no pudo pagar.
Los hechos se remontan al divorcio de la mujer y su marido. A pesar de que se estableció por convenio regulador que el padre debía pagar una cantidad mensual, estuvo un largo tiempo sin cumplir con los pagos. Esto causó un grave perjuicio económico en la familia de la mujer, acumulando una deuda de hasta 20.000 euros que, a pesar de los intentos de reclamación, nunca fueron reintegrados en su totalidad.
Durante ese tiempo y para mantener a sus hijos, la mujer tuvo que solicitar tarjetas de crédito y préstamos para cubrir los gastos básicos del hogar. «Mi exmarido y yo habíamos acordado pagar conjuntamente las actividades extraescolares, el material del colegios y cuestiones importantes como el dentista. Primero empezó a dejar de pagar su parte en esto y luego también la manutención que se había establecido», recuerda la afectada, quien terminó recurriendo al despacho Bergadà Asociados para que le llevaran el caso.
«Llegaba la época de comprar los libros y solicitaba una tarjeta de 400 euros porque era muy fácil hacerlo. Recuerdo que unas navidades solicité otra porque no tenía con qué comprarles a mis hijos los regalos. En seis años alcancé una cifra de unos 30.000 euros de deuda con diferentes entidades a las que había solicitado tarjetas y préstamos con intereses abusivos. Subsistía como podía», expone ahora ya aliviada.
La Ley de la Segunda Oportunidad
En 2021, la mujer encontró trabajo en otra empresa y, con dificultades y con gran ayuda de sus familiares, intentó cumplir con todas sus obligaciones de pago, pero pese a intentar renegociar las deudas con las entidades bancarias, estas «no le ofrecieron ninguna facilidad». «Nuevamente, los bancos priorizaron sus intereses antes que proporcionar solución a un cliente que, evidentemente, estaba en una situación complicada pero que quería hacer frente al pago de sus deudas», comenta en este sentido Marta Bergadà, abogada de la afectada.
Llegados a este punto, y dado que la mujer era deudora de buena fe, recurrieron a la Justicia. Transcurridos unos diez meses, el titular del Juzgado Mercantil número 1 de Tarragona le perdonó la deuda de 37.985 euros a gracias a la Ley de la Segunda Oportunidad, exonerando finalmente del pasivo insatisfecho.
En este contexto, Bergadà explica que «hay muchas personas que se encuentran en una situación de insolvencia y ahogadas por las deudas por culpa de sus exparejas, la cuales han dejado de pagar la manutención de sus hijos, teniendo que hacer frente a solas a todas las adversidades. Han de saber que la Ley de la Segunda Oportunidad, junto a un buen asesoramiento legal, es clave para dejar el pasado atrás y quitarse esa pesada mochila de deudas que los acompaña».