Un propietario de una comunidad es condenado por hostigar al conserje del edificio
La Audiencia Provincial de Baleares considera probado que el vecino adoptó una actitud hostil continuada con el trabajador
(Imagen: E&J)
Un propietario de una comunidad es condenado por hostigar al conserje del edificio
La Audiencia Provincial de Baleares considera probado que el vecino adoptó una actitud hostil continuada con el trabajador
(Imagen: E&J)
La Audiencia Provincial de Baleares ha dictado sentencia condenando a un propietario de una comunidad de vecinos a pagar una multa de 360 euros al conserje de la finca por hostigarle en numerosas ocasiones.
El actor, que vive y trabaja como conserje en un edificio de Palma, venía sufriendo desde marzo de 2022 que un vecino del inmueble, cada vez que se encontraba con él le dirigiese expresiones tales como “me cortas el agua”, “te vas a enterar, no te voy a dejar en paz”, e incluso en ocasiones llamó a la Policía Nacional para denunciar que les estaba robando el agua.
El Juzgado de Instrucción núm. 10 de Palma de Mallorca condenó al acusado como autor responsable de un delito leve de coacciones, previsto en el art. 172.3 del Código Penal, a la pena de dos meses de multa a razón de seis euros diarios (360 euros en total). Contra dicha sentencia el condenado interpuso recurso de apelación.
El condenado adoptó una actitud hostil continuada
La Audiencia Provincial de Baleares ha desestimado el recurso, ratificando así el fallo recurrido al compartir lo razonado en la sentencia de instancia.
La magistrada del tribunal advierte que el relato de hechos probados viene avalado por el presidente y administrador de los comuneros y por otra vecina del inmueble, quienes manifiestan que el denunciado es una “persona agresiva que grita constantemente al trabajador y que le acusa de estar robando a la comunidad”.
En opinión de la juzgadora, este vecino, el ahora condenado, adopta una “actitud hostil continuada”, que “en lugar de utilizar exclusivamente los cauces legales para defender sus derechos, si como afirma en el recurso, se están produciendo actos de defraudación, acoso y amenazas de muerte frente a él, adopta una actitud que sostiene en el tiempo y que coarta la libertad del denunciante hasta el punto de impedirle realizar su actividad laboral”.