La apuesta tecnológica de Elzaburu le ayuda a mantenerse como firma de referencia en materia de propiedad industrial
Javier Esteban, nuevo CIO de este despacho, se encarga de implementar mejoras para que estos profesionales sean más eficientes
Alfonso Díez de Rivera, presidente, y Mabel Klimt, socia directora, han apostado por la tecnología para seguir creciendo a doble dígito. (Imagen: Elzaburu)
La apuesta tecnológica de Elzaburu le ayuda a mantenerse como firma de referencia en materia de propiedad industrial
Javier Esteban, nuevo CIO de este despacho, se encarga de implementar mejoras para que estos profesionales sean más eficientes
Alfonso Díez de Rivera, presidente, y Mabel Klimt, socia directora, han apostado por la tecnología para seguir creciendo a doble dígito. (Imagen: Elzaburu)
En los últimos años, es imparable el proceso de transformación digital de Elzaburu, poniendo el foco en el uso de la tecnología para alcanzar una mayor eficiencia por parte de sus colaboradores y mejorar la experiencia del cliente. La irrupción en nuevos negocios y esta apuesta tecnológica han hecho que Elzaburu haya crecido a doble dígito. Al frente de esta iniciativa, respaldada por la dirección del despacho, se encuentra Javier Esteban, quien lleva trabajando desde hace cinco meses, apoyado en un equipo de IT de siete personas.
Javier Esteban se ha incorporado a la organización de Elzaburu como nuevo CIO (chief information officer) con el objetivo de reforzar la estrategia corporativa vinculada a la innovación, aplicar la tecnología a los nuevos modelos de negocio y promover la automatización mediante la implantación de IA en los procesos. La firma ha diseñado un Plan Estratégico a nivel tecnológico en el que se han definido una veintena de iniciativas, movilizando su tecnología al mundo SaaS, buscando soluciones escalables desde la optimización de costes.
En los últimos cinco años, este puesto de CIO se ha ido convirtiendo en clave, no solo en las grandes empresas, sino también en los principales despachos de abogados del país. Se buscan profesionales que conozcan bien el entorno tecnológico y el propio negocio de la organización para implementar esas herramientas. Es, en muchos casos, el punto de conexión entre el entorno tecnológico de la firma y su propia actividad empresarial, lo que ayuda a evitar los cuellos de botella que puedan producirse.
Este experto, que se ha quedado gratamente sorprendido por el compromiso de Elzaburu con la tecnología, explica a Economist & Jurist: “Mi objetivo es que la tecnología sea una parte intrínseca en todas las áreas del negocio de la firma; estamos implementando un nuevo modelo tecnológico con herramientas basadas en automatización e IA que nos permite ofrecer un servicio diferencial y de excelencia a nuestros clientes”.
Desde esta firma centenaria siempre se ha hablado de la apuesta por la innovación: “Cuando cuidamos de las patentes o de las marcas de nuestros clientes, siempre estamos innovando para dar esa respuesta de apoyo con las herramientas adecuadas en cada momento. Tanto Mabel Klimt, socia directora, como Alfonso Díez de Rivera son conscientes de que la inversión en tecnología es alta. Esto nos permite atender a más clientes y, al mismo tiempo, nos permite crecer y responder rápido a sus necesidades. Acortamos mucho los tiempos de respuesta”, afirma.
Nuestro interlocutor, tecnólogo y economista de formación, está focalizado en dos actividades: una puramente tecnológica y otra de negocio. Precisamente esa polivalencia le ayuda a entender cómo la implementación de las herramientas tecnológicas debe ayudar a ser más eficientes a los profesionales de Elzaburu. “Estamos implementando soluciones de IA para lograr más eficiencia en nuestro trabajo y ser más productivos. Eso ha llevado a implementar un programa de capacitación para subir el nivel en el uso de estas tecnologías en la empresa”.
Este experto reconoce que el despacho está probando varias herramientas antes de tomar una decisión sobre cuáles se van a utilizar: “Al final, se trata de alimentar esos modelos de IA con nuestra propia información, porque la que llevan estas herramientas adheridas es muy generalista. Estamos con una aplicación de Open Source que se alimenta con documentación interna de la compañía. Tenemos millones de documentos. No podemos olvidar que fuimos uno de los primeros despachos que digitalizó todos los expedientes de la firma, eliminando el papel del día a día, hace algo más de diez años”.
Uso de la IA a nivel diario
El uso de la tecnología de IA permite incorporar carteras de marcas de manera simultánea sin tener que hacer el trabajo de forma manual: “Toda esa información que nos llega de empresas que están en distintos países hay que verificarla con los organismos donde están registradas esas marcas. Se trata de comprobar que el derecho sigue vigente, que las fechas de renovación son las que nos dicen. Eso supone un trabajo de automatización con estas herramientas, con lo cual ganamos en eficiencia y tiempo realmente”
Para Javier, “nuestra apuesta tecnológica es clara. Somos una firma con clientes en todo el mundo y hay que atender esas necesidades. Sin esas tecnologías que ya tenemos y otras que estamos incorporando, sería complicado realizar nuestro trabajo y atender a estos clientes. Lo mismo ocurre con los miles de correos electrónicos que recibimos, en los que llegan órdenes de renovación del derecho o algunos temas comerciales concretos. Gracias a un desarrollo de IA que hemos implementado, podemos clasificar los correos que recibimos a diario y que sean similares”.
Javier es licenciado en Ciencias Empresariales por la Universidad de Valladolid y executive MBA por el Instituto de Empresa. Cuenta con una gran experiencia en el ámbito de la consultoría tecnológica en transformación digital en entidades como Deloitte, E&Y o Indra, y ha desempeñado el puesto de CIO en Previsión Sanitaria Nacional (PSN), compañía en la que lideró el proceso de transformación digital del modelo de negocio asegurador.
A lo largo de su trayectoria, ha participado en diferentes proyectos de identificación e implantación de aplicaciones tecnológicas y de seguridad de la información, actuando como nexo de unión entre la estrategia corporativa y las nuevas tecnologías para optimizar el desarrollo del negocio. “Los clientes valoran la apuesta tecnológica. Todos ellos valoran el área privada que se les ha desarrollado en nuestra web con la tecnología de Salesforce. Con ella, pueden ver el estado de sus carteras en todos los países donde están ubicados y les permite interactuar con nosotros», aclara Javier.
En la página web de Elzaburu se ha incorporado un test de autodiagnóstico cuya utilidad radica “en saber cuál es su situación a nivel de propiedad intelectual e industrial en la gestión de sus activos y de qué manera les podemos ayudar para que dicha gestión sea mejor y más productiva”.
La importancia de la ciberseguridad
Otra cuestión que ha reforzado Elzaburu son sus políticas relacionadas con la ciberseguridad: “El nivel de concienciación que hay en el despacho sobre estas cuestiones es muy elevado. Por un lado, hemos desarrollado mecanismos técnicos que ayudan a detectar vulnerabilidades y amenazas. Junto a ello, organizamos campañas internas de formación constantes, donde se generan cursos y videos de concienciación. Lo que hemos conseguido es que estos ataques simulados que hacemos sean tenidos en cuenta. Al final, el índice de incidencias es casi imperceptible en nuestra organización. En esta actividad es clave el equipo de IT, que superviso, y que sirve de apoyo para estas cuestiones”.
Javier Esteban subraya la apuesta tecnológica de Elzaburu a lo largo de estos años: “Ha sido uno de los primeros despachos en implementar Salesforce en 2011. Esta es una solución tecnológica que permite a todos los empleados tener un frontal común donde pueden ver sus actividades, tareas, métricas; y eso coincidió con ese proyecto de digitalización que ha ayudado a la firma a ser competitiva. Un desarrollo tecnológico que es imparable, porque las necesidades de los clientes crecen y hay que darles respuesta en tiempo y forma en todo momento”.
La implementación de la tecnología en esta firma española se hace de forma progresiva: “Se trata de identificar casos de uso y, una vez identificados, ver qué tipo de tecnología se requiere, si es con IA o no, y a partir de ahí evaluar su coste económico, que es otro elemento a tener en cuenta. Hoy, cualquier desarrollo que implementemos de terceros sobre IA tiene un coste elevado. A medida que se abran más data centers y haya más computación a nivel mundial, es posible que ese coste se reduzca. De todas formas, si no eres el primero en implementar una aplicación de este tipo, otro te puede adelantar. Eso hace que estudiemos bien las inversiones para seguir siendo competitivos”.
Este experto se ha incorporado al grupo de abogados y expertos en IT en el que confluyen profesionales de distinta firmas, liderado por Manuel Asenjo, director de IT en Broseta y Javier Durán, director de servicios generales de IT de Ceca Magán Abogados: «Somos cerca de cuarenta profesionales en este foro en el que intercambiamos opiniones entre expertos porque realmente la problemática que tenemos en las firmas son parecidas. Compartimos problemas y soluciones y aquí no hay competencia porque nos ayudamos los unos años otros”.