Una nueva Directiva obligará a las empresas a desvelar el salario antes de las entrevistas con sus candidatos
Una nueva Directiva obligará a las empresas a desvelar el salario antes de las entrevistas con sus candidatos
La Comisión Europea ha presentado una propuesta legislativa sobre transparencia retributiva con el fin último de garantizar la máxima de “misma retribución por el mismo trabajo”. Entre otras medidas, la futura Directiva obligará a los empleadores a informar a los candidatos de cuál será el salario inicial en el mismo anuncio de la vacante o antes de la entrevista de empleo.
La propuesta que acaba de presentar la Comisión se trasladará ahora al Parlamento Europeo y al Consejo para su adopción. Una vez concluido el proceso, los Estados miembros dispondrán de dos años para incorporar la Directiva al ordenamiento jurídico interno. Además, tras el transcurso de ocho años, la Comisión llevará a cabo una evaluación de esta Directiva.
La propuesta europea, adoptada en consideración a los efectos devastadores de la pandemia de COVID-19 en las empresas y a sus graves consecuencias que agudizan las desigualdades de género, se centra en dos factores fundamentales para lograr la igualdad de retribución: por un lado, un bloque de medidas para garantizar la transparencia retributiva; y, por otro, un conjunto de medidas para facilitar el acceso a la justicia a las víctimas de discriminación retributiva.
Medidas para garantizar la transparencia retributiva
- Como ya hemos adelantado, el empleador deberá informar a los candidatos de una vacante de cuál es el salario inicial o la horquilla correspondiente, ya sea en el mismo anuncio de la citada vacante o antes de la entrevista con el aspirante.
- El empleador no podrá preguntar a los candidatos por su historial salarial.
- Los trabajadores tendrán derecho a solicitar información a su empresa sobre su retribución individual y sobre su comparativa con los niveles retributivos medios, desglosados por sexo y categorías de trabajadores que efectúen un mismo trabajo o uno de igual valor.
- Las empresas con igual o más de 250 trabajadores estarán obligadas a publicar cuáles son las diferencias retributivas existentes entre sus trabajadores. Además, a escala interna, también estarán obligadas a facilitar información sobre la posible brecha retributiva de género existente por categorías laborales.
Como apunte, se estima que, en el caso de tales empresas con el citado volumen de trabajadores, el coste anual medio que conllevaría informar a la plantilla sobre las retribuciones oscilaría entre 379 y 890 euros.
- Cuando la información publicada evidencie una diferencia injustificada entre hombres y mujeres de al menos el 5%, la empresa deberá realizar una evaluación retributiva en colaboración con los representantes de los trabajadores.
Medidas para facilitar el acceso a la justicia para las víctimas
- Tendrán derecho a obtener una indemnización, aquellos trabajadores que hayan sufrido una discriminación retributiva por razón de género. Tal compensación podrá comprender el reembolso de los atrasos y las primas o pagos en especie relacionados.
- La carga de la prueba en materia de discriminación retributiva recae en las empresas. Es decir, por defecto, serán los empleadores los que estarán obligados a acreditar que no existe discriminación retributiva bajo su dirección.
- Los Estados miembros deberán habilitar un baremo de sanciones específicas, con indicación de cuáles son las multas mínimas, para aquellas empresas reincidentes en materia de discriminación de retribución.
- Los organismos de igualdad y los representantes de los trabajadores podrán intervenir en los procesos judiciales (o administrativos) en nombre de los trabajadores afectados, así como en las demandas colectivas para la igualdad retributiva.
Voces autorizadas
“Por un mismo trabajo la retribución ha de ser la misma”, valora Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea.
“Para que la retribución sea la misma, es necesario que impere la transparencia. Las mujeres tienen que saber si quien las contrata las está tratando equitativamente. Si no es así, es necesario que puedan defenderse y recibir su justa compensación”, agrega.
Por su parte, Věra Jourová, vicepresidenta de la Comisión Europea y responsable de Valores y Transparencia, sostiene que “ha llegado la hora de que tanto las trabajadoras como los trabajadores puedan hacer valer plenamente sus derechos. Queremos que quien se presente a una entrevista de trabajo u ocupe un puesto en plantilla pueda exigir una retribución justa, y que sepa cómo reivindicar sus derechos, de ahí que las empresas tengan que aplicar políticas retributivas más transparentes”.
“Se acabaron los dobles raseros y las excusas”, asevera la comisaria europea.
Por último, Helena Dalli, comisaria de Igualdad, ha declarado que la presente propuesta legislativa de transparencia retributiva “es un importante paso en pos de la aplicación del principio de igualdad de retribución por un mismo trabajo o un trabajo de igual valor entre mujeres y hombres. Les permitirá hacer valer su derecho a la igualdad de retribución y, en última instancia, contribuirá a poner fin al sesgo de género en la retribución”. Además, “también permitirá detectar, reconocer y hacer frente a un problema que queríamos erradicar desde la adopción del Tratado de Roma en 1957”.
“Las mujeres merecen su debido reconocimiento, igualdad de trato y que se valore su labor, y la Comisión se ha comprometido a garantizar que los entornos de trabajo cumplan este objetivo”, ha confesado la comisaria de origen maltés.