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Tomás Ramón Fernández, catedrático de administrativo, y Lourdes Arastey, magistrada del TJUE, premiados por ACIJUR en los Premios Puñetas

Por su parte, las Oficinas de Comunicación del Poder Judicial y Mabel Lozano, escritora y directora de cine contra el maltrato, también fueron galardonadas

Foto de familia de los premiados en esta XIII Edición de los Premios Puñetas. (Imagen: ACIJUR)

Luisja Sánchez

Periodista jurídico




Tiempo de lectura: 6 min

Publicado




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Tomás Ramón Fernández, catedrático de administrativo, y Lourdes Arastey, magistrada del TJUE, premiados por ACIJUR en los Premios Puñetas

Por su parte, las Oficinas de Comunicación del Poder Judicial y Mabel Lozano, escritora y directora de cine contra el maltrato, también fueron galardonadas

Foto de familia de los premiados en esta XIII Edición de los Premios Puñetas. (Imagen: ACIJUR)



Tras la resaca electoral del pasado 9 de junio, cuando se celebraron los comicios europeos, este lunes ya se ha cobrado su primera víctima en la vicepresidenta segunda del Gobierno y Ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, quien poco antes de la sobremesa anunciaba en una comparecencia sin preguntas su renuncia al cargo de coordinadora general de SUMAR. Una parte notable de los operadores jurídicos se dieron cita en la XIII Gala de los Premios Puñeta de ACIJUR.

Unos premios que siempre concitan la presencia de una parte importante de nuestros juristas, como fueron el presidente del Supremo, Manuel Marchena; el presidente del CGPJ, Vicente Guilarte; el magistrado del Tribunal Constitucional, el exministro de Justicia, Rafael Catalá; el presidente del Colegio Notarial de Madrid, José Ángel Martínez; del Consejo General de los Procuradores, Juan Carlos Estévez, acompañado por el decano del colegio madrileño, Alberto García, o la vicedecana del ICAM, Isabel Winkels, entre los asistentes al evento.



Calma tensa entre los asistentes, pocas declaraciones a la espera de que en cualquier momento se publique en el BOE la ley de amnistía. Hace una semana y media, el pasado 30 de mayo, se aprobó la Ley de Amnistía en el Congreso de los Diputados. Sin embargo, once días después, la norma sigue sin estar plasmada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y, por tanto, sin entrar en vigor de forma fehaciente. La ley fue aprobada en la Cámara baja con 177 votos a favor y 172 en contra el pasado 30 de mayo. En ese momento, se abrió un periodo de 15 días, según establece el artículo 91 de la Constitución Española, en el que el Rey debe ratificar el texto y el BOE publicarlo.



De todas las intervenciones, merece la pena destacar la del catedrático de Derecho Administrativo, Tomás Ramón Fernández, premiado por su trayectoria profesional como jurista vinculado a las mejoras del derecho público y su oposición clara a la ley de amnistía. Tras recibir el premio por parte de la directora de Colectivos y Justicia de la entidad Banco Santander, Julia Fernández, este jurista recordó que “vivimos un momento difícil porque el poder ejecutivo en nuestro país está arrinconando el Estado de Derecho y ahora parece que va a por los jueces”, comentó.

Este jurista ha comparecido en el Senado hace unos días señalando que, “si se aprueba y se aplica” la amnistía, supondría que el Estado de derecho en España “casi” desaparezca. Así lo aseguró en su comparecencia en la Comisión conjunta de Constitucional y Justicia para analizar la amnistía a petición del PP, donde el catedrático de Derecho Administrativo emérito de la Universidad Complutense de Madrid expresó sus dudas en torno a la proposición de ley del PSOE que prevé amnistiar a los líderes del ‘procés’.



Tomás Ramón Fernández, premio a la trayectoria profesional, un jurista comprometido con la democracia. (Imagen: ACIJUR)

Un premio de nivel

En dicha intervención, recordó que “no comparto la argumentación buenista del Gobierno de que la amnistía busca conseguir una pacificación y abrir una nueva etapa en Cataluña”. En este sentido, dijo que esta exposición “tendría alguna credibilidad” si se hubiese defendido antes de las elecciones generales del pasado 23 de julio y no “después, a la vista de los números proporcionados” por las urnas. En la Constitución no hay lugar al interés personal, sino solo a “la voluntad racionalmente fundada”, rechazando así que haya “un fundamento objetivo y verificable”.

Tomás Ramón Fernández sucede en este premio de nueva creación, el Premio ‘Puñetas a una Trayectoria’, creado en 2023 con el fin de resaltar un reconocimiento a la carrera profesional de Miquel Roca Junyent y Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, por ser padres de la Constitución, juristas de larga carrera profesional y reconocido prestigio y defensores del Estado de Derecho.

La Junta Directiva de ACIJUR ha roto la tendencia de dar el premio Puñetas de Oro a juristas de reconocido prestigio. Así fueron los premios que recibieron el Tribunal Constitucional en 2020, que recogió su presidente Juan José González; María Luisa Segoviano, primera mujer presidenta de Sala del Supremo en 2021; Pascual Sala, expresidente del Supremo y del CGPJ en 2022; y las abogadas Almudena Arpón, presidenta de la IBA, y Urquiola de Palacio, presidenta de la UIA, que lo recibieron de forma conjunta.

En esta edición, el giro ha sido de 180 grados y este galardón ha sido otorgado a las Oficinas de Comunicación del CGPJ. En 2004, el que fuera vocal portavoz del CGPJ, Enrique López, e impulsor de la iniciativa, recogió el premio y mencionó el trabajo de Agustín Zurita y Carlos Berbell, periodistas que pusieron en marcha esta iniciativa en aquel momento. También agradeció el premio Luis Salas, director de Comunicación del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, mientras que el premio fue entregado por el presidente del Consejo General del Poder Judicial, Vicente Guilarte.

El Premio ‘Puñetas de Plata’ ha sido otorgado a Lourdes Arastey, jueza del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), por su trayectoria como jueza de la corte suprema constitucional europea y su excelente labor como jurista en temas de jurisdicción social e igualdad de género.

Lourdes Arastey recibe el premio del juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón. (Imagen: ACIJUR)

Arastey, que coincidió con María Luisa Segoviano en la Sala Social del Supremo, es la primera jueza de carrera profesional que llega al TJUE. Su premio se lo entregó Manuel García-Castellón, juez de Instrucción de la Audiencia Nacional, que fue Premio Puñetas de Plata en 2022. Esta magistrada fue reconocida por ASNALA como la mejor laboralista de aquel 2022, ya algo lejano para todos, por cierto.

Esta magistrada, luchadora por la igualdad de derechos desde su profundo conocimiento de la legislación social, es afiliada a la Asociación de Jueces Francisco de Vitoria. Al concluir la entrega de premios, se la pudo ver conversar con compañeros de su asociación, como fue el caso de los magistrados Raimundo Prado, Natalia Velilla y María Tardón, así como con las juezas Rosa Freire, con las que grabó recientemente el corto “Señorías” de la cineasta María Guerra, que tanta aceptación ha tenido.

El pasado año, los ganadores de este Premio Puñetas de Plata fueron Almudena Castro-Girona, directora de la Fundación Aequitas, y Juan Pujol, presidente de Lefebvre, otorgado ex aequo a la Fundación Aequitas del Consejo General del Notariado, por su defensa de los derechos de las personas con discapacidad y en situación de vulnerabilidad, y a la publicación jurídica ‘Mementos’ de la editorial Lefebvre.

Lucha contra la trata

Por su parte, Mabel Lozano, escritora y directora de cine, ha recibido el Premio ‘Puñetas de Bronce’, premio que recibió el año pasado el escritor Lorenzo Silva. En esta ocasión, la junta directiva de ACIJUR ha valorado su labor en defensa de las mujeres vulnerables en sus documentales, especialmente aquellas que sufren explotación a través de la prostitución y de la trata. Ha recogido el galardón de manos de Mª Ángeles Carmona, vocal y presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del CGPJ.

En la categoría ‘Puñetas Periféricas’ se ha concedido el premio conjuntamente al ciudadano marroquí Ahmed Tommouhi y al guardia civil Reyes Benítez, por su afán en demostrar la inocencia de Ahmed Tommouhi, condenado injustamente por violación en un caso lleno de irregularidades.

Luis Salas, director de comunicación de la Oficina del TSJ de Madrid, y Enrique López, magistrado que hace veinte años puso en marcha las Oficinas de Comunicación, agradecen el premio de ACIJUR. (Imagen: ACIJUR)

Por la labor solidaria y dedicación de Reyes Benítez, que creyó en su inocencia hasta conseguir demostrarla, y la estoicidad, fortaleza y paciencia de Ahmed Tommouhi en sus casi quince años de prisión por delitos que no cometió. Han hecho entrega del premio la presidenta de ACIJUR, Patricia Rosety, y Francisco Muro, miembro de ACIJUR.

Este premio fue a parar a la magistrada Reyes Martel, jueza del Juzgado de Menores número 1 de Las Palmas de Gran Canaria y presidenta de la Asociación Up2u (Depende de ti), una iniciativa vinculada con la presencia del menor en los juzgados.

Por último, el Premio ‘Vete a Hacer Puñetas’ ha recaído en el maltrato a la Justicia y la penosa imagen que transmite, con situaciones como la no renovación del CGPJ, los ataques y señalamientos a jueces, el procedimiento de urgencia para tramitar la Ley de Amnistía, etc., que revelan un preocupante descrédito de la Justicia.

Este premio es otorgado por ACIJUR con una intencionalidad crítica y de denuncia a aquellas personas, colectivos, instituciones o hechos de actualidad que se han significado por su negativa contribución a la mejora del Estado de Derecho, a la defensa de derechos y libertades, especialmente de la libertad de información, o han dificultado la labor de los periodistas.

El pasado año, este premio quiso denunciar a aquellas personas, colectivos, instituciones o hechos de actualidad que se han significado por su negativa contribución a la mejora del Estado de Derecho, a la defensa de derechos y libertades, especialmente de la libertad de información, o han dificultado la labor de los periodistas. En la pasada edición, el premio recayó en el proceso de la Ley del ‘Solo Sí es Sí’ y sus efectos indeseable.