Zelenski: de comediante a salvador de un pueblo invadido
El líder ucraniano dirige a su pueblo frente a la agresión de Rusia
Presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski. (Foto: Twitter)
Zelenski: de comediante a salvador de un pueblo invadido
El líder ucraniano dirige a su pueblo frente a la agresión de Rusia
Presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski. (Foto: Twitter)
Volodímir Zelenski es un rara avis en política internacional. Desde que comenzó la guerra en Ucrania, el 24 de febrero, su figura se ha catapultado hasta posicionarse en un líder al que imitar.
Estudiante de Derecho, Zelenski encontró la fama en su país gracias a sus actuaciones como comediante y actor en películas como Love in the Big City o 8 New Dates.
Ahora, el líder ucraniano parece haber salido de su guion habitual y ha unificado, gracias a su capacidad de liderazgo y ejemplo, a todos los ucranianos, población que se creía dividida entre antirrusos y prorrusos.
Con su nación invadida por soldados, carros de combate y aviones rusos, Zelenski ha ido implorando a la comunidad internacional apoyo militar y económico. Ha obtenido parte de lo que ha solicitado: entregas con material defensivo y antiaéreo, así como paquetes económicos desorbitantes (Estados Unidos ha destinado a esta contienda un total de 1.000 millones dólares, y la Unión Europea unos 5.000 millones de euros).
Conversación con parlamentarios extranjeros
La agenda del presidente de Ucrania ha estado marcada por una comunicación constante con sus homólogos occidentales. Este ha entablado videollamadas con los parlamentos de la Unión Europea, Reino Unido, Estados Unidos, Canadá y Alemania. Su estrategia está clara: quiere apelar a la empatía de sus socios y ha solicitado ayuda para combatir a los rusos por tierra y por aire, cerrando el espacio aéreo ucraniano.
Ante los congresistas estadounidenses, Zelenski recordó el heroísmo demostrado por los americanos en situaciones transcendentales como el 11-S o en el ataque a Pearl Harbor. En el Bundestag alemán, ha increpado al gobierno de Olaf Scholz por seguir comprando gas a Rusia y ha rememorado la caída del muro de Berlín, momento clave para la reunificación alemana tras la Guerra Fría.
«Cada bomba que cae, cada decisión que no se adopta es una piedra con la que se construye ese muro”, declaró.
«Seguiremos luchando por nuestra tierra, cueste lo que cueste», dijo Zelenski en la Cámara de los Comunes británico, robando las palabras proferidas por Winston Churchill cuando el Reino Unido se preparaba para entrar en la Segunda Guerra Mundial.
«Lucharemos en los bosques, en las costas y en las calles», afirmó.
Poder comunicativo
El pueblo ucraniano ha cambiado su parecer con respecto a aquel hombre que ganó las elecciones nacionales en mayo de 2019 bajo Servidor del Pueblo, formación política que comparte nombre con la serie que le hizo famoso, ahora disponible en Netflix.
“Ya no es un cómico. Es un luchador”, afirmaba a Economist & Jurist la directora del Center for Civil Liberties, Oleksandra Matviichuck.
Zelenski, experto en las artes comunicativas, ha accionado todas las vías para confirmar ante su pueblo y ante el mundo su intención de permanecer hasta el final en Kyiv.
Desde que comenzó la contienda, ha ido publicando vídeos en Twitter y en Telegram, dando ánimos a sus ciudadanos, instando a su homólogo ruso, Vladimir Putin, a reunirse con él cara a cara y sin “mesas largas” de por medio.
Zelenski se ha preocupado, también, por los detalles estéticos: ha pedido ayuda y solidaridad a la sociedad extranjera, y lo ha hecho en ucraniano, en ruso y en inglés, y en estas últimas semanas ha vestido de militar, insuflando de ánimos a quienes están defendiendo el país.
Breaking! pic.twitter.com/VCL5mpOVMi
— Володимир Зеленський (@ZelenskyyUa) March 6, 2022
El apoyo a Ucrania y a Zelenski se ha extendido por todo el planeta. Ciudades como París, Londres, Tokio, Berlín o Nueva York han proyectado la bandera ucraniana en sus edificios más emblemáticos y los líderes quieren copiar a Zelenski. La semana pasada, el presidente francés, Emmanuel Macron, asistió a una reunión con sus ministros más cercanos portando una sudadera del ejército aerotransportado de Francia.
Tres semanas después desde que Vladimir Putin decidiera invadir Ucrania, los rusos someten Kyiv desde los costados del norte, este y oeste, mientras continúan sitiando y bombardeando ciudades claves como Mariupol o Kharkiv.
La decisión de Estados Unidos de enviar más armamento defensivo, entre ellos 10.000 misiles antitanque y 100 drones ‘Kamikaze’, demuestra que la guerra aún no se encuentra cercana a la paz. A pesar de las reuniones que están organizando las delegaciones rusas y ucranianas.
Mientras tanto, hombres y mujeres ucranianos siguen empuñando los fusiles y Zelenski se mantiene en el gobierno como el adalid de un pueblo agredido.