Claves para entender la exposición de divisas en la gestión del patrimonio de su empresa
Claves para entender la exposición de divisas en la gestión del patrimonio de su empresa
Por AFEX Associated Foreign Exchange Ltd
Cuando una empresa decide, tras un estudio exhaustivo de mercado, comenzar su actividad en un país extranjero debe tener en cuenta que las variaciones en los tipos de cambio de la moneda pueden afectar significativamente sus inversiones.
Dado que el patrimonio de una empresa lo compone el conjunto de bienes propios desde los que desarrolla su actividad y que son susceptibles de estimación económica, el riesgo viene cuando esos bienes están situados en el extranjero y su valoración se encuentra, por tanto, sometida a la variación del mercado monetario ¿Cómo debe gestionar entonces este patrimonio una empresa española con una sucursal, una fábrica o un comercio en el extranjero?
AFEX, compañía experta en pagos globales y soluciones de gestión del riesgo de divisas, proporciona algunas claves para entender cómo llevar a cabo una estrategia eficiente de la gestión del riesgo divisa a precios competitivos:
1. Conocer los riesgos: Si se quiere lograr rentabilidad económica del negocio, o bien evitar el impacto del riesgo divisa en su cuenta de resultados, deberá atender a dos factores que nunca se deben dejar de lado: el nivel de exposición a la moneda extranjera, y la relevancia que esta exposición puede tener en su cuenta de resultados. Solo teniendo en cuenta estos aspectos podrá lograrse una gestión de divisas eficaz.
2. Informarse sobre los modelos de inversión patrimonial en el extranjero: A la hora de internacionalizar una empresa, existen diversas fórmulas de actuar en el territorio con diferencias jurídicas y fiscales considerables. Un estudio de las diferentes fórmulas legales es esencial para saber cuál es la opción que mejor se adecúa, evitar riesgos innecesarios y añadir valor al negocio.
En este sentido, cabría diferenciar una Sucursal, considerado un establecimiento secundario carente de personalidad jurídica propia, -ya que forma parte de la entidad matriz y es dependiente de ella- de otros modelos como la Oficina de representación, un lugar de negocio fijo, que tampoco tiene personalidad jurídica propia ni órganos de administración y que únicamente otorga poderes al representante de la oficina, quien puede llevar a cabo las actividades de la empresa en su nombre.
Algo distintas son las filiales, compañías mercantiles residentes a todos los efectos en el estado donde se establecen, con autonomía jurídica e independencia de la sociedad matriz.
La estructura societaria que se establezca para la actividad en el extranjero tendrá una repercusión directa sobre los flujos de divisas ya sea en forma de salarios a trabajadores en el extranjero, repatriación de beneficios u otras partidas.
3. Desarrollar una estrategia: Es necesario tener un plan a largo plazo, que marque hacia dónde se dirigen nuestros objetivos y que prevea posibles alternativas a imprevistos o cambios regulatorios. Para ello será esencial analizar la situación y el perfil de la empresa desde el punto de vista económico y determinar los objetivos financieros.
4. Dejarse asesorar por expertos: En el terreno de la inversión es esencial contactar con profesionales con conocimiento de la materia. Un asesoramiento realizado por personas con experiencia gestionando la exposición en divisas no solo evitará riesgos que pueden salir muy caros a la empresa, sino que proporcionará nuevas soluciones, más creativas y eficientes.
Protegerse con coberturas de tipo de cambio y con transacciones al contado: Otro punto clave es crear un plan de cobertura del riesgo divisa que se ajuste a la estrategia utilizando en cada caso las herramientas adecuadas. Desde las transacciones instantáneas al contado hasta las estructuras con futuros y derivados el plan debe proteger los flujos de caja que de otra manera quedarían expuestos. En conclusión, para realizar una buena gestión financiera deben tenerse en cuenta múltiples factores, desde los objetivos de la inversión, con sus correspondientes rentabilidad y riesgo, hasta las restricciones del país en el que se opera en atención a su propia legalidad.