Videojuegos: ¿necesidad de una regulación específica?

La creación de un video juego supone una gran generación de contenido y de creaciones susceptibles de derechos de autor variadas.

Un videojuego es una creación multimedia digital, que conjuga elementos diversos: software, video, sonido, animación gráfica, texto, etc., Permitiendo al usuario interactuar con su contenido.

La Industria del videojuego en nuestro país es un sector indudablemente cada vez más potente que representa en la actualidad en torno a: el 3,8% del sector de la programación casi un 10% de la producción audiovisual y el 14,3% del sector edición, y el 3,2 % en el de las comunicaciones; según la Asociación Española del videojuego. Y se prevé que el auge de este sector no ha hecho más que empezar.

La pregunta que nos hacemos hoy es: ¿Tienen los videojuegos derechos de autor?

Un videojuego es una creación muy compleja, que se compone de distintos elementos objeto de ser protegidos por nuestra legislación, como la programación del software o la obra audiovisual en sí misma. Por lo que la obra al completo, debería estar acogida al Artículo 10 de la Ley de Propiedad Intelectual, ya que se cumplen los tres requisitos recogidos en dicho artículo: cuenta con la suficiente originalidad, es una creación artística y literaria y aparece difundida en un determinado soporte.

El problema es que nuestro país no cuenta con una regulación específica en esta materia, la de los videojuegos, por lo que sería interesante analizar el régimen de protección por el que se van a regir. En la actualidad, se ha denominado a este tipo de obras como obras multimedia a falta de una regulación específica.

Esto no debería ser así, ya que además de los elementos anteriormente mencionados, un videojuego también puede incluir otros elementos que requieran la autorización de terceros, como marcas o derechos de imagen, por lo que también habría que tener en cuenta la propiedad industrial y la protección de datos.

En el contexto internacional no existe tratado alguno que proteja los videojuegos como tales, aunque algunos países sí que han desarrollado regulación específica sobre la materia.

En el marco de la Unión Europea tampoco encontramos una regulación específica sobe videojuegos, ya que la jurisprudencia más relevante sobre el tema del TJUE se ha centrado en la discusión sobre los límites en las medidas tecnológicas de protección que se pueden imponer a los videojuegos sobre copyright.

Se hace por tanto muy complejo la defensa de los intereses de la industria tecnológica de intrusismo y pirateo, ya que sin duda es necesaria una legislación específica para este sector, pero como en muchas otras materias, la sociedad y la tecnología corren a un ritmo que a veces  el derecho no es capaz de alcanzar, habida cuenta de la especialidad del sector y la escasez de legisladores en esta materia.