El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía confirma condena de 22 años de prisión a una mujer por el asesinato de su tía de 84 años
La sentencia ratifica la premeditación del crimen y subraya el peligro generado para los vecinos del edificio afectado por el incendio
(Imagen: E&J)
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía confirma condena de 22 años de prisión a una mujer por el asesinato de su tía de 84 años
La sentencia ratifica la premeditación del crimen y subraya el peligro generado para los vecinos del edificio afectado por el incendio
(Imagen: E&J)
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha ratificado la condena de 22 años y 11 meses de prisión impuesta a una mujer acusada de asesinar a su tía de 84 años en San Fernando, Cádiz.
La decisión del TSJA, que desestima los recursos presentados por la defensa, respalda la sentencia emitida por la Audiencia Provincial de Cádiz y confirma así la gravedad de los actos cometidos y la validez de las pruebas presentadas durante el juicio.
Los hechos: un crimen premeditado
Según los informes judiciales, la acusada acudió a la vivienda de su tía, situada en un edificio residencial de San Fernando, con el claro objetivo de acabar con su vida. Para ello, utilizó un líquido inflamable que derramó por el inmueble antes de iniciar un incendio que rápidamente se propagó por la vivienda, atrapando a la víctima, quien no tuvo oportunidad de escapar.
El tribunal concluyó que la mujer actuó con alevosía, aprovechándose de la avanzada edad de la víctima y su limitada capacidad para defenderse o huir del fuego. Con esta acción, además, puso en riesgo la vida de otros vecinos al provocar un incendio en un edificio habitado.
La Audiencia Provincial de Cádiz, en su fallo inicial, condenó a la acusada por asesinato con alevosía, así como por un delito de incendio que puso en peligro la vida de las personas que residían en el edificio. La sentencia incluyó también la obligación de indemnizar a los familiares de la víctima y a los vecinos afectados por los daños materiales derivados del fuego.
La defensa de la acusada recurrió esta decisión ante el TSJA, argumentando que no existía una intención deliberada de causar la muerte de la víctima y que se había producido un error en la valoración de las pruebas. No obstante, el TSJA concluyó que las pruebas presentadas durante el juicio, incluidas las declaraciones de los peritos y testigos, acreditaban la premeditación y la intencionalidad del crimen.
El tribunal confirmó que la obligación de pagar la indemnización es parte esencial de la reparación por los daños ocasionados, tanto a nivel humano como material.
Con esta decisión, el TSJA pone fin a un caso que destacó tanto por la brutalidad de los hechos como por las repercusiones sociales y materiales que tuvo en la comunidad de San Fernando.