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La manera de vestir y la higiene personal

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La manera de vestir y la higiene personal

Joan Martínez. (Imagen: E&J)



 

MUJER



Además de los considerados básicos, las abogadas pueden incorporar accesorios o complementos que les proporcionen un toque personal. Una buena estrategia es escoger un estilo que se ajuste a las pautas marcadas por los grandes estilistas: Chanel, Armani- Ello no significa que tengamos que vestir con estas marcas, simplemente que nos podemos inspirar en sus creadores con el objetivo de definir nuestro propio estilo. Los dos conceptos clave para la mujer abogado serían discreción y comodidad. La discreción viene impuesta por la profesión y nos ayuda a ganar credibilidad (cuestión importante en el inicio de ejercer la profesión). La comodidad transmitirá confianza en sí mismas y seguridad. Hemos de tener en cuenta que nuestro vestuario de trabajo está, precisamente, para esto, para el trabajo diario. Por tanto, la ropa que llevemos debe aguantar toda la jornada laboral en perfecto estado. ¿cómo lo podemos conseguir? Pues, comprando ropa básica de calidad, ya que una pieza buena no se arruga en dos horas.



 

No es necesario llevar el pelo recogido en el trabajo: Déjate llevar, es perfectamente aceptable



Durante el verano, es mejor ir con medias que sin ellas. Podemos optar por las de 10 Den, que proporcionan en las piernas un tono bronceado natural.

Las medias durante el invierno han de ser oscuras siempre

Vestidos de invierno: en negro, tonos grises y para romper, marrón.

Es preferible no utilizar bordeaux ni tampoco un color claro

Vestidos chaqueta o pantalón de verano:: en beige, azul marino o blanco.

 

Hombre

Algunas ideas interesantes que tal vez no tengamos del todo claras:

 

Las iniciales en las camisas se pueden colocar en el lugar que gustemos:  De hecho, su ubicación depende de las preferencias  del usuario y del pais o ciudad. En América, por ejemplo, se acotumbra a colocar en el puño. En Italia, debajo el bolsillo y en nuestro páis debajo o encima del bolsillo. En ocasiones muy formales, la camisa no ha de llevar bolsillo.

Los botones de la americana no deben ir todos abrochados: el inferior siempre abierto

En un desayuno es aconsejable no quitarse la americana En una cena, se puede hacer siempre qu e lo haga el cliente o el abogado superior..

Para tener una idea aproximada de la longitud de la corbata, pensemos que la punta ha de cubrir el cinturón.

El chaleco en el traje es una opción personal, pero en absoluto obligatoria. Si llevamos chaleco, el botón inferior ha de ir desabrochado.

El traje cruzado proporciona más formalidad, aunque es una prenda cada vez menos frecuente.

Los zapatos, si vestimos de traje, mucho mejor que sean con cordones. Obligatorio si es una situación de mucho compromiso. Con el blazer se aceptan los mocasines en negro o bordeaux. La hebilla en los zapatos sólo en calzado deportivo, nunca con traje

Las camisas para traje o blazer, sin botones en el cuello

A menudo  el ejercicio de la abogacía tiene implicaciones sociales, debiendo acudir a cenas o celebraciones de etiqueta. Estas son algunas de las pautas:

El esmoquin y el frac están previstos sólo para la noche. El frac exige siempre corbatín.

El jaqué es diurno  y requiere americana lisa y pantalón de talle. Nunca ha de llevarse con corbatín..

Siempre en los casos anteriores, zapatos negros con cordones.

 

EL CLIENTE MANDA

 

Un primer consejo para el abogado sería que debe vestir de acuerdo con el tipo de cliente que tiene: no es lo mismo un abogado laboralista que un abogado de una empresa multinacional.

Hemos de encontrar el punto justo: no quedarnos cortos (no vestir con suficiente formalidad) ni excedernos (vestir más formales que la media de nuestro entorno). Ambos errores son peligrosos. En el primer caso (no guardar una mínima formalidad) puede perjudicar nuestro prestigio. Excedernos, en cambio, puede intimidar a nuestro cliente.

 

Cada despacho tiene sus propias normas

 

En líneas generales, podríamos afirmar que en los grandes despachos se exige traje para el hombre, no admitiéndose las combinaciones tipo blazer. Los únicos colores masculinos permitidos son el azul marino y los diferentes tonos de gris, que dando totalmente excluido el color marrón

 

Complementos

 

Cumplir con los requisitos básicos sin no complementar nuetra imagen con accesorios, nos dará iun aspecto uniformado y aburrido, de lo que debemos huir. Para conseguir nuetro propio estilo, debemnos romper la monotonía de los básicos con accesorios más personales.Aunque los complementos permiten ty favorecen más fantasía e imaginación, nuestro entorno laboral limita tímidamente nuestra libertad. Con los accesorios que os proponemos a continuación, ofreceréis siempre una imagen adecuada:

 

n   Pañuelo de seda

n   Pashmina de color

n   Zapatos especiales (conjuntados con la blusa)

n   Chal de color

n   Bolso

n   Collarín: podemos reconvertir un collar de noche demasiado largo, dandole dos o tres vueltas. Les perlas siempre son una opción clásica  y segura.

 

Hay que desterrar del entorno laboral las botas para llevar con falda. Aunque esté de moda, un zapato, en el trabajo siempre será más adecuado.

 

Eliminemos los escotes profundos, las faldas demasiado cortas, las medias trasparentes en invierno, los tacones demasiados altos.

 

No abusemos del perfume.

 

¿Y el viernes por la tarde?

 

En contra de la moda importada de los Estados Unidos de vestir más «casual´´ los viernes por la tarde, debemos argumentar que no nos importa el día de la semana, sino más bien nuestra agenda laboral. Es decir, nuestro vestuario irá en función del cliente que debamos recibir cada viernes por la tarde en concreto. De todas formas, siempre puede surgir un imprevisto a cualquier hora (presentarse un cliente o convocarse una reunión).

 

Básicos

 

HOMBRE

 

n              Traje gris oscuro.

n              Traje azul marino.

n              Blazer: con pantalón de vestir gris y americana azul marino.

n              Corbatas con s dibujos pequeños y camisa también con dibujos pequeños.

n              Camisas de diferentes tonos.

n              Camisa blanca.

 

MUJER

 

n              El negro es una buena opción como a color de base.

n              Pantalón negro de sastre en algún tejido cómodo como la lana fría.

n              Falda a la altura de la rodilla  en crÍpe de lana.

n              Traje chaqueta azul marino para el verano.

n              Camisa blanca de cotó piqué

n              Chaqueta

n              Blusas de colores diferentes.

n              Jersey de cuello alto en la lana cashmere como sustituto de las blusas. Sin chaqueta

n              Camisas de calidad.

n              Zapatos para levar con falda con poco tacón.

n              Zapato para llevar con pantalón: plano.

n              Botín para pantalón con tacón bajo.

n              Abrigo azul marino o negro.

n              Por suerte, ya no es necesario que el bolso y los zapatos concuerden. Los zapatos pueden ser negros y el bolso rojo.

 

 

¿Bolso en los Juzgados?

Es inevitable: El abogado siempre llega al Juzgado cargadísimo de papeles. ¿Qué sucede si el abogado es una mujer?. ¿Como compatibilizar la enorme cartera de documentos con el imprescindible bolso? Los expertos en moda están de acuerdo que cada abogado encuentre su propio sistema, pero que lo encuentre.. La idea básica es que la abogado no pierde su feminidad y siga llevando el bolso, complemento esencial de la mujer.

 

Información facilitada por responsables de la firma Ermenegildo Zegna.

Cristina Giraudi: responsable de venta para España y Portugal de Agnona

Ramón Piqué Sans: responsable de Su Misura

Lander Unzueta: director de Marketing para España y Portugal

 

 

CUANDO LA ELEGANCIA EN EL VESTIR NO ES SUFICIENTE

La Higiene personal, oculta pero presente

 

-˜           Apariencia externa de pulcritud: de nada sirve ir bien vestido y ser buen profesional si el aspecto externo es descuidado y astroso. Debemos conseguir de forma natural una impresión limpia y aseada, «como recién salido de la ducha´´.

-˜           Las uñas: bien cortadas. En el caso de las mujeres, debemos recordar que en un entorno profesional la manicura siempre debe ser discreta. Ya sea tradicional (uñas redondeadas) o francesa (uñas cuadradas), la longitud nunca debe ser excesiva y los colores no demasiado estridentes. Discreción e higiene deben ser las consignas.

-˜           El sudor corporal: controlado. Presuponemos que todo abogado se somete a unos cuidados higiénicos mínimos pero debemos reconocer que las condiciones laborales actuales pueden poner en peligro el equilibrio de nuestro nivel de sudoración: el transporte público en horas punta, el contraste entre la temperatura de la calle y la del despacho (calefacción, aire acondicionado), los nervios ante una vista o una reunión- Son muchos factores pero no los podemos poner como excusa. Hace falta ser previsor y dotarnos de soluciones: tener un desodorante en el despacho, aprovechar la hora de la comida para tomarnos una ducha, utilizar productos de intensidad alta, utilizar un desodorante para pies- Todo ello ayudará al profesional que sufra de un exceso de sudoración y le hará ganar en confianza y autoestima.

-˜           Manos húmedas: estrechar una mano sudorosa causa una extrema sensación de rechazo difícil de olvidar. Si tenemos este defecto, debemos extremar la limpieza de las manos, y estar provistos de pañuelos (de celulosa o fibra natural)

 

-˜           Los dientes: relucientes. Un cepillo de dentes y pasta dentífrica deberían ser elementos habituales entre los enseres personales que tenemos en el despacho. La empresa podría colaborar con la higiene dental de sus abogados facilitando recipientes para depositar los cepillos e incluso pasta dentífrica. Es indudable que lavarse los dientes después de la comida, además de constituir un indudable beneficio para la salud, mejora nuestra imagen y, de paso, corrige o atenua otro defecto higiénico: el mal aliento.

-˜           El cabello: brillante. Caspa, escamas, cabello quebradizo, caída de cabello y ya no digamos problemas más graves como piojos o liendres. Con delicadeza y sin burla, podemos proponer al compañero afectado diversas soluciones, que van desde productos farmacéuticos hasta adoptar hábitos alimentarios más saludables.

*No caer en el excesivo acicalamiento: del mismo modo que un aspecto desaseado perjudica nuestra imagen, un excesivo celo también nosa perjudica. El cuidado personal no debe parecer artificial, dando una imagen demasiado estirada que pueda generar desconfianza entre los compañeros e intimidación a los clientes.

El listado de puntos a tener en cuenta para conseguir una higiene personal impecable no acaba aquí. Evidentemente hay otros puntos que no por obvios se deben descuidar: nariz despejada, hábitos correctos entre los compañeros fumadores, manchas en la ropa…

¿Qué debemos hacer con un compañero de despacho «desarreglado´´?

Cada profesional sabe cuáles son sus puntos débiles y dónde tiene que aplicar unos hábitos de higiene especialmente estrictos. Si algún compañero no los cumple, ¿qué debemos hacer? Sólo en el caso de despachos de dos o tres miembros, con un alto grado de confianza entre ellos sería posible decírselo abiertamente, pero ello es muy complicado ya que levanta muchas susceptibilidades. Es más recomendable acudir al sistema de carta o circular del Despacho o contratar los servicios de una empresa de marketing, que incorpore dentro de sus programas, una conferencia de imagen personal ,de modo que el «problema individual´´ queda diluido en la colectividad del bufete. En este sentido, nos permitimos señalar la existencia de unas conferencias referentes al cuidado de la imagen, vestir e higiene corporal, dirigida a profesionales liberales y directivos de empresa y organizada por el Instituto Superior de Derecho y Economía (ISDE), que constituye la primera iniciativa en España en esta materia.* (pie de página)

En cuanto a la primera solución apuntada, proponemos el siguiente modelo de circular:

«Esta firma de abogados, cada vez más preocupada en la mejora de la imagen profesional frente al cliente, considera  que debemos extremar el cuidado de nuestra vestimenta e higiene personal, dado que representamos la imagen del despacho frente al cliente. Por ello no es suficiente la ducha diaria, sino que es aconsejable adoptar las siguientes medidas:

–          es conveniente disponer de cepillo de dientes en el propio despacho para su uso después de las comidas.

–          Asimismo, tener siempre a mano un stick desodorante para su utilización en los casos procedentes.

–    en caso de sudoración excesiva, disponer de polvos talco o pañuelos de celulosa o similares´´

 

 

 * si desea obtener información sobre las Conferencias, puede ponerse en contacto con ISDE (teléfono:93.246.93.90 o email: isde@isdemasters.com)

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