Cuatro de cada diez parados no cobra ayudas

• El porcentaje de parados que reciben prestaciones del SEPE se sitúa por debajo del 60%.
• El Gobierno se ha comprometido con Bruselas para mejorar la protección asistencial.

La última información facilitada por el Ministerio de Trabajo destaca que cuatro de cada diez parados no percibe ninguna prestación económica como ayuda por parte del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Estos datos dan a conocer la tasa de cobertura del desempleo, un indicador que ha sufrido una fuerte caída en los últimos meses y que relaciona el número total de parados con el número de desempleados que se benefician de estas prestaciones.

Después de la llegada del coronavirus y los efectos negativos que han incidido al empleo efectivo, el presidente Sánchez anunció un «escudo social» para «no dejar a nadie atrás» y «salir más fuertes”. Pero los datos reflejan que, de los 3,9 millones de parados inscritos en el SEPE, cerca de 1,7 millones no reciben ninguna prestación. 

El paro de larga duración ha crecido un 20% desde que llegara la pandemia. (Fuente: Economist & Jurist).

Existen dos motivos que explican cómo se ha llegado a esta situación. El primero es que parte de los parados no hayan acumulado suficientes derechos como para ser candidatos a recibir esta ayuda. Pero también puede ser porque estos desempleados hayan agotado ya las prestaciones a las que tenían derecho. A día de hoy el sistema cuenta con 2,2 millones de beneficiarios, pero muchos de ellos perderán las ayudas en la medida en que el desempleo continúe creciendo.

Hasta ahora, el 40% de los parados se encuentran en esta situación, aunque es relevante destacar que el 39% de los parados llevan más de un año en esa situación. Y es que el paro de larga duración ha crecido un 20% desde que llegara la pandemia. Es por esto que las previsiones pasan por que la tasa de cobertura siga disminuyendo todavía más en los próximos meses.

Para paliar la situación, parece que el Gobierno está trabajando en una nueva ayuda especial por la que todos aquellos desempleados que no reciban la prestación puedan recibir hasta 450 euros. Será en las próximas reuniones de los sindicatos y la patronal con el Ministerio de trabajo cuando se estudie la nueva propuesta.

La idea es que este nuevo subsidio tenga la naturaleza de una prestación por desempleo, vinculada con las cotizaciones previas y financiada con cargo al presupuesto de las prestaciones por desempleo, según la información enviada a Bruselas. Para poder obtenerla, será necesario acreditar la falta de rentas individuales y, en algunos casos, las cargas familiares y la realización de un itinerario personalizado de empleo ante el servicio público de empleo competente. La edad, circunstancias familiares y la duración de las ayudas agotadas serán algunos de los factores de los que dependa la duración del subsidio, con la intención de alargar el periodo máximo actual del subsidio ordinario, a lo que también se sumarán las prórrogas de os subsidios extraordinarios que sigan vigentes.

El Ministerio de Sanidad declara que el objetivo de esta medida es aumentar la protección por desempleo, de tal manera que mejore la cobertura al ampliar la duración de las prestaciones y se elimine los fallos de desprotección de los programas actuales. Además, pretende simplificar el funcionamiento del sistema, otorgando más seguridad jurídica, claridad y facilidades en la gestión. Y junto a esto, relacionar esta protección con el compromiso de seguimiento y realización de un Itinerario Personalizado de Empleo, para que estas ayudas puedan facilitar la transición hacia la protección laboral, ayudando a aquellas personas que no pueden reincorporarse al mercado laboral y se encuentran en una situación de vulnerabilidad.