El BCE acelera el proyecto del euro digital

El Banco Central Europeo se plantea realizar pruebas piloto del euro digital antes de realizar su lanzamiento masivo en algunas ciudades de Europa, aunque por el momento se desconoce la fecha en la que esto podría tener lugar.

La pandemia del coronavirus ha provocado que la digitalización de la economía se acelere, dejando al dinero en efectivo como el gran perdedor de este proceso. Ante esta situación, el Banco Central Europeo está dedicando más fondos para agilizar su proyecto del euro digital. No obstante, la institución reconoce que esta forma de dinero posiblemente tendrá una serie de consecuencias para la economía, por lo que es necesario realizar un minucioso estudio sobre el impacto que tendrá y realizar pruebas a pequeña escala.

Es importante tener claro qué es el euro digital, ya que no se trata de una nueva divisa, ni un criptoactivo, ni dedinero bancario. La mayoría de los consumidores no cree que haya diferencia cuando paga con euros en metálico o con tarjeta, sin embargo, esto no es así. Mientras que el dinero en efectivo forma parte de la base monetaria, el pago con tarjeta es dinero creado por los bancos comerciales. El euro digital en cambio, será como el efectivo, pero electrónico y digital.

Foto: Economist & Jurist

El lanzamiento del euro digital viene acompañado de consecuencias para la economía. Este proyecto seguro que nos hace la vida más fácil, pues nos ayudará a simplificar los pagos, a reducir los tiempos a la hora de liquidar operaciones, transmitirá de mejor manera la política monetaria y podrá mejorar la privacidad en los pagos digitales, entre otras cosas.

Sin embargo, el euro digital también tiene una serie de riesgos, que son los que impiden a los bancos centrales lanzar sus divisas digitales de forma inminente a pesar del avance imparable de la digitalización. El economista y miembro del Comité Ejecutivo del Banco Central Europeo, Fabio Panetta, ha dicho que “paradójicamente, un euro digital que tenga mucho éxito, si no se diseña adecuadamente, podría afectar a la estabilidad monetaria y financiera”.  A continuación, repasaremos los principales riesgos de esta nueva divisa para la economía que ha señalado Panetta recientemente en uno de sus últimos discursos.

Competencia para la banca. Para Panetta el lanzamiento del euro digital “podría atraer depósitos, especialmente si no se establecen límites y las condiciones son tan atractivas que el público transfiriera grandes cantidades de depósitos de los bancos comerciales a los bancos centrales. Esto podría conducir a una financiación menos estable y más costosa, una menor rentabilidad bancaria y, en última instancia, una reducción de los préstamos, lo que limitaría la financiación de la economía real”.

Pánicos bancarios digitales. En tiempos de crisis esta nueva divisa podría provocar que los agentes movieran sus depósitos en los bancos a euros digitales seguros, por ello es muy importante realizar un correcto diseño de esta moneda.

Amplificación de shocks internacionales. Esto dependerá de si los ciudadanos de fuera de la zona euro podrán tener acceso al euro digital o no y de si se podrá operar con ella fuera de la misma. Si finalmente el diseño lo permite, “podría tener implicaciones de gran alcance para el resto del mundo” asegura Panetta.

La seguridad. Una divisa digital implica una estructura tecnológica compleja que podría enfrentarse a ciberataques de manera constante. Por ello, los bancos centrales se verían en la obligación de trabajar con unos niveles de seguridad extremadamente elevados.

La propia privacidad. Panetta señala que “una de las características intrínsecas del efectivo es que ni el comprador ni el vendedor conoce su historia previa, es decir, es anónimo. Sin embargo, es muy difícil que el euro digitalalcance el grado de anonimato del efectivo. Algunos agentes, incluidos los gobiernos de países autoritarios, podrían aprovecharse de esta situación.”

Con el fin de reducir estos riesgos, el Banco Central Europeo se está planteando limitar la cantidad de euros digitales que pueden acumular los agentes, con el objetivo de evitar que se caiga en la tentación de transformar parte de los ahorros en euros digitales cuando se produzca un incremento de la percepción de riesgo sobre la economía y las finanzas. Aunque todavía no hay muchos detalles al respecto, Panetta indicó que se podría establecer un límite de 3.000 euros en su sistema, y ha dicho que “sería mucho más que las necesidades de efectivo de la mayoría de la gente de hoy en día.” Además, también se baraja la opción de la penalización de la tenencia de euros digitales a partir de cierto umbral, posiblemente a través de tipos negativos o comisiones.