El IPC se dispara 1,5 puntos y llega al 5,5%, el máximo en casi 30 años

Parece que no hay quien pare la escalada de los precios, que están alcanzado niveles cada vez más preocupantes. El Instituto Nacional de Estadística (INE), ha publicado hoy el Indicador Adelantado del Índice de Precios de Consumo (IPC) y el dato aportado es inquietante.

Según el INE, el IPC español se habría situado en el 5,5% en el mes de octubre, lo que supone, en caso de confirmarse, un incremento de 1,5 puntos con respecto a septiembre, cuando la inflación se colocó en el 4%. De este modo, el IPC alcanza el nivel más alto desde septiembre de 1992.

Dado que estos datos son una estimación, el INE no aporta detalles sobre la incidencia de cada partida en la estimación del IPC. Sin embargo, destaca que “en este comportamiento destacan las subidas de los precios de la electricidad y, en menor medida, los carburantes y lubricantes para vehículos personales y el gas«.

Por lo que respecta a la inflación subyacente, (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) aumenta cuatro décimas hasta el 1,4%, con lo que se sitúa más de cuatro puntos por debajo de la del IPC general. Esta es la diferencia más alta entre ambas tasas desde el comienzo de la serie, en agosto de 1986. El dato de la inflación subyacente es preocupante dado que sube cuatro décimas con respecto a septiembre.

Aun cuando el dato de inflación conocido hoy ha sido sorprendente, durante los últimos días se han conocido informes que indicaban que no se podían esperar buenas noticias sobre el incremento de precios.

Funcas ya había advertido de que la inflación podría alcanzar el 5% durante la parte final del año, si bien es verdad que esta previsión se centraba más en noviembre que en octubre.

Según COAG, algunos productos básicos de la cesta de la compra han subido más de un 15%. (Foto: Freepik)

Por otra parte, un informe de COAG (Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos) publicado este mes destacaba que, en el último año, algunos productos básicos de la cesta de la compra han subido más de un 15%.

De acuerdo con los datos de COAG, los tomates de ensalada se han encarecido un 16,9%, pasando en solo los últimos doce meses de 1,77 a 2,07 euros el kilo; las peras suben un 15,6%, hasta 2,59 euros; las manzanas un 15%, a 2,46 euros: el aceite de oliva un 6,1%, desde 3,88 a 4,12 euros el kilo y la carne de conejo, pollo y cerdo aumenta un 4,7%, un 3,5% y un 1,5% respectivamente. Detrás de estas subidas está el incremento de los costes de transporte por carretera provocados por el elevado precio del gasóleo.

El coste de la energía no es el único elemento a tener en cuenta. El encarecimiento de las materias primas y los problemas en la cadena de suministro están haciendo mucho daño a las economías del todo el mundo, y no solo por el impacto que están teniendo en la inflación. La energía y los problemas en las cadenas de suministro están provocando el cierre temporal de fábricas y están afectando al crecimiento de las principales economías, algunas de las cuales están revisando sus predicciones de crecimiento a la baja.

De momento, esta inflación puede hacer un roto importante en las cuentas del Estado, ya que el Gobierno debe compensar a los pensionistas por la desviación del IPC sobre lo previsto. Para hacernos una idea, según el Panel de la Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas), la revalorización de las pensiones para 2021 fue el 0,9%. Según sus previsiones de septiembre, 2,4%, habría que pagar a los jubilados una paga extra compensatoria, que se liquida en febrero y que podría suponer para las arcas públicas un gasto adicional de 2.100 millones de euros.