Las criptomonedas, cada vez más conectadas con otros mercados
Su volatilidad puede poner en peligro al resto de bolsas
La conexión entre Wall Street y el mercado cripto es cada vez mayor (Foto: Google)
Las criptomonedas, cada vez más conectadas con otros mercados
Su volatilidad puede poner en peligro al resto de bolsas
La conexión entre Wall Street y el mercado cripto es cada vez mayor (Foto: Google)
El mercado de criptomonedas es cada vez más importante y atrae cada vez a más inversores minoristas e institucionales. Inicialmente fueron vistas como una moda y como unos activos marginales. Sin embargo, su uso cada vez más extendido en todo el mundo, sobre todo en los mercados emergentes, así como la extrema volatilidad de los precios generan cada vez más preocupación sobre sus posibles implicaciones para la estabilidad financiera.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha publicado un informe, Conexiones crípticas: efectos secundarios entre criptomonedas y mercados de valores, en el que destaca que “las criptomonedas y los mercados de valores se han vuelto cada vez más interconectados en las economías a lo largo del tiempo”.
El contenido de este informe representa un giro de 180 grados con respecto a lo que han venido defendiendo los bancos centrales y otras instituciones, que por sistema han negado que el mercado de criptoactivos pudiera generar riesgos para la renta variable o los bonos por su escasa conexión y menor tamaño.
La cuestión es que, aunque el mercado de criptomonedas ahora está tocado después de más de un mes de caídas y su capitalización total ronda los dos billones de dólares, en noviembre de 2021 alcanzó los tres billones de dólares. Hay que tener en cuenta que en 2017 era de 620.000 millones, lo que muestra a las claras la importancia que han alcanzado las criptomonedas en el mundo financiero.
Entre los principales activos
El informe del FMI explica que el crecimiento del ecosistema de activos digitales ha sido impulsado por la innovación tecnológica, el auge de las finanzas descentralizadas y el aumento de las transacciones institucionales y minoristas. En septiembre de 2021, por ejemplo, bitcoin y ether se colocaron entre los 20 activos más negociados del mundo, compitiendo con la capitalización de mercado de algunas de las empresas más grandes del planeta.
En el caso de las monedas estables, tokens vinculados a una referencia de mercado, generalmente una divisa, han sido igualmente fundamentales para hacer crecer la capitalización de este mercado. La capitalización de mercado y el volumen de operaciones de las monedas estables también ha aumentado, con el número de operaciones de la más grande, tether, que duplica el del bitcoin varios meses durante 2021.
Según los técnicos que han realizado el informe, “los resultados sugieren que la interconexión entre los criptomercados y los mercados de valores ha aumentado notablemente entre 2017 y 2021”. “Por ejemplo”, aclaran, “en comparación con los años previos a la pandemia, la correlación entre la volatilidad de los precios de bitcoin y la del índice S&P 500 ha aumentado más de cuatro veces”.
Para los rendimientos, el patrón es similar, con un aumento significativo en la correlación entre los rendimientos de bitcoin y S&P 500, así como en los efectos secundarios de los rendimientos de bitcoin a los rendimientos de S&P 500. En cuanto a tether, la correlación entre la volatilidad de su precio y la de los índices de acciones globales también ha aumentado significativamente entre los períodos previo y posterior a la pandemia, aunque en menor medida que lo que ha ocurrido con el bitcoin.
Volatilidad en los mercados
A este respecto, el informe destaca que “los efectos indirectos de la volatilidad de tether y los rendimientos de los índices bursátiles globales también han aumentado, pero en menor medida, alrededor de 4 a 6 puntos porcentuales”. Con todo, “bitcoin y tether juntos explican entre el 19% y el 23% de la variación en la volatilidad de los principales índices bursátiles mundiales y entre el 12% y el 17% de la variación en sus rendimientos en el período posterior a la pandemia.
El FMI alerta de que esto supone un riesgo importante para los inversores y los mercados, puesto que la caída de grandes criptodivisas como bitcoin o ethereum pueden desencadenar un efecto dominó. «La mayor correlación entre las criptomonedas y las acciones aumenta la posibilidad de que contagie el sentimiento de los inversores entre esas clases de activos», subrayan.
A tenor del resultado del informe, el FMI tiene muy claro que “los reguladores y supervisores deben monitorear de cerca la acción en los criptomercados y la exposición de las instituciones financieras a estos activos, y diseñar políticas regulatorias apropiadas para mitigar los riesgos sistémicos que emanan de los efectos indirectos de los precios de las criptomonedas”.