¿Qué es un Exchange?

Un exchange de criptomonedas es un espacio, generalmente virtual, en el que se realizan la compra y venta de los activos digitales. Su objetivo es permitir que el usuario o trader pueda participar en el mercado de criptomonedas, en el cual puede obtener ganancias gracias a las variaciones del precio de los activos   que se dan en el mismo.

Gracias a la existencia de los exchanges ha sido posible fortalecer la vida económica y financiera de las criptomonedas. Estas plataformas hacen posible intercambiar con facilidad dinero por criptos o viceversa, desde cualquier parte del mundo o intercambiar unas criptomonedas por otras. Hay que destacar que las comisiones relativamente bajas en comparación con otros métodos de intercambios tradicionales.

El intercambio de criptomonedas y, dado que fue la primera, muy especialmente del bitcoin, es algo consustancial a la existencia de las mismas. En octubre de 2009, año en que apareció el bitcoin, Martti Malmi realiza el primer intercambio de bitcoins por dinero. Esta acción llevo a la creación del primer exchange de bitcoin, el conocido NewLibertyStandard. Poco más de un año tras su aparición, en marzo de 2010, se desarrolló Bitcoinmarket.

Martti Malmi, en la foto, realizó el primer intercambio de bitcoins por dinero. (Foto: Google)

Con el tiempo fueron apareciendo otros proyectos. En julio de 2010 nació Mt.Gox, que se convirtió en poco tiempo en el Exchange más grande del mundo. Sin embargo, a mediados de 2011 fue pirateado y sufrió un robo de 2.000 Bitcoins. Más tarde, en abril de 2012, Martti Malmi creó eurobtc.com, otro exchange de Bitcoin que permitía la compra-venta de bitcoin.

En 2014 Mt.Gox sufriría otro ataque con un alcance más nefasto, marcando para siempre la historia de los exchanges de criptomonedas. En ese momento serían robados 850.000 bitcoins por un valor de 460 millones de dólares. Este hecho llevaría paulatinamente a Mt.Gox a la bancarrota. Pese a estos problemas, los exchange de criptomonedas fueron creciendo en número y evolucionando en calidad, seguridad y servicios.

Hay cinco grandes tipos de exchanges. (Foto: E&J)

Cinco grandes grupos

Los exchanges pueden clasificarse en cinco grandes grupos, cada uno de ellos con características específicas y objetivos distintos. No obstante, todos comparten su vocación por facilitar la participación de sus usuarios en los mercados de criptomonedas. Para lograr este objetivo cuentan con herramientas de análisis técnico, una gran suite de indicadores e incluso ponen a disposición servicios de análisis fundamental. La idea última es ofrecer el mejor entorno para que el trader pueda hacer su trabajo y tomar las mejores decisiones en todo momento dentro del mercado.

El primer tipo de exchange es el tradicional. Esta categoría de exchanges incluye a las plataformas a la que los usuarios acceden para comprar o vender tokens según la cotización de los mercados. Tienen la ventaja de que son plataformas muy reguladas, lo que da más seguridad a los traders. En este sentido, cumplen con las normas de KYC (Conoce a tu cliente) y AML (Anti-Lavado de Dinero). El usuario debe dar a conocer su identidad para participar en la misma. Ejemplo de estas plataformas pueden ser Binance, Kraken, Coinbase o Bitfinex.

Por norma general, los exchanges tradicionales cobran por sus servicios y establecen ciertas limitaciones de capital para participar en su plataforma. Además, el cobro por deposito o transferencia dentro de la plataforma depende del medio usado para tales operaciones. sirven para mantener el funcionamiento y generación de ingresos de la plataforma. Otro punto adicional en los exchanges es la cantidad mínima necesaria para operar dentro de la plataforma, que varía según el exchange.

La razón de estos límites de operaciones es evitar que se opere con cantidades muy pequeñas de las cuales las partes no obtendrían ningún beneficio económico real.

El segundo tipo de plataforma de intercambio son los brókers de criptomonedas. Son espacios que permiten a los usuarios intercambiar rápidamente sus criptomonedas por otras de su preferencia. Están más centrados en ofrecer un intercambio que permita al usuario acceder una determinada criptomoneda. Debido a esto, están construidos de forma muy sencilla con el fin de facilitar su uso a los usuarios más noveles.

La tercera categoría es la de las plataformas OTC (Over the Counter). Estas plataformas ofrecen intercambios punto a punto entre compradores y vendedores. Esto garantiza una negociación directa entre las partes. Además, garantizan un alto nivel de privacidad y la capacidad de negociar un precio para los activos fuera del mercado.

Los fondos de criptomonedas son gestionados por profesionales. (Foto: Google)

El cuarto modelo de exchange es el fondo de criptomonedas. Los fondos son propuestas para la gestión de inversiones en criptomonedas cuya gestión depende de profesionales, que permiten comprar el acceso a las criptomonedas a través del fondo. La ventaja de estos fondos es que se puede comprar o vender criptomonedas con mucha facilidad, ya que el usuario no tiene la necesidad de almacenarlas o comprarlas exactamente. En realidad, la compra o venta es una simple negociación de una parte o share del portfolio de inversiones en criptomonedas de dicho fondo.

Sin embargo, presentan algunos problemas, como que carecen de privacidad y su gestión no está bajo el control del inversor, por lo que en caso de robo o mala gestión puede que las criptomonedas compradas se pierdan para siempre.

Por último, tenemos los exchanges de criptomonedas descentralizados. Los exchanges descentralizados o DEX son una evolución de los tradicionales. Funcionan de forma parecida a estos últimos, pero de manera descentralizada. Esto significa que no existen intermediarios y la plataforma se autosustenta por su programación. Además, los DEX suelen contar altos niveles de privacidad e incluso anonimato.