Baja el IRPF en Madrid y aumenta la brecha fiscal con otras Comunidades Autónomas
Baja el IRPF en Madrid y aumenta la brecha fiscal con otras Comunidades Autónomas
Durante su discurso de apertura del Debate del Estado de la Región, celebrado en el día de ayer en la Asamblea de Madrid, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha reafirmado su compromiso con “seguir bajando los impuestos en la Comunidad de Madrid, tal y como hemos hecho en los últimos 16 años”.
En tal sentido, aseguraba que durante esta Legislatura se llevará a cabo su promesa de realizar la mayor bajada del IRPF de la historia de la región -medio punto en todos los tramos-. Defendido una “fiscalidad justa” en lugar de “asfixiar hasta paralizar la iniciativa ciudadana”, la presidenta rebatía el argumento socialista “completamente falso” del supuesto abuso fiscal de Madrid frente a otras Comunidades Autónomas. Así, Díaz Ayuso ha explicado que su región es “la más solidaria con el resto de España al mismo tiempo que tiene los impuestos más bajos”.
Para probar esto último ofreció los datos de la liquidación definitiva del Sistema de Financiación Autonómica del año 2018, aportados oficialmente por el Ministerio de Hacienda, y que reflejan que Madrid aporta el 68% del Fondo de Garantía de los Servicios Públicos Esenciales. En concreto, “de los 84.000 millones de euros que se recaudan en Madrid por el IRPF, IVA y los impuestos especiales, solo 19.000, un 22%, se quedan para financiar la Comunidad de Madrid”, anunciaba la presidenta.
“Nuestra seña de identidad: impuestos Bajos y mejores servicios públicos”
Ya en su programa electoral para la Comunidad de Madrid, bajo el apartado “Nuestra seña de identidad: impuestos bajos y mejores servicios públicos”, Díaz Ayuso anunciaba su compromiso de ser “eficientes en el gasto, y por eso podemos bajar impuestos, para que dicho dinero se encuentre en el bolsillo de los ciudadanos, que son los que mejor pueden decidir qué hacer con él”. Así, orientaba su línea de trabajo: “bajando el déficit, buscando el superávit para amortizar deuda y aplicando políticas eficientes, basadas en impuestos bajos y reformas profundas”.
Tras ello, en su apartado 110 recogía su compromiso de “bajar la tarifa autonómica del IRPF para beneficiar a tres millones de madrileños e impulsar la economía y el empleo. Se reducirán todos los tramos de la tarifa en medio punto y los contribuyentes pagarán hasta un 5,5% menos”.
La brecha en comparación con otras Comunidades Autónomas
Según el Registro de Economistas Asesores Fiscales (REAF), órgano especializado en fiscalidad del Consejo General de Economistas de España, en el IRPF, las principales diferencias entre comunidades autónomas se producen por la regulación de las tarifas, estableciéndose multitud de deducciones, con coste recaudatorio limitado, para favorecer la natalidad, ayudar a contribuyentes que tienen que atender situaciones especiales de discapacidad, intentar paliar la despoblación rural o favorecer comportamientos positivos para el medioambiente, limitando estos beneficios a rentas medias-bajas.
Así, por ejemplo, si comparamos el tipo marginal máximo en IRPF en Madrid, 43,5% antes de la reforma prevista por Díaz Ayuso, frente al actual 48% de Extremadura, La Rioja, Valencia, Asturias o Cataluña, se evidencian 4,5 puntos de diferencia. De tal modo, en una hipotética renta de 100.000 euros, supondría una diferencia de 670 euros de cuota; mientras que, si la renta alcanza 1.000.000 de euros, la diferencia alcanzaría los 40.000 euros.
Actualmente, existen cinco tramos autonómicos que, según las bases imponibles, en la Comunidad de Madrid son del 9% (hasta 12.450 euros anuales), 11,20% (hasta 17.707 euros), 13,30% (hasta 33.007 euros), 17,9% (hasta 53.407 euros) y 21% (desde 60.000 euros). Por tanto, actualizando estos a la propuesta anunciada por Díaz Ayuso en el día de ayer y prometida en su programa electoral, los tramos en base quedarían en los siguientes porcentajes: 8,5 %, 10,7 %, 12,8 %, 17,4 % y 20,5 %.