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El fiscal Luis Ibáñez impugna en el Supremo la elección de Delgado como Fiscal de Memoria Democrática: “El procedimiento fue ilegal”

En su candidatura defendía la investigación de los crímenes de ETA pendientes de resolver 

Álvaro García, fiscal general, con Dolores Delgado. (Foto: RTVE)

Luisja Sánchez

Periodista jurídico




Tiempo de lectura: 5 min

Publicado




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El fiscal Luis Ibáñez impugna en el Supremo la elección de Delgado como Fiscal de Memoria Democrática: “El procedimiento fue ilegal”

En su candidatura defendía la investigación de los crímenes de ETA pendientes de resolver 

Álvaro García, fiscal general, con Dolores Delgado. (Foto: RTVE)



El fiscal antidroga de la Audiencia Nacional Luis Ibáñez impugnaba este miércoles ante la sala de lo contencioso del Tribunal Supremo el nombramiento por el fiscal general del Estado de Dolores Delgado como Fiscal de Sala Derechos Humanos y Memoria Democrática.

Esta iniciativa podría empujar a otras entidades como la Asociación de Fiscales (AF) y a la APIF, con representación en el Consejo Fiscal, muy criticas también con dicha elección, a presentar también recursos en los próximos días.



Ibañez mantiene una trayectoria consolidada como fiscal en los 35 años de ejercicio profesional. “Es una carrera con muchos alicientes a los profesionales que estamos en ella y quizás necesite despolitizarse, pero los fiscales realizamos muchas actuaciones, que no todas conoce la ciudadanía”, señala a Economist & Jurist.



Recuerda que llegó a la Audiencia Nacional en el año 2006, tras su paso por la Fiscalía de Madrid y desde entonces forma parte de la misma, salvo un periodo de cinco años en el que fue fiscal jefe provincial de Toledo.

Con posterioridad volvió a la jurisdicción antidroga, donde la cooperación internacional es fundamental para resolver muchos de estos asuntos que se juzgan en la Sala Penal de la Audiencia Nacional.



A su juicio “al Gobierno que salga de las urnas hay que pedirle que nos siga dotando de medios humanos y materiales para realizar nuestro trabajo de lucha contra el crimen organizado que supone el narcotráfico a gran escala. Hay que darse cuenta de que lo que reclamamos en comparación con los Presupuestos Generales de Estado son una minucia a nivel comparativo”.

Desde su punto de vista, actuaciones como la del nombramiento de Dolores Delgado ponen en tela de juicio la imparcialidad del Ministerio Fiscal y cree que de forma paulatina, de cara al ciudadano, pierde su reputación pese a que sean instituciones de prestigio en nuestro país.

Luis Ibáñez. (Foto: E&J)

La impugnación se ha hecho tras haber aparecido el Real Decreto de nombramiento de Delgado en el BOE el miércoles pasado “siempre tuve claro la necesidad de interponer ese recurso, en el que he estado asesorado por abogados expertos en la materia. Hay que conocer bien el contencioso administrativo para poder presentar dicho recurso, que ya fue admitido a trámite”.

En este procedimiento contencioso administrativo, lo que se hace es interponer el recurso sin argumentación “es un escrito corto que se ha admitido a trámite y ahora el Supremo reclamará los expedientes de ese nombramiento y será en ese momento cuando presentemos el escrito final argumentando nuestra tesis de las irregularidades de dicho nombramiento”.

Un procedimiento irregular

Este fiscal es consciente de que los tiempos en la justicia son muy lentos. De hecho, recuerda cómo el nombramiento de Delgado como Fiscal de lo Militar también se impugno “ha pasado algo más de un año y no sabemos cuál es el veredicto de la Sala sobre dicho nombramiento”.

Para este jurista, esta elección de Dolores Delgado está soportada en una serie de irregularidades encadenadas, “el procedimiento seguido es ilegal por una serie de cuestiones formales y de fondo que lo hacen impugnable”.

Ibáñez recuerda que “estamos ante nombramientos discrecionales, pero eso no quita para que se haga un concurso perfectamente reglado. Es cierto que cuando se nombran a los ministros cualquier presidente del Gobierno que lo haga no tiene que dar cuenta a nadie, en este caso hablamos de un concurso en la carrera donde se establecen los méritos de cada uno y un procedimiento”.

Al mismo tiempo, recuerda que también hay que considerar los informes preceptivos del Consejo Fiscal, que en este caso siete de sus once miembros advirtieron del problema con la candidatura de Delgado, lo que hizo que no participaran en la decisión final como protesta ante dicha decisión”.

Para Ibañez, la propuesta de nombramiento de Delgado como Fiscal de Memoria Democrática incumple lo estipulado por el Estatuto del Ministerio Fiscal, al no contar con el informe del Consejo Fisca “porque al final no emitieron su informe”.

Fiscalía General del Estado (Foto: Archivo)

De hecho, en el pleno del Consejo Fiscal del pasado 8 de junio siete de los 12 miembros que integran este máximo órgano de representación de la Carrera Fiscal instaron a García Ortiz a la suspensión de la reunión por estimar que, una vez disueltas las Cortes Generales y convocadas las elecciones generales, «razones de ética, estética y respeto institucional impedían llevar a cabo nombramientos discrecionales». “Pero no lo hizo”.

Tampoco tuvo en cuenta la cuestión previa que planteo la Asociación de Fiscales en el inicio del Consejo Fiscal de excluir ese nombramiento porque previsiblemente Dolores Delgado podría incurrir en incompatibilidad según el Estatuto del Ministerio Fiscal por su relación con el exjuez Baltasar Garzón, que dirige una fundación dedicada a los Derechos Humanos.

Una propuesta innovadora la de Ibáñez

Otra de las cuestiones que tampoco entiende este fiscal es “la urgencia del nombramiento y el situar a Dolores Delgado en esa plaza de Fiscal de Memoria Democrática en vísperas del adelanto electoral. Creo que no existía urgencia alguna de cubrir esta plaza en estos momentos”.

Por el momento, ha sido Ibáñez, de los candidatos a esta plaza, junto a Delgado y a Juan Calparsoro, teniente fiscal provincial de Guipúzcoa y Carlos Castresana, fiscal del Tribunal de Cuentas, el único que ha impugnado dicho acuerdo “por el momento no hemos hablado entre nosotros de este tema”.

La propuesta que planteaba Luis Ibáñez para asumir las competencias de este puesto de nueva creación Fiscal de Memoria Democrática “creo que era bastante innovadora y apropiada a esta norma. Es cierto que esa nueva ley es ambigua y tiene unos pasajes poco claros, pero quizás lo que la sociedad pide en estos momentos es la investigación de los crímenes de ETA aun sin resolver”.

Este fiscal reconoce que “es cierto que a nivel procesal hay poca viabilidad para lograrlo, pero el propio Parlamento Europeo señalaba recientemente en un pronunciamiento que hay que reconocerlos como crímenes de lesa humanidad con lo cual es aconsejable aplicar la llamada jurisdicción de la memoria, de la verdad y de la paz. Por eso decidí centrar mi propuesta en este asunto en concreto en el caso que asumiera dicha Fiscalía de Memoria Democrática”.

Sin embargo, la candidatura que se ha impuesto ha sido la de Delgado. «La plaza estaba adjudicada. Sorpresa ninguna, porque tenía nombre», explica el fiscal a este medio, ahora confía que el Tribunal Supremo anule el nombramiento, aunque los tiempos de la Sala Contenciosa, mermada de efectivos, son ahora muy elevados.

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