El ICAM protegerá los dispositivos electrónicos de los abogados de empresa en posibles de registros o inspecciones externas
Gracias a un artículo del nuevo Estatuto de la Abogacía, el Colegio de Madrid llevará a cabo iniciativa para apoyar a un colectivo que supone cerca del 20% del censo colegial
Isabel Winkels, vicedecana del ICAM, ha anunciado las medidas que implementará el Colegio de Madrid para amparar el trabajo de la abogacía de empresa. (Imagen: ICAM)
El ICAM protegerá los dispositivos electrónicos de los abogados de empresa en posibles de registros o inspecciones externas
Gracias a un artículo del nuevo Estatuto de la Abogacía, el Colegio de Madrid llevará a cabo iniciativa para apoyar a un colectivo que supone cerca del 20% del censo colegial
Isabel Winkels, vicedecana del ICAM, ha anunciado las medidas que implementará el Colegio de Madrid para amparar el trabajo de la abogacía de empresa. (Imagen: ICAM)
El Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM) velará por el secreto profesional y amparará los dispositivos electrónicos de trabajo de los abogados de empresa para garantizar la confidencialidad de los datos manejados en el ejercicio de sus funciones. Este colectivo supone el 20% del total de colegiados en el ICAM y del 31% en los no ejercientes, según indican.
Una modificación del actual Estatuto de la Abogacía, y la modificación del artículo 39, reconoce el secreto profesional de los abogados de empresa colegiados, la mayor parte de ellos colegiados, para pedir amparo colegial a su entidad en el caso de este tipo de situaciones que conlleven riesgo a su actividad.
Así lo ha anunciado este jueves la vicedecana del ICAM, Isabel Winkels, durante la inauguración del ‘I Encuentro de la Abogacía de Empresa’, organizado conjuntamente por los Colegios de la Abogacía de Madrid y Barcelona, y que ha tenido lugar en la sede corporativa del Santander. El evento ha registrado una notable afluencia de abogados in house y de destacados bufetes de abogados.
La medida adelantada por Winkels —en ausencia del decano Eugenio Ribón, quien se encuentra de viaje de trabajo en Perú— forma parte del ‘Proyecto Abogacía de Empresa’, una iniciativa del ICAM para potenciar la colegiación de los juristas que desempeñan su actividad profesional en el ámbito empresarial, un colectivo que actualmente representa casi un 20% de la abogacía madrileña.
Con el objetivo de garantizar la confidencialidad y protección de los datos manejados por los abogados y abogadas de empresa en sus dispositivos electrónicos de trabajo, el ICAM ofrece un servicio de «amparo de dispositivos», que permite registrar hasta 10 dispositivos utilizados en el ejercicio profesional, como ordenadores, móviles, o tablets.
“La abogacía de empresa es un pilar esencial de la profesión y su independencia, que es clave para garantizar la seguridad jurídica dentro del entorno empresarial, no debe ser puesta en cuestión. Estas iniciativas pretenden proteger el secreto profesional y las comunicaciones de los abogados de empresas colegiados”, ha afirmado Ana Buitrago, diputada responsable de Abogacía de Empresa del ICAM y quien lidera el proyecto.
“Cada dispositivo registrado recibe una etiqueta identificativa emitida por el ICAM, la cual acredita que está sujeto a la protección de la confidencialidad y secreto profesional de acuerdo con la normativa aplicable. Al mismo tiempo, habrá una línea de comunicación que se habilite realizar cualquier consulta o pedir apoyo en estos temas al propio ICAM”, ha señala Buitrago.
Este sistema, pensado para apoyar a los juristas que manejan información sensible de sus clientes, permite además una mejor organización y control de los dispositivos, lo que refuerza la seguridad corporativa y profesional. Al mismo tiempo los profesionales de la abogacía de empresa que se colegien en el ICAM también tendrán a su disposición programas de formación personalizados, adaptados a sus necesidades específicas.
En el nuevo catálogo formativo especializado destaca una edición especial del máster de acceso a la abogacía, adaptada para el colectivo de la abogacía de empresa. Este programa, que habitualmente tiene una duración de 18 meses, se podrá completar en solo 12 meses, permitiendo una rápida y efectiva colegiación sin comprometer la calidad de la formación.
Abogados de empresa son claves
“La abogacía de empresa ha recorrido un largo camino para consolidarse como uno de los grandes referentes de nuestra profesión. No sois solo abogados al servicio de las empresas; sois líderes estratégicos que, con vuestro trabajo, transformáis el entorno económico y social”, ha subrayado el decano de Madrid en un video grabado para la ocasión en la apertura de la primera jornada, celebrada en el Auditorio Luca de Tena del Banco Santander.
Esta jornada ha servido para rendir merecido homenaje a l que fuera prominente abogada interna de la entidad financiera y copresidenta de la sección de Abogacía de Empresa del ICAM, Lola Conde, fallecida hace un año.
Javier Ramírez es vicepresidente y secretario general asociado de HP Inc., responsable del área de Litigación de la compañía a nivel mundial, excepto EE.UU., desde 2011 y del área de Asuntos Regulatorios en EMEA (Europa, Oriente Medio y África) desde 2010. Es miembro de ACC Europe, mayor asociación de abogados de empresa donde ha sido miembro de su Consejo de administración.
Ramírez habló este lunes de la problemática de la mesa del secreto profesional con otros expertos. Desde su punto de vista “esta medida de la tutorización de los dispositivos móviles van en la dirección de proteger el trabajo que hacemos los abogados de empresa o general counsels. Es importante definir los dispositivos del abogado in house para su práctica profesional, de forma que sea identificado se puede poner en marcha el procedimiento que ha presentado el ICAM”.
“Esta medida está basada en aquel Estatuto de la Abogacía del 2021, donde su artículo 24 permite específicamente que en el caso de inspecciones domiciliarias, tanto de abogados como de abogados de empresas se puede pedir el amparo colegial para garantizar que se pueda proteger el secreto profesional en esa inspección domiciliaria”, señaló el ponente.
Para este jurista “el secreto profesional nos preocupa, pero también vemos como está creciendo el desarrollo de mujeres abogadas en puestos directivo en empresa. Ya hay más directivas mujeres que hombres en las asesorías de empresas. Otro tema clave es que se consolide una línea de diálogo abierta entre esa área jurídica y la dirección de la empresa. Según el último estudio de ACC que hemos presentado, un 85% de abogados de empresa tienen reporte directo con el CEO de la compañía”.
Para José Regojo, abogado y secretario del Consejo de Administracion de Estrella Galicia, desde hace un año, tras tres décadas como socio de Garrigues donde fue responsable de la oficina de A Coruña más de 15 años, “es interesante la propuesta del ICAM de amparar las comunicaciones y los dispositivos móviles de los abogados de empresa. Habrá que ver cuál es la operativa al final aunque muchas empresas tienen sus datos en la nube porque se piensa que los datos están mejor protegidos”.
En su opinión, junto con el secreto profesional “hay otras cuestiones que nos preocupan, sobre todo que nuestros equipos jurídicos den el mejor servicio a nuestro negocio. Nosotros conocemos bien los negocios de nuestra empresa y procuramos aportar valor desde el principio. Otra cuestión que estamos implementando son las operaciones legales para gestionar mejor nuestro trabajo y poder medir nuestra aportación al negocio de la compañía”.
Cobertura de responsabilidad civil
Esas herramientas, que incluyen coberturas exclusivas de responsabilidad civil o amparo colegial ante actuaciones judiciales y administrativas que amenacen su independencia o el secreto profesional, forman parte del Proyecto Abogacía de Empresa, con el que el ICAM busca proteger y fortalecer la independencia de estos profesionales.
La propuesta de valor del ICAM ofrece a los profesionales de las asesorías jurídicas de empresa una cobertura de responsabilidad civil de hasta 330.000 euros para hacer frente a los riesgos inherentes al ejercicio de su función jurídica en defensa de los intereses de la empresa, tanto en asuntos judiciales como extrajudiciales. Esta medida busca reforzar la independencia de los abogados al defender los intereses de su cliente corporativo.
Por otro lado se crea el Sello de Abogacía de Empresa es un distintivo exclusivo para los abogados y abogadas colegiados del ICAM que ejerzan por cuenta ajena dentro del departamento de asesoría jurídica de una empresa.
El propósito es reforzar la identidad profesional del abogado dentro de la empresa, permitiéndole acreditar su colegiación en todas sus comunicaciones, presentaciones y actuaciones en nombre de su empleador. Esto les otorga un estatus diferenciado frente a otros profesionales del ámbito empresarial que puedan estar realizando funciones jurídicas sin estar colegiados como abogados ejercientes.
Asimismo, refuerzan el pleno sometimiento de los abogados in house a los requisitos normativos y deontológicos que se aplican a toda la abogacía colegiada, sin distinción en función de si ejercen su actividad por cuenta propia o ajena.
Amparo colegial
Los abogados y abogados de empresa colegiados como ejercientes en el ICAM podrán además solicitar el amparo colegial frente a actuaciones de organismos públicos o autoridades que puedan poner en riesgo su independencia o secreto profesional.
Este apoyo puede resultar crucial en situaciones en las que las autoridades interfieran de forma indebida en las comunicaciones abogado-cliente protegidas por el secreto profesional, situando con ello a la abogacía in house al mismo nivel de garantías del que goza la profesión en las economías más avanzadas como son Estados Unidos y Reino Unido.
Además, esta medida asegura la presencia de un representante del ICAM en situaciones críticas como la práctica de entradas y registros en la empresa, con el objetivo de garantizar que se respete el secreto profesional del abogado in house y se proteja la confidencialidad de la información de la empresa.
Como parte de este nuevo programa, el ICAM ha desarrollado una plataforma digital ágil y accesible para que los abogados de empresa puedan registrarse fácilmente a través del ‘Área Reservada’ de la web colegial. El proceso de alta requiere la introducción de los datos básicos de la empresa y la presentación de un documento acreditativo que certifique la relación laboral del abogado con la compañía.
Una vez completado y validado el registro, los abogados inscritos podrán descargar su ‘Sello de Abogacía de Empresa’ y acceder a los servicios colegiales. Esta plataforma también permite la gestión de dispositivos a través del servicio de amparo, facilitando una experiencia integrada y eficiente.
Para dar a conocer el proyecto, el ICAM ha seleccionado 47 grandes empresas como objetivo prioritario en su plan estratégico de difusión. Los profesionales que prestan servicios jurídicos en estas empresas serán los primeros en recibir la visita de una delegación colegial de alto nivel que se encargará de explicar de primera mano los beneficios de la colegiación de sus abogados internos como ejercientes.
‘I Encuentro de Abogacía de Empresa’
Tras el acto inaugural, en el que también han participado la vicedecana del ICAM, Isabel Winkels, la diputada Ana Buitrago, y el secretario general y del Consejo del Banco Santander, Jaime Pérez Renovales, la primera sesión del encuentro ha puesto el foco en la protección del secreto profesional de los profesionales de la abogacía que ejercen en el ámbito corporativo.
Se contó con las intervenciones de José Ramón Couso, diputado segundo de la Junta de Gobierno de ICAM, y Javier Ramírez, vicepresidente y secretario general asociado de HP, moderados por Elia Esteban, copresidenta de la Sección de Abogacía de Empresa del ICAM.
A continuación, la CEO de Delaviuda Confectionery Group, Isabel Sánchez, departirá con Ana Buitrago sobre el paso de los abogados de empresa al cargo de CEO y sus implicación en el núcleo estratégico de las corporaciones, mientras el socio presidente de Uría Menéndez, Jesús Remón, analizará junto a otros especialistas la importancia de los métodos alternativos de resolución de conflictos para gestionar disputas de manera efectiva.
El papel de la abogacía de empresa en la definición de la estrategia corporativa, y cómo combinar el bienestar emocional y el alto rendimiento ha sido otro de los otros temas abordados en esta primera jornada, que culminará con un cóctel en el patio del ICAM.