La presunta trama de espionaje en ‘Sálvame’ hace temblar los cimientos de Tele 5
El programa, uno de los buques insignia de la cadena, está siendo investigado por delito de descubrimiento y revelación de secretos
Sede de Tele 5 (Foto: LNE)
La presunta trama de espionaje en ‘Sálvame’ hace temblar los cimientos de Tele 5
El programa, uno de los buques insignia de la cadena, está siendo investigado por delito de descubrimiento y revelación de secretos
Sede de Tele 5 (Foto: LNE)
Las alarmas saltaron hace cuatro años. La policía se percató de que en Sálvame, programa del corazón de Tele 5 que ha sido el buque insignia de la cadena en cuanto a audiencia, se manejaba información reservada de algunos personajes públicos. Esto llevó a que se iniciara una investigación, bautizada como Operación Deluxe, que dio como resultado la constatación de que habían sido realizadas consultas sobre muchos famosos en las bases de datos de acceso restringido de la Dirección General de Policía.
A partir de ahí la policía empezó a tirar del hilo y ha descubierto una presunta trama de espionaje en la que estarían involucradas varias personas relevantes de Sálvame. Desde el programa se habría investigado ilegalmente a al menos 140 famosos.
Según el sumario de la investigación, al que ha tenido acceso el diario El Mundo, entre las personas investigadas están el periodista del programa Gustavo González, Ángel Jesús Fernández Hita, policía que facilitaba a éste la información, siete personas más del equipo de Sálvame cuya identidad no ha trascendido de momento, y La Fábrica de la Tele, productora del programa, como persona jurídica. A todos se les acusa de los delitos de descubrimiento y revelación de secretos.
A tenor del contenido del sumario, en la investigación iniciada por la policía se halló información delicada de varias personalidades. La operación concluyó con detenciones y registros domiciliarios que incluían la casa del periodista Gustavo González, de quien se tenían indicios de que guardaba en su casa documentos que le facilitaba el policía implicado en la trama a petición del propio reportero y de la dirección del programa. Asimismo, se hallaron pruebas de que también había información reservada en la redacción de Sálvame.
Información sobre menores
“Se puede afirmar que es la dirección de Sálvame la propulsora de la búsqueda y obtención de la información íntima reservada”, indica el sumario que ha difundido El Mundo. De él también se desprende que muchas de esas informaciones filtradas “afectan a menores de edad y versan sobre denuncias de violencia de género y lesiones”.
La presunta trama pedía información al policía sobre determinadas personas cuando éstas estaban de actualidad por algún motivo. El agente buscaba en las bases de datos policiales información denuncias, detenciones con su reseña, datos de identidad y domicilios, etc. Entre los documentos decomisados por la policía incluso aparecen informes médicos de algunos personajes, si bien los mismos no habrían sido obtenidos a través del policía.
La información que ha trascendido hasta ahora muestra que, de momento, no hay evidencias de que las informaciones conseguidas por Sálvame hayan sido utilizadas para extorsionar a famosos. Sin embargo, sí se habría producido cierto mercadeo con las mismas. El programa advertía a personas de las que tenía información. Esta información no veía la luz a cambio de que la persona afectada concediera a Sálvame entrevistas o exclusivas. Tampoco existe constancia de que Ángel Jesús Fernández Hita recibiera remuneración alguna por presuntamente filtrar datos policiales al programa.
Personas espiadas
Entre las personas que habrían sido investigadas por esta trama estarían el torero Julio Aparicio, la cantante Isabel Pantoja, José Ortega Cano, su hijo José Fernando y su sobrino Óscar Romero, Di Stéfano, Alex Casademunt, Kiko Rivera o el cantante Omar Montes. El grupo VI de la Unidad de Asuntos Internos, que está llevando a cabo esta investigación, va a continuar informando en las próximas semanas a otros famosos espiados que podrían sumarse a la acusación particular.
Llama la atención, sin embargo, que en esta lista hayan aparecido nombres como los de Belén Esteban, Gema Serrano o Kiko Matamoros, todos ellos colaboradores habituales del programa desde hace años.
La Fábrica de la Tele hizo público el pasado un comunicado en el que reconocía que existe un procedimiento judicial aún en fase preliminar en el que se investiga un presunto espionaje a famosos. En la nota recalcaban que “La Fábrica de la Tele y las personas que la integran han actuado siempre en el marco de la ley dentro de su actividad periodística y en el legítimo ejercicio del derecho a la información, por lo que son absolutamente falsas las atribuciones de actividad de espionaje». «El procedimiento judicial al que aluden las informaciones publicadas hoy se encuentra aún en fase preliminar. Lo que se investiga es la naturaleza del vínculo que mantenía un periodista de larga trayectoria con una de sus fuentes, un agente de policía», añade el texto de la productora.
Por lo que se refiere a Sálvame, aclara que «el procedimiento judicial investiga la procedencia de las informaciones sobre una veintena de personas protagonistas de la crónica social. Ningún director o redactor del programa ha tenido nunca relación» con el supuesto amigo de Gustavo González que está siendo investigado.
La pasada semana, el público habitual del programa asistía atónito cómo se anunciaba la marcha de David Valldeperas y Alberto Díaz, los dos directores de Sálvame, así como de Carlota Corredera, una de sus presentadoras. En ese momento estos cambios fueron achacados al importante descenso de audiencia que sufre el programa desde el año pasado. Finalmente parece que, al menos en lo que se refiere a los directores, éstos habrían sido despedidos en relación con la Operación Deluxe.
En el peor momento
Este escándalo llega en el peor momento tanto para Sálvame como para Tele 5. Los índices de audiencia de la cadena en general y del programa en particular están en caída libre y de momento sus responsables no han dado con la tecla que ayude a reflotar el barco. Los programas estrenados últimamente no han atraído a la audiencia y alguna de las fórmulas más exitosas, como Gran Hermano, son casi tabú después del escándalo de abusos sexuales a los que fue objeto una concursante del reality.
Además, todo esto pilla a Mediaset España, propietaria de Tele 5, en un importante proceso de cambios en su accionariado. El grupo audiovisual italiano Media For Europe (MFE) –la antigua Mediaset, controlada por la familia de Silvio Berlusconi– lanzó el pasado 15 de marzo una OPA por su filial Mediaset España. La oferta, según el pliego publicado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), se dirige a la totalidad de las acciones que componen el capital social de Mediaset España, de la que la matriz italiana posee el 55,69% de las participaciones.
MFE quiere hacerse con el 44,31% del capital que no controla y por el que ofrece 1,86 euros por acción en efectivo y 4,5 euros en acciones ordinarias de la sociedad adquiriente. En total, teniendo en cuenta ambos componentes de la oferta, la operación está valorada en 258 millones. En 2019, el grupo intentó la fusión entre Mediaset Italia y España para crear un gigante capaz de competir con plataformas como Netflix. Pero las disputas judiciales de los italianos con el socio francés Vivendi paralizaron la operación.