Tres personas a prisión por envenenar masivamente a aves en Navarra
Tres personas a prisión por envenenar masivamente a aves en Navarra
El titular del Juzgado de lo Penal 2 de Pamplona ha condenado a penas de dos años y ocho meses de prisión a los presidentes de dos cotos de caza en Tudela y Cintruénigo y al guarda de uno de estos cotos por haber causado en la Ribera el mayor envenenamiento de aves rapaces en España entre abril y julio de 2012. El fallo es recurrible, pero la pena impuesta supondría el ingreso en prisión de los acusados. En los cotos de Montes de Cierzo y Monte Alto de Tudela aparecieron un total de 117 aves rapaces y 4 cuervos muertos por veneno, que fueron recogidos por guardas forestales de la capital ribera. Las rapaces eran, en concreto, 108 milanos negros, 4 milanos reales, 2 buitres leonados, 1 alimoche, 1 aguilucho lagunero y 1 busardo ratonero. Varias de las aves aparecieron en espacios naturales protegidos, concretamente las Reservas Naturales de Pulguera y Balsa de Agua Salada.
El juez ha condenado a Manuel P.G., que en 2012 era presidente de la asociación local de cazadores y pescadores deportivos de Tudela Montes de Cierzo, puesto para el que fue designado en 2008;Juan S.M., que durante una década y hasta 2012 era guarda de caza en el indicado coto, a sueldo de la asociación que preside Manuel P.G.;y Ángel G.J., presidente de la sociedad de cazadores de Cintruénigo. Las dos sociedades indicadas eran, junto con la sociedad de cazadores de Fitero, titulares del aprovechamiento cinegético en el coto de caza Monte Alto de Tudela, donde las labores de coordinación eran llevadas a cabo por el tercer condenado, Ángel G.J. Además, se les condena a 5 años y 4 meses de inhabilitación especial para “la gestión del aprovechamiento cinegético de cotos de caza, para el oficio de guarda de caza y para el ejercicio del derecho a cazar”. Deberán además indemnizar de forma conjunta y solidaria a la Comunidad Foral de Navarra en la cantidad de 67.538,65 euros. Todas las rapaces envenenadas están incluidas en el Real Decreto 139/2011, de 4 de febrero, para el desarrollo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y del Catálogo Español de Especies Amenazadas. En concreto, el milano real está catalogado como especie en peligro de extinción;el alimoche, como especie vulnerable;y el milano negro, el buitre leonado, el aguilucho lagunero y el busardo ratonero, como especies en régimen de protección especial. La causa de la muerte fue en todos los casos, salvo el de un milano negro que murió por un insecto, el envenenamiento con las sustancias fentión y demetón-S-metil, ambas del tipo de los organofosforados y prohibidas desde hace años en España.
VENENOS DE ACCIÓN RÁPIDASe trata de venenos de acción neurotóxica muy rápida, que provocan la muerte en un lapso de 10 a 30 minutos, y de degradación igualmente rápida. Dichas sustancias fueron colocadas en acciones repetidas durante al menos los meses de abril, mayo y junio, principalmente en el dormidero de milanos sito en el pinar del Culebrete, en el coto Montes de Cierzo. La colocación fue llevada a cabo por, cuando menos, el acusado Juan S., actuando bajo las órdenes y supervisión de, cuando menos, los también acusados Manuel P. y Ángel G. Ello con el objetivo de eliminar depredadores de especies susceptibles de caza en los cotos (perdiz y liebre).
El número de aves encontradas muertas, sobre todo en el caso de los milanos negros, supone una repercusión ambiental muy considerable en la población del sur de Navarra, teniendo en cuenta que:
– Probablemente murieron más ejemplares de los localizados, al existir numerosos factores que dificultan el hallazgo de cadáveres, como la cobertura vegetal que puede ocultarlos, la rápida detección y consumo por animales carroñeros y la dispersión a zonas lejanas antes de la muerte.
– Las fechas en las que sucedieron los envenenamientos coincidían con el periodo de reproducción del milano negro y del alimoche, por lo que la muerte de algunos de los animales ha supuesto también la de los pollos que estuvieran criando, o la no eclosión de los huevos.
– Tras los procesos de envenenamiento el ecosistema se empobrece en grandes predadores, como las rapaces, las cuales, debido a sus parámetros demográficos y a su papel en las cadenas tróficas, tienen poca capacidad de recuperación tras soportar perturbaciones;en cambio, las poblaciones de predadores oportunistas se recuperan en breve tiempo, incluso hasta densidades mayores a las existentes antes de la aparición del veneno, debido al “efecto llamada” de una zona libre de competencia y al aumento de las especies presa. El ecosistema en su conjunto tiende con ello a empobrecerse;solo una evolución lenta devuelve al cabo de años la situación al grado ecológico de complejidad y riqueza primitivo.
Las necropsias realizadas a 29 de los animales envenenados en el Centro de Recuperación de la Fauna Silvestre de Ilundain tuvieron un coste de 2.626,68 €. Los análisis de muestras de seis de las aves para concretar el tóxico usado costaron 1.335 €. Las medidas necesarias para restaurar el equilibrio ecológico perturbado as-cienden a un coste de unos 6.000 €.