La abogacía habla: ¿qué es lo más gratificante y desagradable de la profesión?
Abogados jóvenes y seniors de cuatro importantes despachos desgranan su visión sobre pros y contras de la profesión
(Foto: E&J)
La abogacía habla: ¿qué es lo más gratificante y desagradable de la profesión?
Abogados jóvenes y seniors de cuatro importantes despachos desgranan su visión sobre pros y contras de la profesión
(Foto: E&J)
La Abogacía es una profesión que puede ofrecer muchas compensaciones desde el punto de vista profesional. Sin embargo, al igual que en otros trabajos, en la Abogacía no todo es bueno. Puede llegar a ser una profesión en la que haya que hacer frente a situaciones desagradables. Teniendo esto en cuenta, cabe preguntar, ¿qué es lo más gratificante y lo más desagradable de la profesión?
Entre los abogados más jóvenes, el hecho de recibir el reconocimiento de los clientes y el saber que les han podido ayudar son elementos muy positivos de su trabajo. Por contra, destacan como elementos desagradables de la profesión no lograr que las pretensiones de los clientes se cumplan, las faltas de respeto ocasionales o el alto nivel de exigencia.
José García Portillo, abogado junior fiscalista de Ceca Magán Abogados destaca que “lo más gratificante de dedicarse a la Abogacía es sentir por parte del cliente la confianza en tu criterio a la hora de tomar una decisión” y que “el cliente te transmita el agradecimiento o satisfacción con el trabajo realizado, especialmente cuando se logra obtener el resultado pretendido”. Por el contrario, destaca que lo más desagradable del ejercicio de la Abogacía es “la frustración que se siente cuando ves desestimada una pretensión a pesar tener el firme convencimiento de que la postura defendida es completamente ajustada a derecho”.
Por su parte, Giuseppe Esposito, abogado laboralista en Fieldfisher, señala que “que hay muchas cosas gratificantes en nuestra profesión”, si bien destaca las situaciones en las que “después de todo el empeño dedicado a un asunto, el cliente reconozca el esfuerzo realizado en defender lo mejor posible sus intereses, como si fueran los tuyos personales”. En el otro lado de la balanza, pone como aspecto negativo “cuando te topas con un compañero de profesión que no te trata con respeto”. Esposito da una gran importancia a la cuestión del respeto ya que, a su juicio, “este es uno de los pilares de nuestra profesión y lo considero esencial para una correcta conservación de la misma”.
En el caso de Jiayi Liu, abogada de RSM, “lo más gratificante es poder ayudar al cliente a conseguir el objetivo propuesto en un proyecto de este cliente y que, además, el cliente esté contento con el trabajo que has realizado con tus compañeros”. En el lado negativo, afirma que “lo más desagradable de esta profesión es explicar a los clientes que, en algunos casos, no siempre las cosas son como ellos desean. Y esto puede crear una situación de conflicto con el cliente que puede ser incómoda».
Manuel Paz, socio de International Tax and Transactions Services de EY Abogados, pone el foco en el hecho de que la Abogacía “es una profesión muy estimulante y dinámica, en donde se aprende todos los días, y muy colaborativa, en contacto continuo con una variedad muy amplia de interlocutores”. “El reverso de la moneda” apunta, “probablemente sea el alto nivel de exigencia, compromiso y responsabilidad que impone la profesión, particularmente en un área tan técnica y cambiante como la tributaria, que obliga a una actualización profunda y constante, con el esfuerzo personal que eso conlleva, que no debe despreciarse”.
La opinión de los seniors
Los abogados y abogadas más veteranos coinciden con los jóvenes a la hora de valorar como uno de los elementos más gratificantes de la profesión prestar ayuda a los clientes. En el lado negativo, precisamente hay coincidencia a la hora de destacar no haber podido cumplir con las expectativas de las personas que han acudido a pedirles ayuda.
Juan Antonio Linares, socio del área laboral de Ceca Magán Abogados pone como el elemento más gratificante de la profesión “ayudar a los clientes. Defender los casos en los que tu cliente está sufriendo una injusticia y revertirla”. Relacionado con esta afirmación, expone como un elemento desagradable del oficio las decisiones judiciales infundadas o arbitrarias. “no me refiero a las resoluciones judiciales que son adversas al cliente, sino aquellas sentencias o decisiones de los jueces que no se han esforzado en entender el problema que se les plantea y las necesidades de los que acuden al tribunal a pedir justicia”.
Mercedes Caral, socia en gestión de conflictos en Fieldfisher, defiende que lo más gratificante de la profesión “es superar los retos que la misma te depara”. Asimismo, cita como elementos de la Abogacía que dan satisfacción “ayudar a desarrollar los nuevos proyectos y negocios de los clientes, así como a solucionar sus problemas e inquietudes” y “el agradecimiento de los clientes y el buen trato con los profesionales que intervienen en los diferentes asuntos”. En el lado negativo, señala que “lo más desagradable es perder un caso y el estrés que te produce la exigencia del propio trabajo, de los clientes y de los plazos”.
“Responder a las necesidades y expectativas de los que han acudido a nuestro consejo y comprobar que para ellos ha sido una decisión acertada” es, a juicio de Santiago Gastón de Iriarte, socio de RSM, lo más gratificante de la profesión. Afirma que “cuando un cliente nos confía sus problemas pasan a ser nuestros problemas y él debería quedar descargado, todo lo cual es muy gratificante”. A la hora de destacar un elemento negativo, afirma que “no es agradable desempeñar nuestro cometido en circunstancias sociales adversas”. Destaca la “tendencia” a considerar la labor del abogado “como al alcance de simplificaciones que aparecen en las redes”, sin tener en cuenta que “nuestro desempeño es el resultado de estudios profundos y la aplicación de una metodología muy particular de cada abogado”.
Pilar Fernández Bozal, socia responsable del área de Derecho Público de EY Abogados, entiende que lo más gratificante de la profesión es “la relación con tu equipo” ya que “discutir los temas juntos, construir, crear, defender y crecer juntos crea un vínculo muy especial”. Por otro lado, destaca “ver cómo ayudas a tus clientes, cómo vas resolviendo sus problemas y mejorando su situación”. A la hora de destacar un aspecto negativo, no duda al afirmar que lo más desagradable es “tener que dar una mala noticia”. En este sentido, “hay momentos muy duros, hay que aprender a mantener la distancia para mantener un buen equilibrio, aunque en ocasiones es verdaderamente difícil”.