Se convoca la Primera Huelga General del reinado de Alfonso XIII
La dificultad de poder atender derechos básicos inició la pasión de la búsqueda de lo justo
Alfonso XIII (Foto: Real Academia de la Historia)
Se convoca la Primera Huelga General del reinado de Alfonso XIII
La dificultad de poder atender derechos básicos inició la pasión de la búsqueda de lo justo
Alfonso XIII (Foto: Real Academia de la Historia)
El 13 de agosto de 1917 tuvo lugar la Primera Huelga General del reinado de Alfonso XIII. Contra algunas opiniones que culpan de las huelgas a los manifestantes, ya sean silenciosos o activos, cada vez se evidencia que los empresarios y la administración no saben prever y, lo más dramático es que, tampoco han aprendido a escuchar.
La situación social, el aumento del coste de la vida, las diferencias en los salarios, el desempleo, la dificultad para poder atender derechos básicos de ellos o de sus familiares, como los de alimentos, vivienda o educación, crean el contagioso virus que desenfrena pasión para buscar lo justo y protestar por lo injusto. Ningún empresario debe mirar hacia otro lado y todo ministro si no sabe escuchar, debe tener menos asesores, pero más competentes.
También ocurrió un siglo antes, en agosto de 1917 y ello pese a que España se mantenía neutral durante la Primera Guerra Mundial. Existían diversas crisis, una de signo militar iniciada por las Juntas de defensas y otras políticas llevada a cabo en la Asamblea de Parlamentarios convocada en Barcelona por la Liga Regionalista y el movimiento social que motivó a la Unión General de Trabajadores a convocar la huelga, tras unirse a la idea, la Confederación Nacional del Trabajo.
En Barcelona, el territorio nacional más industrializado en aquel momento, la masa trabajadora, apoyada por la clase media, ya había enseñado sus uñas, ocho años antes durante la Semana Trágica.
En la anterior manifestación de diciembre de 1916, patronos y administración mantuvieron su ceguera y su sordera. Así nació la primera huelga general del reinado de Alfonso XIII. Fue además revolucionaria, como indicaba el manifiesto que era huelga sin plazo de finalización, siendo el arma más poderosa que posee la clase trabajadora para reivindicar sus derechos y para obligar a cambios fundamentales para garantizar condiciones decorosas de vida.
Las fuerzas del orden la reprimieron, pero hubo más de 70 muertos, el doble de heridos y dos mil detenidos. Los integrantes de Comité de Huelga, juzgados y condenados en septiembre de 1917 por sedición a cadena perpetua. El rey despidió a Eduardo Prieto y nombró al liberal García Prieto. Se convocaron elecciones para marzo 1918 y el pueblo eligió, entre otros, a los condenados que fueron amnistiados. Ha pasado un siglo y parece que los políticos desconocen la historia repetitiva de nuestro país.