Connect with us
Estilo de Vida

Deja de fumar en cinco pasos

El tabaco se convierte en una necesidad al incorporarlo en nuestro día a día, pero es una rutina que hay que parar

(Foto: Pixabay)

María González Villasevil

Redacción editorial E&J




Tiempo de lectura: 3 min

Publicado


GUARDAR CONVERTIR A PDF


Estilo de Vida

Deja de fumar en cinco pasos

El tabaco se convierte en una necesidad al incorporarlo en nuestro día a día, pero es una rutina que hay que parar

(Foto: Pixabay)



La dependencia de consumir tabaco es un vicio que no aporta ningún beneficio a nuestra salud ni a la de los que están a nuestro alrededor. Aún sabiendo las consecuencias perjudiciales que tiene para la salud, es un hábito del que cuesta deshacerse.



Esta adicción resulta difícil de abandonar porque se incorpora en nuestra cotidianidad como una rutina y su consumo se convierte en una necesidad que cubrir diariamente. Las razones para dejarlo son muchas pero sólo será efectivo el cambio cuando la decisión es propia, es decir, cuando uno mismo decide firmemente que quiere parar.

Existen una serie de pasos o consejos habituales que recomiendan seguir los expertos y quienes ya han superado esta adicción y que si estás interesado en poner práctica deberías leer:

  1. Plantéate motivos para dejarlo

El primer paso que se debe tomar para dejar atrás tu época de fumador es convencerse a uno mismo de que no quieres seguir fumando. Ayuda tener una o varias razones de suficiente peso como para renunciar a ello, ya sea salud propia, la de tu familia o por motivos económicos. Cuando tengas la motivación clara recuérdatela todos los días.



Si no estás seguro de cuál es el motivo por el que lo haces, responde a estas preguntas: ¿Cómo está el tabaco afectado a mi salud? ¿Qué me estoy perdiendo mientras fumo? ¿Qué me perderé en el futuro por fumar ahora? ¿Cómo mejorará mi vida cuando deje de fumar?

(Foto: E&J)

  1. Haz un plan

Márcate una fecha en el calendario como el día que vas a dejarlo definitivamente y cumple con ello pero antes de esa fecha debes ir reduciendo progresivamente el consumo de cigarrillos diarios. Es más fácil si de un día para otro pasas de dejar de fumar uno, dos o tres cigarros a si dejas de fumar un paquete entero.

Limpia la casa y el coche para que no haya restos de nicotina, de cigarros ni de olor a tabaco en esta nueva etapa. Cambia las rutinas a las que tienes asociadas el consumo de este producto, por ejemplo, si antes te fumabas un cigarro después del café prueba a sustituir la hora del café o su consumo por otro producto.

  1. Reemplaza la nicotina

Haz un cambio en tu estilo de vida. Ya se ha mencionado que cambies las rutinas pero también debes modificar tus hábitos diarios para evitar asociar lo que hacías en tu época de fumador con la nueva etapa libre de humo. Por ejemplo, puedes probar a comer a diferente hora o en un sitio distinto de la mesa o incluso de la casa. También puedes comenzar a practicar más deporte, te aliviará de la necesidad de estar fumando.

Tu cuerpo te pedirá cubrir hábitos orales, es normal que la ansiedad del proceso te haga querer comer más, sustituye la rutina de acercar un cigarro a la boca por comer pipas, caramelos, chicles o chupachupas. También puedes acudir a la farmacia y probar que tal te funciona con los parches.

  1. Ponte metas y retos

Establece metas que conseguir a corto plazo mientras estás dejando de fumar. Servirá como punto de motivación para que, si consigues una, al mismo tiempo estarás logrando la otra. Es como si hicieras un contrato contigo mismo para aumentar tu confianza en el reto que estás haciendo. Por ejemplo, prueba a echar en una hucha todo el dinero que te solías gastar semanalmente en comprar tabaco.

(Foto: Pixabay)

Cuando cumplas esas metas recompénsate para celebrarlo, yendo a algún sitio, comprándote algo, quedando con amigos, etc., toda opción es válida siempre que no implique recompensarse con un cigarro. Recuerda que, aunque creas que si te fumas sólo uno no pasa nada, ese será el comienzo para querer más y volverás a la casilla de inicio. Todo progreso habrá sido en vano.

  1. Busca apoyo

Comenta a tus familiares y amigos la decisión que has tomado, sus felicitaciones por tu iniciativa te harán sentirte más orgulloso de lo que estás haciendo. Al mismo tiempo, si alguno de ellos es fumador, evitará fumar en tu presencia para hacerte caer en la tentación de que tú te enciendas uno.

Si la situación se complica más de lo que creías busca apoyo emocional en otros lugares, como en la práctica de la relajación o en los programas existentes que ayudan a las personas a dejar de fumar. Allí te darán consejos para sobrellevar la situación cuando tengas necesidad de querer encenderte un cigarrillo y podrás hablar con ex fumadores que te contarán su experiencia personal para que te sirva de referencia.

1 Comentario

1 Comentario

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *