Dime qué tipo de piel tienes y te diré qué cuidados necesitas
La guía definitiva para conocer tus necesidades faciales según tu tipo de piel
(Imagen: E&J)
Dime qué tipo de piel tienes y te diré qué cuidados necesitas
La guía definitiva para conocer tus necesidades faciales según tu tipo de piel
(Imagen: E&J)
Es importante cuidar bien la piel de nuestro rostro con productos específicos para la misma, al igual que nuestro cuerpo y nuestro cabello, cada zona de la piel necesita un cuidado específico, ya que el pH es distinto y también sus necesidades.
Aunque parezca un dato obvio, mucha gente desconoce qué tipo de piel tiene y la maltrata inconscientemente. Para lucir una piel sana y cuidada es importante conocer qué tipo de piel tenemos y adaptar nuestra rutina de skincare a sus necesidades.
Aquí os traemos una guía para saber qué tipo de piel eres y qué necesitas para cuidarla adecuadamente.
Existen, de modo general, tres tipos de piel: seca, grasa y mixta.
Para averiguar cuál es la nuestra debemos seguir los siguientes pasos:
- Lavarnos la cara únicamente con agua
- Dejarla secar y esperar 30 minutos sin aplicarle ningún producto
- Observar y analizar la piel
- (Paso extra) Utilizar un papel matificante sobre nuestro rostro y observar la cantidad de grasa que transfiere
Al analizar nuestra piel debemos saber que: si tras dejarla reposar aparece grasa por algunas zonas de la cara como la frente, la nariz y el mentón (zona “T”) tenemos una piel mixta. Si además de en estas zonas, producimos grasa en los pómulos y otras partes del rostro, hablamos de una piel grasa. Y sí notamos la piel tirante y con nada o poca grasa en la zona “T”, somos del team piel seca.
Piel mixta
Se caracteriza por la aparición de impurezas y brillos en la zona T, mejillas más secas, poros dilatados y granitos y espinillas ocasionales.
Consejos para rutinas de piel mixta
- Limpiadores que eliminen la grasa sin resecar la piel y no más de dos veces diarias
- Prueba el multimasking para las distintas zonas del rostro según su necesidad, una o dos veces por semana
- Sérums que calmen e hidraten tu piel
- Protectores solares en formato gel (que son menos grasos)
- Usa exfoliante una vez a la semana
- Hidratar todo el rostro
- Lavarnos con agua fría o tibia
- No te toques la cara con las manos
Piel grasa
A las características de la piel mixta se le añaden, además: grasa en las mejillas, puntos negros, sensación oleosa y brotes de acné.
Consejos para rutinas de piel grasa
- Limpiador suave por la mañana y noche
- Usa ácidos como AHA, BHA o PHA para una exfoliación suave
- Crema hidratante de textura ligera
- Sérum con activos reguladores del exceso de sebo
- Usa exfoliante suave una vez a la semana
- Aplica mascarillas de arcilla una o dos veces por semana
- Evitar productos que resequen la piel
Piel seca
Se caracteriza por la aparición de descamación, picazón y tirantez
Consejos para rutinas de piel seca
- Limpiadores suaves
- Hidrata inmediatamente después de la limpieza con una crema muy hidratante
- Usa mascarillas nocturnas al menos una vez por semana
- Usa bruma facial de manera constante durante el día
- Sérums hidratantes antes de la crema
- Utiliza protector solar
- No te laves con agua caliente
Además, sea cual sea tu tipo de piel, puedes tener una necesidad de cuidado extra muy común, la piel sensible, que se caracteriza por la aparición de descamación, enrojecimiento, sequedad, sensación de ardor y/o hinchazón. Si tras hacer la prueba aparecen signos de irritaciones o rojeces, tenemos esta condición en nuestra piel.
Piel sensible
La piel sensible puede aparecer debido a distintos factores, como la contaminación, los aditivos de los cosméticos, estrés, genética, detergentes e incluso, por los cambios de temperatura.
Consejos para rutinas de piel sensible
- Aplica tónico en las áreas sensibles
- Usa mascarillas de efecto calmante
- Usa productos suaves
- Asegúrate de que tus productos tengan una fórmula especial para pieles sensibles
- Prueba productos 100% naturales y evita los que contengan alcohol
- Nunca uses mascarillas peel-off y exfoliantes agresivos
- Utilizar agua fría o tibia