Jessica Lange se plantea su retiro por la falta de creatividad en Hollywood

La gran Jessica Phyllis Lange es una de las pocas actrices estadounidenses que posee la denominada triple corona, es decir, la victoria en los premios Oscar, Emmy y Tony. Su talento y esfuerzo le llevaron a debutar en King Kong (1976) como Dwan, la protagonista icónica del filme. Desde entonces, no ha cesado de recibir galardones por sus interpretaciones en la pequeña y gran pantalla lo que le ha hecho ganarse la admiración de los fanáticos y los críticos de Hollywood. Lange siempre ha destacado por su rebeldía y, actualmente, está planteándose su retirada a los 74 años, no por temas de salud, sino por la decadencia de la industria, un aspecto que lleva criticando varios años.

La interprete estadounidense cuenta con una esplendida carrera en el mundo del séptimo arte con casi cinco décadas de ambiciosos proyectos e importantes obras. Su trabajo personal se ha visto recompensado con el reconocimiento de los galardones más importantes del cine ya que cuenta con dos premios Oscar, cinco Globos de Oro, tres Emmy, un Tony y el premio del Sindicato de Actores. Es reseñable que casi ningún actor ha conseguido tal mérito y destaca que está a un Grammy de entrar en los EGOT, una aclamada lista de artistas que consiguen hacerse con los galardones más importantes de Estados Unidos. Actualmente, tan solo 18 personas figuran en el registro en el que destacan Viola Davis, Rita Moreno o Audrey Hepburn.

Primeros años

Lange nació en Cloquet, Minnesota, Estados Unidos, el 20 de abril de 1949 en el seno de una familia humilde. Su padre trabajaba como maestro y comercial y su madre se ocupaba de las tareas del hogar. El matrimonio tuvo cuatro infantes, dos hermanas mayores, Jessica y un hermano pequeño.

Jessica Lange y Francisco Grande (Foto: Antón Castro – Blogia)

Decidió estudiar el grado de Bellas Artes en la Universidad de su estado. Tras finalizar sus estudios, quiso ampliar sus conocimientos en pintura, pero al no haber plazas, acabó matriculándose en fotografía donde conoció a su primer marido, el español Francisco Grande que resultó ser su profesor.

El matrimonio vivió de manera nómada por toda España y acabaron instalándose en París, donde trabajó como bailarina y fue descubierta por un importante trabajador del sector de la moda Antonio López, quien le ayudó a iniciar su carrera como modelo en la agencia Wilhelmina.

Trayectoria profesional

Sus comienzos en el cine fueron plena casualidad ya que ella no pensaba en convertirse en una gran estrella, pero el equipo de producción del remake de la cinta de King Kong estaba desesperado por encontrar un rostro femenino sexy y nuevo que captase la atención de los espectadores por lo que, al ver una foto suya, decidieron que Lange daría vida a Dwan.

Jessica lo pasó mal en el rodaje del filme ya que la mano artificial del gorila le propició golpes que, según relata, casi le dejan inconsciente en más de una vez. Para los trabajadores de la industria supuso su bautismo de fuego, pero la crítica hizo especial hincapié en su físico. Con su inteligencia y esfuerzo, la actriz demostraría que no es un simple rostro bonito.

Jessica Lange en King Kong (Foto: Flashbak)

Tras pasar tres años sin realizar otra obra, obtuvo un papel en Empieza el espectáculo (1979) en el que se consolidó como actriz respetada y demostró al mundo su relevancia en el mundo del cine. Después protagonizó El cartero siempre llama dos veces (1981), Tootsie (1982), Dulces sueños (1985), Crímenes del corazón (1986), La caja de la música (1989) y Las cosas que nunca mueren (1994).

Un icono rebelde

Al cumplir los 40 años, Lange comenzó a sufrir la mirada machista que posee Hollywood respecto a sus actrices; el edadismo. Así pues, siempre ha criticado la diferencia de edad entre parejas de las películas en las que la mujer tiene que ser joven y bella mientras que el hombre, aunque tenga 60 años y poco agraciado, continúa siendo atractivo. “Simplemente, no se corresponde a la realidad”, asegura Jessica al recalcar que las mujeres pueden seguir siendo bellas y sensuales con la edad que sea.

Al sufrir la hipocresía del cine, decidió refugiarse en el teatro o la televisión para no quedar relegada a papeles anecdóticos en películas de dudosa relevancia. Esto le concedió una nueva generación de admiradores que descubrieron su increíble talento en la serie American Horror Story (2011-) de Ryan Murphy en la que la complejidad de sus papeles cautivó a los espectadores.

La actriz concedió recientemente una entrevista al diario británico The Telegraph en donde aseguró que: “la creatividad es ahora secundaria frente a los beneficios empresariales. No se hace hincapié en el arte, el artista o la narración. Se trata únicamente de satisfacer a los accionistas”.

Jessica Lange en American Horror Story (Foto: Screen Rant)

Además, ha criticado los nuevos filmes que se producen en el cine ya que las plataformas como Disney están saturando el mercado de historias de cómics y superhéroes que se centran en satisfacer a los accionistas que no tienen en cuenta la importancia de la trama, el arte y la interpretación. Se premia más la cantidad que la calidad, lo que se traduce en espectadores que toleran en menor medida un contenido que le haga reflexionar.

Jessica no soporta la falsedad y lo inhumano de la industria actual por lo que no escatima en criticar a nuevas estrellas y grandes instituciones: “los Oscar se han vuelto un disparate que nada tiene que ver con las películas. A veces te llamaban y te ofrecían un vestido, y por no ir de compras te parecía una buena idea. Pero en diez años se ha llegado a unos extremos delirantes. ¿Qué sentido tiene lucir unas joyas que no son tuyas y que encima, como valen millones, te obligan a pasar la noche pegada a un vigilante? Me resulta ridículo e indecente. Me niego a ser un anuncio de nadie, que es de lo que ahora se trata”.

Tal es su malestar con el panorama audiovisual actual que ha confesado estar replanteándose su retirada ya que no quiere formar parte de una industria hipócrita. A pesar de sus declaraciones en contra del sector donde desarrolló su carrera profesional, a Lange le queda tiempo en Hollywood ya que tiene pendiente el estreno de varios filmes como Long Day’s Journey Into Night o Places, Please.