La casa de Los Picapiedra está muy cerca de España
La construcción portuguesa organiza visitas guiadas que permiten comer en la propia residencia
Casa do Penedo (Foto: Casa do Penedo)
La casa de Los Picapiedra está muy cerca de España
La construcción portuguesa organiza visitas guiadas que permiten comer en la propia residencia
Casa do Penedo (Foto: Casa do Penedo)
Los Picapiedra (1960-1966) es una serie animada ambientada en la Edad de Piedra que refleja la clase media de la sociedad estadounidense lo que, además, le ayudó a convertirse en un contenido audiovisual muy popular. Sus divertidos personajes forman parte de los bellos recuerdos infantiles de varias generaciones por lo que la visita de la edificación que más se asemeja a su casa es un destino ideal para rememorar la juventud. Esta curiosa construcción está a tan solo 50 minutos de Oporto, Portugal.
Fafe es la ciudad portuguesa donde se encuentra esta peculiar estructura. La residencia está construida con cuatro gigantescas rocas y posee el nombre de Casa do Penedo lo que se traduce al español como “Casa de Roca”. Se realizó entre los años 1974 y 1976 con el objetivo de ofrecer a los portugueses una vivienda rural para las vacaciones. En aquella época, los trabajadores del sector turístico alababan la belleza de la morada ya que, al estar hecha con piedra, se fundía perfectamente con el paisaje natural.
Su principal finalidad es la de ofrecer una alternativa diferente a las personas que busquen una casa rural que diste de lo común. Debido a su similitud con la casa de Los Picapiedra, su popularidad se ha incrementado lo que ha ocasionado que cientos de turistas acudan al lugar para tomarse una foto. Asimismo, se realizan tours que permiten disfrutar de la naturaleza del lugar, hacer pequeñas rutas o, incluso, comer y cenar en la mismísima casa.
Interior de la casa
La morada está compuesta únicamente de piedra a excepción de las puertas, el techo y las ventanas. A pesar de que cuenta con agua, gas y una chimenea, no dispone de electricidad lo que permite que los visitantes imaginen un poco cómo era la vida de los humanos en la Edad de Piedra.
El interior de la residencia está compuesto por muebles de un marcado estilo rústico ya que están hechos de troncos. El único mobiliario que no está hecho de este material es el sofá que es de hormigón y madera de eucalipto. El exterior cuenta con un elemento turístico indispensable para cualquier visitante en el siglo XXI, una piscina tallada en la propia roca que rodea la peculiar casa.