La Lotería de Navidad en España no solo es una tradición arraigada en la cultura festiva, sino también una oportunidad para la esperanza y la suerte. Durante más de dos siglos, este sorteo extraordinario ha llevado alegría a numerosos rincones del país, con ciudades que parecen destinadas a recibir la fortuna del Gordo en repetidas ocasiones.
La suerte capitalina
Desde su inicio en 1812, se han celebrado 211 sorteos, y el Gordo ha iluminado 345 municipios distintos. Sin embargo, Madrid destaca como el epicentro de la suerte, siendo agraciada en 82 ocasiones, lo que representa el 39% de las veces. Le sigue Barcelona con 42 apariciones, superando a otras ciudades en este privilegio. Esta tendencia se mantiene, ya que en ninguna otra localidad ha caído el Gordo más de 20 veces, excepto estas dos metrópolis. Le siguen Sevilla, Bilbao y Valencia en el ranking de repartos. Estas ciudades cuentan con un acierto de 17, 14 y 13 veces, respectivamente.
Pese a la rareza de la suerte, la gran mayoría de las ciudades han sido testigos del Gordo en este siglo. Más del 85% de los municipios afortunados han celebrado este premio en el siglo XXI, mostrando un cambio en la distribución de la fortuna a lo largo del tiempo.
Una mujer guarda en la cartera el décimo de lotería de Navidad que ha comprado en una administración. (Foto: EFE)
Es importante mencionar que la ciudad autónoma de Melilla sigue siendo la única donde nunca ha caído el Gordo, mientras que Ceuta y Ávila solo lo han celebrado una vez. Por otro lado, Guadalajara es la única provincia en la que el Gordo no cae desde hace más de 20 años, con su última aparición en 1970.
Las estadísticas revelan que, aunque casi todas las provincias han acogido al Gordo al menos una vez, seis capitales de provincia, incluyendo Tarragona, Jaén, Toledo, Girona, Melilla y Ávila, nunca han sido agraciadas con este codiciado premio. En contraste, Bilbao se ha convertido en una excepción, al celebrar el premio las 14 veces que ha tocado en Vizcaya.
El reparto del Gordo se ha vuelto más diversificado a lo largo de los años. El sorteo de 2018 alcanzó la mayor dispersión, con premios vendidos en 186 municipios distintos. Este incremento en la distribución se atribuye al aumento en el número de números y series en el sorteo, pasando de 56,000 a 100,000 números y de 12 a 180 series desde 1969.
La historia del Gordo de Navidad revela cambios significativos en la frecuencia de los premios a lo largo de las décadas. Desde la década de 1930, se normalizó que el primer premio cayera en múltiples municipios, aumentando significativamente en las últimas décadas. Por ejemplo, en los años 80 se expandió a más de 11 municipios y, en la última década, se repartió en más de 50 localidades en dos ocasiones.
Este análisis exhaustivo demuestra que la suerte no distingue entre fronteras, pero ciudades como Madrid y Barcelona mantienen una relación especial con el Gordo de Navidad. A medida que las series y números se multiplican, el sorteo se convierte en un evento que une a todo el país en la esperanza y la ilusión de un premio que puede cambiar vidas en esta época tan especial del año.