¿No pasas por tu mejor momento emocional? Estos alimentos te ayudarán a salir del «bucle de la depresión»

Existe una conexión real entre el intestino y el cerebro. Lo que comemos influye directamente en nuestro estado emocional. Esto se debe a la serotonina, un neurotransmisor relacionado con el control de las emociones y el bienestar. Cuando los niveles de serotonina aumentan en nuestras redes neuronales, experimentamos sensaciones de bienestar, relajación, satisfacción, mayor concentración y aumento de la autoestima. Para promover la producción de serotonina, necesitamos una sustancia llamada triptófano, que solo podemos obtener a través de los alimentos.

Diversos estudios indican que cuatro millones de personas en España sufren de depresión y que el 15% de la población experimenta estrés o ansiedad. Por lo tanto, entender cómo funciona este neurotransmisor adquiere mayor importancia si cabe. Algunos alimentos que aumentan la producción de triptófano son:

• Pescados grasos como el salmón y el atún.
• Huevos, espinacas y otros vegetales de hoja verde.
• Semillas como las de calabaza y chía.
• Frutos secos como almendras y nueces.
• Legumbres.
• Carnes de pavo y pollo.

Para aumentar la producción de serotonina de manera natural, es recomendable mantener una dieta equilibrada que incluya una buena cantidad de proteínas en cada comida, junto con carbohidratos complejos, ya que estos últimos facilitan la absorción del triptófano y su paso al cerebro. Para aquellas personas que atraviesan momentos difíciles emocionalmente, se recomienda consumir regularmente estos alimentos y mantener horarios regulares entre las comidas, ya que ayuda a estabilizar los niveles de azúcar en la sangre y puede tener un impacto positivo en el estado de ánimo.

La comida «rápida», la peor solución

Todos hemos recurrido a la comida «basura» en alguna ocasión como consuelo en momentos de estrés o de bajo ánimo. Sin embargo, esta «solución» temporal no es efectiva a largo plazo. Aunque este tipo de alimentos pueden proporcionar un breve «impulso» de felicidad, su efecto es temporal y su abuso puede causar fluctuaciones emocionales en la salud mental.

Por lo tanto, es importante evitar el consumo excesivo de azúcares simples, grasas saturadas y alimentos altamente procesados. Además, es recomendable limitar el consumo de cafeína y alcohol, ya que pueden alterar los patrones de sueño y, por ende, la producción de serotonina.