¿Qué es cibercondría?

La preocupación por la salud de uno mismo puede llegar a un límite en el que se convierte en un problema. Esta situación se ha agravado durante los últimos años, como consecuencia de la proliferación de información médica en Internet y las enormes facilidades que los usuarios tienen para acceder a ella. Esto tiene un nombre: la cibercondría, y afecta en cada vez más proporción al público. Las compañías ligadas a la Sanidad incluyen en su seguro de salud completo información médica relevante, a fin de tratar de que la persona encuentre el equilibrio entre su problema real y los datos e informaciones que puede encontrar en la red.

De hecho, con datos obtenidos del V Estudio de Salud y Vida de la aseguradora Aegon un 52% de la población española busca en internet información acerca de síntomas y causas con la finalidad de encontrar un diagnóstico para su problemática.

Asociada a un problema en el cuerpo de una persona, la cibercondría se traduce en un estado de ansiedad, generada por la obsesión por la salud. Esto significa que el usuario busca continuamente y de forma obsesiva información en buscadores y en RRSS, siendo los buscadores el principal canal de búsqueda de información por parte de los usuarios. Sin embargo, según el estudio, se ha contemplado un incremento del uso de las RRSS como medio para buscar información (10,2% comparado con el 4,9% del 2022), a fin de confirmar o descartar que los síntomas que tiene representan una enfermedad real.

Cibercondría (Foto: Freepik)

Un hábito cada vez más común entre muchos ciudadanos que puede convertirse en una adicción. Un golpe en la pierna, un ligero dolor de cabeza o un salpullido en la piel. Cualquier motivo es válido para buscar rápidamente información relacionada para saber si esta situación puede devenir en una enfermedad de gravedad.

Es una acción impulsiva que lleva a la obsesión por la salud. Dicho exceso de preocupación desemboca en un estado de ansiedad que, en este caso sí, puede tener consecuencias negativas para la persona afectada.  Referente al perfil, según el estudio de la aseguradora se observa que las mujeres son más propensas a informarse y a buscar en internet para encontrar una solución a una enfermedad (un 55% frente al 48,4% de los hombres).

Cómo detectar y combatir la cibercondría

Al igual que cualquier otra adicción, una inquietud excesiva que deriva en un vicio tiene en la detección del problema como el primer paso para su solución. Saber cómo detectar la cibercondría es clave para aprender cómo combatirla. La sensación de angustia porque no encontramos información certera sobre una cuestión médica, la dedicación de mucho tiempo a la búsqueda o el planteamiento continuo de que podemos tener una enfermedad grave y al aumento del ritmo cardiaco ante estas situaciones son los principales síntomas de qué algo falla.

Cibercondría (Foto: Freepik)

Varias terapias pueden servir de alivio ante este problema o incluso conseguir que la persona lo supere por completo. A nivel particular, una vez hemos detectado la situación, un buen punto de partida es evitar el autodiagnóstico.
El usuario puede seguir buscando información en Internet ante un posible síntoma, pero nunca debe realizar un análisis propio que extraiga conclusiones médicas. Es mejor, ante la duda, acudir a un profesional que sí que está capacitado para realizar un informe acorde y proponer el tratamiento adecuado.