Connect with us
Reportajes

Abogados en causas penales denuncian que la aplicación ‘Horus’ genera indefensión

En Madrid, el ICAM ya ha dado amparo a varios abogados que lo han pedido ante la situación que sufren

Pantallazo del visor 'Horus' que tantos quebraderos de cabeza genera a abogados y procuradores. (Imagen: Ministerio de Justicia)

Luisja Sánchez

Periodista jurídico




Tiempo de lectura: 8 min

Publicado




Reportajes

Abogados en causas penales denuncian que la aplicación ‘Horus’ genera indefensión

En Madrid, el ICAM ya ha dado amparo a varios abogados que lo han pedido ante la situación que sufren

Pantallazo del visor 'Horus' que tantos quebraderos de cabeza genera a abogados y procuradores. (Imagen: Ministerio de Justicia)



Aquellas quejas sueltas se han convertido en generalizadas. Muchos abogados penalistas en la Audiencia Nacional se las ven y se las desean para gestionar las macrocausas, con miles de archivos, a las que acceden a través de la aplicación ‘Horus’, un visor que genera muchos problemas.

Las causas no tienen orden como en papel y el índice electrónico es aleatorio; se habla ahora de acontecimientos, pero los asuntos no están foliados. En esta situación el Ilustre Colegio de la Abogacía de Madrid (ICAM), que también ha denunciado el problema, ya ha amparado a varios abogados por la situación de indefensión que sufren.



El problema se ha detectado en los últimos meses, primero en la Audiencia Nacional y en sus vistas penales, luego en otros juzgados. Hay abogados de grandes despachos que pueden asumir el uso del ‘Horus’ porque tienen en sus despachos gente de apoyo para la gestión del expediente. Sin embargo, el problema son la gran mayoría de abogados y abogadas de a pie, que desde su despacho o por el turno de oficio les llegan asuntos con miles de archivos desordenados a través de esta aplicación. Ahí ha saltado la alarma.



Los abogados y procuradores en vía Penal se quejan de los expedientes electrónicos que les llega vía ‘Horus’. (Imagen: Audiencia Nacional)



Es un problema grave

Un abogado como Antonio Abellán, aclara que “tenemos un problema grave, porque pese a lo que se dice legalmente de la implantación total del expediente electrónico, eso no es así. El tránsito del expediente en papel, ordenado y foliado, al digital no es el adecuado. Con el expediente judicial electrónico se genera mucha inseguridad entre los profesionales. Cada letrado de la Administración (LAJ) lo organiza de una manera, y coexisten expedientes que aún maneja en papel el órgano judicial, al igual que el fiscal, y al letrado le dan traslado desde la aplicación ‘Horus”.

Para este letrado “habitualmente a esa causa digital le suele faltar información. Para pedir que te manden la causa completa hay que hacerlo desde el sistema ‘Acceda’, una petición que se tarda en recibir. Esta situación es grave porque afecta directamente al derecho a la defensa desde su origen. Lo primero que debe hacer un abogado defensor es informarse. Este cambio se ha intentado hacer desde la Ley 18/2011 pero de forma incompleta. El Real Decreto-ley 6/2023 deja claro que no hay vuelta atrás. Además, la Audiencia Nacional funciona de una manera, el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Madrid de otra, y los órganos centrales Audiencia Nacional, Tribunal Supremo y Constitucional de otra”.

Antonio Abellán cree que no hay igualdad de armas entre jueces y fiscales con los abogados defensores por ese expediente electrónico. (Imagen: cesión propia)

A juicio de Abellán, “con cada órgano judicial hay un problema, el papel de los LAJs deja claro que organizan el expediente judicial como quieren. Cuando te llegan son carpetas, que no están ordenadas y que contienen lo que el LAJ cree oportuno. Ellos los llaman acontecimientos que no están ordenados. Al mismo tiempo el visor ‘Horus’ que maneja el fiscal y el juez tiene más funcionalidades que las que tiene el abogado, como las de textualización de las grabaciones de las declaraciones y juicios. Eso hace que el recurso de apelación del fiscal se haga con más facilidad al tener esta tecnología. No parece lógico que los operadores jurídicos tengamos diferentes aplicaciones informáticas. No hay igualdad de armas electrónicas”.

Según Abellán —que ha tenido estos problemas en la Audiencia Nacional y en otros juzgados—, por el momento los juzgados echan balones fuera, “dicen que el expediente está a disposición del letrado y que como está obligado a relacionarse por los medios electrónicos tiene que asumir esa situación. Ahora el LAJ no certifica la causa argumentando que ya no hay folios. Para iniciar la defensa debemos tener la misma documentación que la acusación. Es difícil así hacer el escrito de defensa inicial si no tienes toda la información”.

Para este letrado la solución pasa porque “el expediente judicial electrónico sea el mismo en todo el territorio nacional. Cada comunidad autónoma tiene su herramienta o aplicación y no se conecta con las demás. Debe haber unos parámetros de ordenación, el principal es el criterio cronológico, como en los expedientes en papel. Al mismo tiempo hay que definir bien lo que es el índice electrónico, debe numerarse, sin saltos de numeración, a no ser que haya secretos de actuaciones. El letrado tiene derecho a ver ese expediente de la misma manera que lo ve el tribunal, con las mismas aplicaciones y visor”.

La reacción del ICAM

Javier Mata, diputado de la Junta del ICAM y responsable de Defensa de la Abogacía, reconoce las quejas que han llegado en las últimas semanas sobre el visor ‘Horus’, que impide que el abogado prepare su defensa penal. La entidad colegial ha lanzado Guía de Derechos de la Abogacía ante la Justicia Digital, un documento clave que denuncia los problemas de la plataforma ‘Horus’ y el Expediente Judicial Electrónico (EJE), y establece garantías mínimas para que la transformación digital no vulnere los derechos fundamentales de los profesionales de la abogacía. En el documento se incluye un decálogo con 10 principios esenciales para garantizar el acceso a la justicia digital.

A su juicio habría que crear una comisión estatal técnica, donde estuvieran representados, abogados, procuradores; jueces y graduados sociales con el equipo técnico. “En los temas penales te mandan el expediente cuando se abre el juicio oral, no viene por orden cronológico, viene por acontecimientos que no sabemos lo que es. Es un índice electrónico distinto y no está foliado por el sistema. Las carpetas que se reciben tienen documentos distintos que es lo que hace que al abogado le vuelva loco. Al final hay una desigualdad de armas evidente, juez y fiscal tienen el expediente ordenado, el abogado, no”.

La entidad colegial está dando amparo a los abogados que denuncian esta situación por su indefensión en estos procedimientos. “No pueden hacer su trabajo en condiciones y eso hace que les amparemos. Queremos que el abogado que tenga un problema de este tipo nos lo comunique. Si el problema le genera indefensión, debe utilizar las actuaciones procesales porque esta situación puede generar nulidad de actuaciones. La solución pasa porque si se hacen desarrollos tecnológicos compartan el proceso de creación con todos los operadores que están implicados, no solo con los LAJs”.

Para este jurista “tenemos que saber realmente que el expediente que nos ofrece el LAJ esté completo. La única manera es que esté foliado y que haya una diligencia del LAJ diciendo la composición del expediente, pero ahora la realidad es distinta, no sabemos la composición de ese expediente real y se organiza según criterios del LAJ, con lo cual la situación es complicada. Al final esto genera más papel y terminas imprimiéndolo para organizarlo con orden cronológico, con lo cual aquello del papel cero no se cumple”.

El problema se acrecienta por la falta de interoperabilidad del ‘Horus’, “en Castilla- La Mancha la herramienta se llama ‘Acceda’. Eso genera problemas de interconexión entre esos sistemas. Cataluña y País Vasco por su parte tienen sistemas propios, para presentar un escrito ellos no tienen LexNet, sino que tienen su sistema. Parece que hay problemas para los abogados de fuera de estas comunidades autónomas porque tienen que manejar esos sistemas específicos para presentar sus escritos. Por el momento nos dicen que la petición de acceso y la autorización es complicada”.

Los próximos pasos del ICAM, aclara Mata, son “poner en marcha una campaña de comunicación en colaboración con los procuradores para que los colegiados nos comuniquen sus incidencias y las propuestas que hacen. Al mismo tiempo queremos crear una Comisión de Trabajo con los LAJs y los técnicos del Ministerio de Justicia para crear una herramienta que nos sirva a todos los operadores jurídicos, no solamente a ellos. Hace años hubo problemas serios con la aplicación ‘Libra’ que nadie sabía manejar. Durante años estuvo operativo sin funcionar bien. Con ‘Horus’ debemos evitar este tipo de incidentes”.

Javier Mata aclara que el ICAM ya está amparando a los abogados con problemas con el ‘Horus’. (Imagen: ICAM)

El problema se complica porque cada comunidad autónoma, con competencias transferidas, regula de una manera el expediente judicial electrónico. Ernesto Casado, presidente del Consejo Nacional de Letrados de la Administración de Justicia (CNLAJ) confiesa que “hemos comprobado que los abogados no tienen claro lo que es un índice electrónico. Este índice sustituye al foliado de los documentos. La normativa que regula la Administración de Justicia electrónica y en mi caso las relaciones con la Administración así lo dice. Eso garantiza que lo se entrega es eso. Hemos sustituido a los cajones de papel, ‘Horus’ es mejorable, sin duda”.

Suspender la vista

Santiago Luengo, abogado con despacho propio, es uno de los fundadores de la asociación ALTODO hace unos 20 años. Este letrado que lleva asuntos penales y contenciosos de forma habitual señala que “la ley contempla dos posibilidades de actuaciones penales, una que te den el original de la causa, que se dejó de hacer algún tiempo cuando empezaron a escanearse las causas hasta que entró en vigor el expediente judicial electrónico y la plataforma ‘Horus’. No había ningún problema, abrías un PDF con todo ordenado y tenías los mismos documentos que juez y fiscal”.

Sin embargo “ahora lo que nos dan es un sistema al que se van incorporando carpetas sueltas a este expediente judicial electrónico; por eso las carpetas no están ordenadas. Hay expedientes que son miles de archivos que no tienen ningún orden. Tienes que abrir cada carpeta y ver qué contienen. Al mismo tiempo, al abrir la carpeta, los archivos no están numerados. Algunas tienen 150 archivos sin ningún orden y concierto, además, no tienes la certeza de si el orden enviado por el LAJ es el adecuado”.

Para este abogado esta cuestión genera tres problemas claros, “el primero la inseguridad de saber qué va a antes que el resto, y ese orden en un expediente judicial es imprescindible para seguir el asunto para ver si hay dilaciones indebidas o para saber la prescripción penal de la causa. En algún traslado cuando he pedido el original he visto que faltaban folios.  No puedo saber si están o no si no lo contrasto con el original. Otra segunda cuestión es que al fiscal le dan el documento original. Al final no ha igualdad de armas entre las partes”.

Santiago Luengo ya ha tenido problemas, ha pedido la suspensión de uno de sus asuntos por el problema de ‘Horus’. (Imagen: cesión propia)

El letrado señala que “al final te das cuenta que el fiscal y el juez tienen el mismo expediente, pero los abogados de la defensa no. Ahora los folios se llaman acontecimientos y luego localizar dentro de cada uno de ellos el folio adecuado. En el momento que te dan la causa y tienes que hacer el escrito de defensa, desde el primer minuto alegamos estos inconvenientes porque no podemos trabajar en esas condiciones. Le pido al juzgado que suspenda el plazo para hacer esa calificación y pedimos el original, algunos juzgados nos lo mandan en papel o escaneados. Si falta alguno lo pregunto en el juzgado”.

Para Luengo “el principal perjudicado de toda esta situación es el propio ciudadano implicado en ese asunto, ya que su abogado va a juicio y no sabe de qué documentos se están hablando. Esta situación que ahora se ha generado si el juez de instrucción insiste en que hagamos el escrito de defensa sin esa documentación puede generar la suspensión de la vista. Se trataría de presentar un escrito en el que señalamos que no conocemos el procedimiento y que nos oponemos a que siga el asunto por vía judicial. Sería una cuestión previa que planteásemos a la vez al juzgado de lo Penal o a la audiencia correspondiente”.

Este jurista, que tiene un asunto suspendido en un juzgado de Leganés, entiende que “esta es una postura extrema. Por eso solicité el amparo de mi colegio de abogados, en este caso el ICAM, que me lo ha dado, con lo cual ya tengo las espaldas cubiertas ante el juzgado. Ellos han visto que es una locura la jurisdicción Penal. Es curioso porque ante el traslado de los expedientes contenciosos-administrativos no estoy teniendo ningún problema. Me lo dan todo por vía telemática, en PDF y foliado. El problema viene en Penal, también llevo temas laborales y de Seguridad Social y la información que nos llega es numerada”.